Imágenes paganas: cristianismo y paganización en Europa
Por Enrique de Zwart
…van celebrando un ritual ignorado.
Mis propios dioses ya no están, espejismos.
Quienes hayan vivido cierto tiempo en el brumoso norte europeo habrán seguramente notado la descristianización de la sociedad en varios rubros. Uno de ellos es la virtual desaparición del matrimonio, entendido en modo cristiano. Lo que lo ha reemplazado es una suerte de cohabitación indefinida que, más adelante, puede tener o no algún reconocimiento formal-civil por razones económicas e impositivas. Lo sepan o no sus practicantes esto representa el retorno a una vieja tradición pagana europea en la cual el matrimonio es simplemente la confirmación de la paternidad,
y la capacidad de crear una familia es social y económicamente más importante que el derecho a tener relaciones. Esta tendencia se ha consolidado en los países nórdicos donde el matrimonio se encamina a ser una institución en vías de extinción. En los últimos años ha crecido también en España, Italia y tierras otrora de raigambre y moral cristiana.San Bonifacio hachando el Roble de Thor en Hessen. Grabado de Bernhard Rode, 1781.
¿Es el cristianismo en Europa “algo del pasado” como me dijo un conocido, antes protestante ahora seguidor de la teosofía steineriana? Por un lado las iglesias vacías parecieran confirmarlo. Por otro los diversos partidos y grupos políticos con fuertes connotaciones anti-sistema que brotan desde Francia a Hungría, de Inglaterra a Austria, pasando por Bélgica e Italia, parecieran darle la razón a Oswald Spengler cuando dijo que “la teología cristiana es la abuela del bolchevismo”. Con esto se refería a que la promoción por parte del cristianismo de ideas con tinte universal, de igualdad, hermandad y altruismo −es decir variantes de la caridad mal o bien entendida− ayudaron a establecer y legitimar políticas invocadas luego por socialistas y comunistas. Y ese temor se ve reflejado en estos nuevos grupos identitarios que sostienen que el cristianismo está socavando a Europa debido a un “universalismo excesivo”. Un universalismo que rechaza toda distinción de raza, étnica, clase, e inclusive nación.
¿Cómo se llegó a esta situación si hace apenas un siglo Hillaire Belloc nos enseñaba que la Fe es Europa y Europa es la Fe? En nuestra ayuda acude James Russell con su notable The Germanization of Early Medieval Christianity[1]. Allí, su teoría es que los esfuerzos por cristianizar a las tribus germánicas terminaron en una notoria germanización de la cristiandad.
En efecto, el cristianismo floreció en sus comienzos en un imperio ya decadente y desarraigado, precisamente porque fue capaz de atraer a varios sectores de la población entonces oprimidos o descontentos, repugnados por el materialismo, brutalidad y banalidad de la época. Sin embargo cuando los misioneros cristianos trataron de aplicar el mismo criterio con los invasores bárbaros a partir del siglo V, invocando el universalismo, la paz y la igualdad, fracasaron rotundamente. Fallaron porque los bárbaros practicaban una religión popular con énfasis en la homogeneidad étnica, jerarquía social, gloria militar, heroísmo, y altruismo ad intra. Es decir que la cosmovisión universalista no pegó muy bien con la rudeza tribal endógena de los bárbaros.
Estos “bárbaros” germanos aludidos en el título, es necesario notarlo, fueron los que eventualmente pusieron las bases para casi todos los pueblos de Europa occidental, incluyendo España.
Debido a este conflicto entre el temprano cristianismo y la cultura indo-europea de los bárbaros, la única táctica que los misioneros cristianos podían utilizar era la de pretender adoptar ideales bárbaros y declarar que los ideales cristianos eran compatibles con ellos. Russell dedica la mayor parte de su obra a explicar cómo este proceso se llevó a cabo desde que los visigodos cruzaron el Danubio en el 376 hasta la muerte de San Bonifacio en el 754.
Inculturación con los bárbaros
¿Cómo se dio este proceso? En las postrimerías del imperio, el tejido social en las urbes romanas estaba muy dañado debido a una declinación de la solidaridad grupal y un incremento de la anomia social, ambas a su turno resultado de la urbanización, expansión territorial, inestabilidades internas prolongadas y heterogenización de la sociedad. El cristianismo se encontró con un imperio necesitado de estabilidad social, lo que le permitió –aduce Russell– atraer seguidores con promesas de redención en el otro mundo.
Los pueblos germanos, en contrapartida, no eran candidatos a la conversión ya que poseían una vigorosa religiosidad popular, estructura social cohesiva y un fuerte sentido de identificación tribal gracias a la institución del comitatus[2] que implicaba un fuerte altruismo practicado ad intra. Y como bien dice el proverbio sociobiológico “El egoísta vence al altruista dentro del grupo, pero los grupos altruistas vencen a los grupos egoístas”. Es decir, los bárbaros tenían las de ganar.
Más aun el paganismo germano carecía de concepto de pecado, ergo los misioneros tenían pocas chances de convencerlos que debían ser redimidos de éste. La esjatología[3] cristiana contrastaba con las ideas de los bárbaros sobre tiempo y heroísmo. Los misioneros optaron entonces por desenfatizar los aspectos soteriológicos[4] de la fe cristiana y acomodar el mensaje a la audiencia, inculturizándose. Oferta y demanda que le dicen. En palabras de Russell:
Ni la estructura social cohesiva, ni la herencia ideológica indo-europea de los pueblos germanos los predisponía a desear la salvación [cristiana]… Para que una religión universal sea exitosa en una sociedad de religiosidad popular que no desea salvación, debe temporariamente acomodar el ethos de aceptación del mundo de tal sociedad.[5]
Estas “acomodaciones” de los misioneros cristianos sin duda ocurrieron durante el curso del temprano medioevo. Así lo indica la correspondencia entre el papa San Gregorio Magno y el rey de Kent Ethelberto (s. VI), y también entre San Bonifacio y el obispo Daniel de Winchester (s. VIII). Varias prácticas religiosas paganas persistieron durante todo el medioevo.
Inicialmente las acomodaciones eran planeadas como una medida temporal, pero con el tiempo se volvieron permanentes resultando –de acuerdo a Russell– en una permutación de ciertos aspectos de la doctrina cristiana.
Los santos y el mismo Cristo fueron presentados como héroes guerreros germánicos. Los hechos históricos de la Encarnación, la Pasión y las vidas de los santos tomaron un rol principal por sobre la esencia soteriológica-esjatológica del los primeros cristianos. Festivales y lugares sagrados de los antiguos cultos paganos fueron discretamente tomados por los cristianos como suyos. Conceptos y palabras con significado y connotación religiosa fueron sutilmente redefinidos de acuerdo a la nueva religión. En otros campos la unidad político-religiosa de los germanos se reinventó en instituciones cristianas como la Eigenkirchen y la realeza sacra. Las reliquias de los santos cobraron énfasis. De este modo, sostiene Russell, el cristianismo se apartó de su naturaleza originaria durante el temprano medioevo volviéndose una fe “germanizada”.
El resultado final no fue que los bárbaros se convirtieron al cristianismo que habían encontrado durante los primeros años de su invasión al imperio, sino que esa forma primordial de cristianismo se germanizó, adoptando finalmente muchas de las costumbres populares indo-europeas de los bárbaros paganos.
Más tarde desde el siglo VII los misioneros anglo-sajones e irlandeses, bajo el amparo de los ya convertidos francos, predicaron a los barbaros continentales con la misma metodologia de “inculturación” a las costumbres nativas. Notando la centralidad del poder divino en la religiosidad germánica buscaron mostrar que el poder de Cristo superaba a las divinidades locales, como mostró San Bonifacio al cortar el roble dedicado a Thor en Hesse.
Antes que Russell el jesuita Jungmann ya habia concluido que “a partir del siglo X la herencia cultural acumulada en el norte carolingio fluyó hacia Italia y se convirtió en el standard cultural en la misma Roma” y desde allí “devino normativa en todo el mundo occidental.“[6]
Simbología pagana
Los símbolos paganos adaptados por el cristianismo son más de lo que muchos, sino la mayoría, de los cristianos está al tanto. No solo los obvios con origen en el mundo romano como el idioma latín, el papa llamado Pontifex Maximus, las sotanas púrpuras de los Cardenales o el cabello cubierto de las monjas; sino también los menos evidentes con orígenes germanos.
Las celebraciones en torno al solsticio de invierno simbolizaban en antiguos ritos el retorno o aparición del sol. El cristianismo la tomó para designar las fiestas de la revelación de Jesús o Epifanía y la Navidad unos días antes, por poner sólo un ejemplo.
Los protestantes han sido, en general más conscientes de esto que los católicos, por lo que, en algunos períodos radicarles y en muchos países, la Navidad fue considerada ilegal… ¿A qué se debió esto? A que los más recalcitrantes sabían de los lazos paganos de la fiesta y, como supuestamente estaban intentando un regreso a los “orígenes” cristianos sin todo el bagaje “papista”, no se les ocurrió cosa mejor que prohibir la celebración de la Navidad. Los puritanos lo hicieron en Inglaterra en 1647-1660 acusando una “fiesta papista sin justificación bíblica”; lo mismo sucedió en Nueva Inglaterra entre 1659-1681. A pesar de que la prohibición fue levantada, en la zona de Boston recién a mediados del siglo XIX la Navidad fue de nuevo mirada con buenos ojos. Otras sectas como los quakeros, amish, metodistas y presbiterianos también condenaron las raíces paganas de la Navidad.
Quizás la propuesta más contra-intuitiva de Russell es la idea que en sus comienzos el cristianismo latino era una religión universalista que “rechazaba al mundo”[7] debido a sus raíces judías y a la influencia griega[8], opuesto a las tribus germanas que practicaban una religión popular que “aceptaba al mundo”[9]. Por “rechazo al mundo” se entiende la búsqueda de la salvación espiritual, institucionalizada en las iglesias cristianas del tardío imperio. Por “aceptación del mundo” se entiende la celebración de un culto que tiene como objetivo algún tipo de avance en este mundo, más que las promesas de redención en el próximo. La ética y la doctrina cristiana eran universales. La religiosidad indo-europea carecía formalmente de tales elementos, pero poseía características “heroicas, mágicas y religioso-políticas”. Los misioneros cristianos tenían entonces que adaptar su mensaje al ethos pagano.
La idea de guerra santa, el uso de celebraciones y lugares sagrados germánicos en la liturgia romana y el consentimiento de valores sociales germanos, son indicaciones de una apropiación y cambio por parte de la iglesia latina del temprano medioevo.
Puntos débiles
El análisis de Russell tiene varias generalizaciones –cosa que él reconoce, y algunos puntos no del todo claros:
- Deja de lado los efectos de las persecuciones y martirios a que fueron sujetos los primeros cristianos.
- Asume que los primeros cristianos tenían una identidad ya fija y marcadamente soteriológica y esjatológica; definida por un modo de vida “pacifista” derivado del Sermón de la Montaña.
- Asume también la homogeneidad, cohesión y estabilidad social de los pueblos bárbaros durante el Völkerwanderung[10]
- Las adaptaciones del cristianismo a la cultura local (inculturación) no ocurrieron solo en los pueblos germánicos. Se dieron también por ejemplo en Armenia y en Egipto. Dentro de la universalidad del cristianismo existieron varios matices.
- Finalmente, se puede argumentar que no es un “efecto colateral” del cristianismo el de ayudar a los pueblos a definir su propia identidad, sino más bien es una parte esencial de éste. Basta ver a Polonia o a la Irlanda y España de hace unos pocos años atrás para comprobarlo.
Conclusión: Levantando la apuesta
Más allá de estos puntos precarios se puede afirmar con certeza que al cristianizar a los bárbaros paganos y suprimir los aspectos más brutales de su religión (incluyendo el ocasional sacrificio humano[11]), los misioneros tuvieron que aceptar a cambio que en Europa –y a la larga en su gran diáspora global– la cristiandad fuera germanizada, o europeizada.
El cristianismo primordial que los germanos encontraron tenía muchas tendencias universalistas. Como resultado de la germanización esas tendencias fueron neutralizadas y en lo que luego vino a ser el medioevo cristiano se desarrolló una religión con fundamentos en lo que hasta hace no muy poco se conocía como valores tradicionales: familia, patria, tierra, propiedad etc. Esta “germanización” convirtió al cristianismo en una fe con gran dinámica. El cristianismo se “reinventó” y dio vida a la civilización europea por más de mil años.
Volviendo a donde comenzamos, de acuerdo a esta visión el cristianismo en su forma primaria universalista indudablemente sería la abuela del bolchevismo (“proletarios del mundo, uníos…”). Pero en su variante germanizada sería una fuente de estabilidad y orden. Durante la mayoría de su historia el cristianismo funcionó predominantemente en este segundo modo. Sin embargo hubo durante el curso de los siglos intentos de regresión al modo primario –especialmente en lo que fue la revolución protestante y su demanda de volver a la “iglesia primitiva” o en algunos casos más extremos al Antiguo Testamento. También hay ahora en la Iglesia Católica signos en tal dirección universalista y ecuménica.
Se pueden hacerle varias críticas a la obra de Russell, pero nos preguntamos si el actual rechazo al cristianismo europeizado por los antiguos bárbaros es la causa por la cual la gran mayoría de los europeos occidentales hoy en día han abandonado toda práctica cristiana o han ido incluso más allá buscando abiertamente una nueva fe pagana. Pareciera que muchos europeos estuvieran diciendo (conscientemente o no): “si la Iglesia retorna a un cristianismo pre-europeo, entonces nosotros retornamos a un paganismo pre-cristiano”.
[1] Russell, J.C. 1996. The Germanization of Early Medieval Christianity: A Socio historical Approach to Religious Transformation. Oxford University Press, 272 p.
[2] Comitatus, el vridu o código germano de honor estaba caracterizado por la reciprocidad entre dos o varias personas, incluyendo el líder y sus seguidores. Responsable en gran parte de la cohesión social entre los germanos es ya mencionado por Tácito. La fuerza del comitatus parece que excedia a veces los lazos de sangre. Sobrevivir una batalla en la que el líder había muerto era considerado vergonzoso. De acuerdo a Mircea Eliade en el sistema feudal del medioevo la esencia del comitatus fue preservada. El concepto de vasallaje es un ejemplo de ello.
[3] Seguimos el uso recomendado por el Padre Castellani para evitar malentendidos: “Esjatológico: ¿por qué “esjatológico” con jota? Porque así debe ser. Hay dos palabras morfológicamente parecidas en español: “escatológico”, que significa pornográfico —de skatós, término griego que significa ‘excremento’— y “esjatológico”, que significa ‘noticia de lo último’ —de éskhaton, ‘lo último’— las cuales son confundidas hoy día, por error o por descuido o ignorancia o periodismo, incluso en los diccionarios.” Leonardo Castellani, El Apokalypsis de san Juan (pág. 313). Buenos Aires: Dictio, 1977.
[4] Soteriología es la rama de la teología que estudia la salvación.
[5] Russell, Ibid, p 102.
[6] Jungmann, J.A. The Defeat of Teutonic Arianism and the Revolution in Religious Culture in the Early Middle Ages. Pastoral Liturgy, New York, Herder and Herder, 1962, p. 19.
[7] Cristianismo, islam y budismo son presentados en éste grupo.
[8] Las religiones paganas de Roma y Grecia tuvieron un encuentro similar con el cristianismo antes aun y fueron a su turno “de indo-europeizadas” de los tradicionales modos de aceptación del mundo que tenian las religiones populares del mundo clásico.
[9] Paganismo celta-germano, sintoísmo y la adoración a los ancestros del confucianismo caen dentro de ésta categoría.
[10] “Migraciones de los pueblos” en alemán.
[11] Si bien casi inocuos comparados a los aztecas y sus sacrificios humanos en masa, hay evidencias que los bárbaros europeos (celtas, germanos o eslavos) practicaban sacrificios humanos esporádicos. Para este lado más oscuro del paganismo europeo se recomienda ver la película El hombre de mimbre (1973).
Vínculo: http://quenotelacuenten.com/2015/03/11/imagenes-paganas-cristianismo-y-paganizacion-de-europa/
37 comentarios
Francisco de México: ojalá regresaran al paganismo pre-cristiano. Eso significaría que en la evangelización estaríamos en un terreno conocido. El problema es que lo que está creciendo no es el paganismo pre-cristiano sino el paganismo post-cristiano, que si se parece a algo no es al paganismo "inocente" de los pueblos germanos sino al paganismo decrépito de la Roma de los emperadores.
Creo que ud me confundió con el auto del libro. Esta entrada no es sino una sintesis de la obra de Russell. Me dedico solo a exponerla -con algunas apreciaciones personales- para intercambiar ideas en este foro que modera el Padre Javier. Para entender el presente hay que saber historia.
No soy un "gurú" ni tengo la bola de cristal pero no se puede negar que hubo un gran colapso en las costumbres morales y religiosas de los católicos (y otros) en el último medio siglo.
Francisco,
México es una cultura híbrida fuertemente influenciada por España, ergo algo de esto aplica también alli. Que la Virgen se haya aparecido a Juan Diego es un símbolo de esa síntesis. Me temo que si México pierde el cristianismo volverán a los sacrificios humanos paganos de los aztecas. Habrá que buscar soluciones locales.
De manera que el ecumenismo de la Iglesia, visión universal, y la Iglesia como identificación de una cultura determinada han existido siempre en Europa y, en momentos clave, los que tienen una visión universal-que suelen ser normalmente los que creen en una Patria Celestial-suelen ser bastantes menos que los otros. El elemento nacionalista es preponderante.
Menos todavía creo que la Iglesia esté retornando a un cristianismo pre-europeo. Eso nos remitiría a la época heroica de la Iglesia, donde al pecado se le llamaba pecado. ¿Quién puede afirmar que apuntemos a eso? Yo diría que más bien al contrario, incluso en altos niveles de la Jerarquía.
Se de gente en España que se sienten atraídos por esas hsitorias. De hecho la religión Asatru está reconocida en España y tiene seguidores incluso por países de América..
¿Qué hacer? Confiar, confiar siempre y perseverar.
Ya que este es un blog eminentemente sobre historia, diría una cosa, cuando yo me pongo a observar los acontecimientos históricos no puedo evitar tener la sensación de que las cosas no hacen más que seguir su camino lógico. Hay una serie de novelas del escritor Isaac Asimov, llamada "Fundación", ambientada en un futuro muy remoto en el que se han conquistado las galaxias y en la que el autor se inventa una ciencia que llama "la psicohistoria" -creo recordar-. De acuerdo a esta ciencia, su padre fundacional, desarrolla planes que predicen el futuro de acuerdo a leyes matemáticas que se asientan en el estudio del pasado. Bueno, pues cuando yo veo estas cosas la sensación que tengo es que la historia no hace más que seguir su cauce. Todo lo que está pasando es lo que se veía venir y lo que venga es lo que ahora sabemos que va a pasar. Nosotros somos humildes, somos poca cosa, solo podemos confiar en el Señor y perseverar como instrumentos de su voluntad. El triunfo solo le pertenece a Él, la verdad no puede ser doblegada.
Es cierto. Sabino Arana no entendía nada. Confundía el tradicionalismo con el nacionalismo y la religión con el clericalismo. Fue un personaje nefasto. Es hasta divertido y digno de piedad el ver como se dedicaba a euskaldunizar nombres, apellidos y a inventarse cosas. Era un tipo desocupado, un Jauncho que vivía de las rentas con mucho tiempo libre, lleno de resentimiento y con nula formación. En realidad yo creo que no estaba muy bien de la cabeza, si es que alguno lo estamos :).
La diferencia entre el tradicionalismo -según mi forma de verlo- y el nacionalismo es que el primero es -o era, hoy en día se oye cada cosas . . .- católico y el segundo pagano y por tanto tribal.
El paganismo es tribal porque el paganismo nació efectivamente en un modelo tribal de sociedad. El neopaganismo es tribal en cuanto a su intención, es tribal por imaginación, es tribalismo kitsch. No puede darse el tribalismo en una sociedad compleja en lo económico, etc, como la de hoy en día.
De todas formas yo pienso que todo esto lo que busca es el cambio de modelo de sociedad, una búsqueda de excusas. El cristianismo sigue siendo la piedra a batir.
La cruz permanece mientas el mundo da vueltas :). Lo que hoy parece un cambio drástico, el paso definitivo, se perderá en la memoria del tiempo, o se recordará pasados los años como se recuerdan los juguetes de la infancia.
Confiemos y, como se nos recuerda constantemente, recemos con humildad.
La Iglesia escocesa tenía misiones en China, la anglicana también ¿significa eso que los conversos chinos tenían que bailar al son de las gaitas para adaptarse a su religión?
El primer intento de Plutarco Elías Calles fue fundar una Iglesia Mexicana pero los mexicanos, muy patriotas en otras cosas, no acudieron al trapo y el intento fracasó.
Benedicto XVI tiene un libro, " Ser cristiano en la era neo-pagana" que apunta también a lo mismo pero yo tengo que admitir que, o no comprendo bien lo que es un pagano, o esto que está pasando ahora tiene otro nombre distinto al de paganismo. Para volver al paganismo hay que cambiar la razón por el pensamiento mítico ¿es posible una sociedad del s. XXI con ese tipo de pensamiento?
En términos clásicos marxistas leninistas, se podría decir que es la expresión de la pérdida de identidad de la pequeño burguesía, que pretende reinventarse antes que entender la naturaleza.
No obstante, cuánta de la izquierda política está encantada con esta ideología.
Si puedo inventar mi identidad sexual, porqué no podría inventar mi identidad de clase, sin limitarme a la oposición de burgueses y proletarios, sin ceñirme a la contradicción de capitalismo y socialismo.
Efectivamente, crear una iglesia nacional, esa es la aspiración de todo buen dictador. Para mi la iglesia entendida como institución hasta en eso resulta liberadora. Siempre se critica el papel político que la Iglesia ha ejercido a lo largo de la historia, es hasta cierto punto comprensible porque desde luego cometió errores pero en líneas generales, para mi, el papel mediador y regulador que pudo tener se salda con un balance positivo. Cuánto mejor hubiese ido si los príncipes europeos no hubiesen abrazado las herejías protestantes para, precisamente, conseguir manga ancha en sus aspiraciones personales.
Tus abuelos eran personas cabales, buena gente. Yo tengo gran respeto por el Carlismo. Respeto, atracción y simpatía. Yo no me siento especialmente carlista, mas bien jovellanista, creo que eran necesarias reformas en profundidad. El absolutismo se había convertido en un lastre. No se puede entender que el país pertenezca a una minoría que además no paga impuestos. Era una rémora incluso para el desarrollo económico. Pero no es de extrañar que donde más implantación tuvo el Carlismo fuese precisamente en los territorios en los que el absolutismo tenía una menor influencia, es decir en los territorios forales.
En estos territorios forales también había que cambiar cosas pero el acierto de los carlistas a la hora de predecir acerca del futuro que por fuerza tenían que producir las revoluciones liberales ahí están para el que quiera verlos.
Y sí, es imposible la vuelta al paganismo, por eso lo llamo paganismo kitsch. No es mas que una disculpa. Los argumentos que dan son absolutamente infantiles. Tipo:
Bueno, vosotros tenéis vuestro dios ¿no? Pues nosotros el nuestro. Esas cosas.
En el telediario de hace dos días en una ciudad norteamericana pusieron una enorme pantalla de rayos X, o algo similar, detrás de la cual se besaban dos personas cuyos esqueletos veían los demás. Después salían de detrás de la pantalla y aparecían dos hombres, dos mujeres, un hombre y una mujer, dos ancianos, dos jóvenes o todas las combinaciones posibles. Según explicó la presentadora la demostración era para concienciar al público de que todos somos iguales y las diferencias que establecemos son artificiales.
Naturalmente hay un buen número de científicos que saben que tal cosa es mentira pero no dicen nada. Después de tal demostración de "igualdad" te ponen la serie de C.S.I en la que un forense encuentra unos huesos humanos y establece sin duda alguna el sexo de la persona, su edad y un montón de características más, por ejemplo, la raza. Y las personas que ven las dos programas son incapaces de establecer relación alguna entre ambos. Creen el show de la ideología de género y también al C.S.I que dice lo contrario. Es cosa de locos.
Antes bien, es el fruto de una acción ideológica deliberada, la cual tiende -en general- a destruir las estructuras relacionales de la sociedad, cristalizadas por todas las razas y todas las civilizaciones desde Adán y Eva hasta hace un rato.
El caso de la IdG se trata de una aplicación de esa acción ideológica a las relaciones basadas en el sexo.
Esto forma parte de un grandioso plan de esclavización a nivel global, que busca romper el entramado del tejido social para convertir a las comunidades en masas de "consumidores", que sean manejables como rebaños mediante métodos veterinarios. Consecuencia de lo cual todos los paradigmas sobre sexo, paternidad, familia, religión, Dios, honestidad, caen en la volteada.
Uno de los grandes descubrimientos del Liberalismo (léase "tiranía de los ricos", sí, de los "ricos" que condena expresamente el Evangelio) es que se pueden reemplazar exitosamente las "cadenas" por las "ideas". Porque el hombre se maneja por ideas, entonces manejando las ideas, manejas al hombre.
Ello los ha llevado a perfeccionar la esclavitud a un nivel de sofisticación y de magnitud que los siglos no habían jamás conocido.
* No hay salvación fuera de la Iglesia.
* La idolatría te pone fuera de la Iglesia.
* La idolatría te priva de la salvación.
El Arbol de Thor era un símbolo de la religiosidad idolátrica popular, o sea fuente de extravío para las gentes.
Siguiendo el mismo criterio, en la Roma post constantineana se fueron destruyendo o reconviertiendo los templos y símbolos remanentes del paganismo.
Todo esto fue siempre muy fácil de entender. Ahora en cambio se produce confusión porque se erigen multitud de símbolos paganos, y las autoridades eclesiásticas en vez de condenarlos, hablan de "tolerancia".
Pero no es que lo que antes era malo ahora sea bueno, sino que hay un problema real en la Jerarquía de la Iglesia la cual, por ejemplo, ya no condena las herejías ni sanciona a los herejes.
Es un problema esencialmente humano, por cuya solución debemos rezar insistentemente.
(Sin ir más lejos, la solución a ese tremendo problema actual es el "leit motiv" de la existencia de este Portal religioso.)
Es cierto que el comunismo tiene algo de "hijo bastardo" del cristianismo, por ejemplo en su principio de universalidad. Cristo vino a salvar a toda la humanidad, sin distinción alguna de sexo, color, nación ni nada. En la deformación comunista, lo llaman "internacionalismo." Pero lo mismo se puede decir del capitalismo liberal, donde lo llaman "globalización." A un buen capitalista liberal le da igual tu sexo, tu color, tu nación o si eres hetero, homo o te sientes cabra y te van los perros, siempre que se puedan hacer buenos negocios contigo. Yo veo a los movimientos identitarios como una reacción frente al triunfo avasallador de la globalización capitalista, a los que lógicamente tampoco gusta el internacionalismo comunista. Pero de ahí a retornar al paganismo hay un salto que casi nadie va a dar.
Lo que en este artículo se describe como "paganismo" es todo lo contrario: es el triunfo y la exaltación del individualismo liberal relativista y globalizador, que habría escandalizado hasta a los comunistas de antaño (¡buenos eran ellos con las "degeneraciones burguesas"!) Y en materia religiosa, lo mismo: sincretismo, ateísmo y "que cada cual crea en lo que quiera"
Yo veo a los movimientos identitarios como algo reactivo, no proactivo, frente al éxito de ese modelo liberal globalizador que "les deja fuera." Así, no es extraño que rechacen también el marxismo internacionalista y el cristianismo universalista, tirando al bebé con el agua sucia. En realidad los movimientos identitarios no saben a qué atenerse, no saben de qué están a favor (a menudo entran en conflicto por ello), sólo de qué están en contra (y no todos...). Yo los veo más como un "caos ruidoso" frente a la maquinaria perfectamente engrasada de la globalización liberal-capitalista, individualista y relativista que avanza sin parar... y el comportamiento general de la gente, otro éxito más de esta maquinaria, no ningún "retorno al paganismo."
Una lesbiana de Wall Street, un jeque árabe con 4 mujeres y un chino con el carnet del Partido en el bolsillo se pueden sentar tranquilamente a una mesa y hacer negocios globales por cifras fabulosas. Un identitario español se sienta a hablar con un identitario inglés y salen reñidos por lo de Gibraltar, y ambos echando pestes de esos cristianos que dicen que Cristo vino a salvarnos a todos y no a los de un país en particular. Está claro en qué velas sopla el viento de la historia.
El análisis de Russell tiene varias generalizaciones –cosa que él reconoce, y algunos puntos no del todo claros"
Lo cual demuestra que Russell incumple la premisa básica para dar conclusiones científicas: tener en cuenta TODOS los datos.
Russell, al ignorar premeditadamente unos datos que pueden hacer variar el resultado de la conclusión, está practicando cualquier cosa -demagogia, odio, ideología- menos ciencia, ni siquiera razonamiento elemental y lógico.
Eso también pasó durante los primeros siglos del cristianismo, tal como contó un profesor de una tesis doctoral de hace bastantes años en Cataluña.
Cristo mismo fue presentado como héroe mitológico en los países de cultura grecorromana:
"El trabajo de Hércules que limpió en un día las cuadras de Augías, sucias durante cuarenta años, mediante el desvío de las aguas de un río cercano, es Jesús, portador del agua de la vida, que limpia tus pecados de toda la vida en un sólo instante."
La base de la evangelización cristiana de pueblos paganos, consiste en utilizar las pequeñas verdades de estos como palanca para enseñar la Verdad; luego, con el tiempo, una vez cumplida la finalidad y la utilización catequética, se olvidan porque no hay continuidad en la enseñanza del paganismo en el pueblo, se corta la continuidad de transmisión de conocimientos, ritos y sacerdocio paganos.
Otra cosa es que pervivan elementos culturales y religiosos paganos de forma cristianizada.
1. La historia no es una ciencia dura como la matematica o la fisica.
2. Es imposible tener todos los "datos" sobre eventos que transcurrieron hace 15 o 20 siglos.
3. No creo que Russell ignore "premeditadamente" nada.
Russell partía de un prejuicio, soberbio, vanidoso y orgulloso, contra la religión, y me parece que era, en especial, contra el anglicanismo británico, y sobre todo, contra las corrientes dominantes del mundo intelectual inglés-norteamericano de su época (1900-1970), universo peculiar y singular en sí mismo, con sus propias especificidades, excepcionalidades y extravagancias (muchas denominaciones protestantes).
Russell, para mi opinión, es bastante antiguo (murió en 1970), como Voltaire y otros, y me parece extraño que se reitere sus anti-enseñanzas: es un maestro muerto, sus ideas ya están fosilizadas, hacia las cuales se puede ir sin que el maestro pueda ya dialogar porque está muerto, mientras que el catolicismo tiene un maestro vivo, al cual sí se le puede hablar.
Los datos que van saliendo invalidan o relativizan las conclusiones de Russell y otros, porque la pretensión íntima de Russell fue hacer una pretensiosa, altiva y engreida crítica científica dura contra el cristianismo: mezcló ciencia, filosofía, religión (ateismo) e ideología, se le subió a la cabeza el premio Nobel y su inteligencia extraordinaria.
Pero si hay un nuevo dato determinante, la conclusión debe de ser variada, y esto es lo que sucede a los ideólogos con el paso del tiempo: una vez que mueren, nuevas ideas, nuevos datos, nuevos métodos, nuevos autores más inteligentes, superan a este supuesto maestro.
En ese sentido es pagano todo Cristiano que adore a Mammón y hay muchísimos, pero Mammón no es un ídolo sobre un pedestal al que se le oficien ceremonias sino un elemento simbólico que representa la avaricia o las riquezas. Los adoradores de Thor eran conscientes de su adoración, le rendían culto y apelaban a él a la hora de entrar en la batalla; los adoradores de Mammón ni siquiera saben de qué estamos hablando. Compaginar a Thor con Jesucristo es imposible, pero muchos creen que la avaricia y Jesús son compatibles porque, sencillamente no se plantean la elección entre dos dioses.
Estamos hablando de dos personas diferentes. El autor de éste libro se llama James C. Russell y todavia vive. Ud creo se refiere al finado Bertrand Russell
En general coincido con uds. Hay un resurgimiento del paganismo formal pero es solo en una minoria y como reacción al multiculturalismo globalizante y consumista. Lo grave es que la mayoria vive de facto con costumbres paganas. Hago referencia en el texto a la cuasi desaparición del matrimonio cristiano, pero basta mirar alrededor para ver muchos otros signos.
"Para ser un pueblo tan numeroso, los adulterios son escasos y su castigo es inmediato". "No hay ningún perdón para la honestidad corrompida y, al corromper y ser corrompido no se le llama "vivir con los tiempos"* "Limitar el número de hijos o matar a un agnado se considera un oprobio y más fuerza tienen allí las buenas costumbres que en otros lugares las buenas leyes"
* Supongo que la frase era corriente entre los romanos y es sorprendente lo actual que suena.
El "todo vale" de ahora, aunque por supuesto siempre existió en mayor o menor grado, es una novedad histórica *como modelo de comportamiento generalmente aceptado para la totalidad de la población.* Y está esttechamente relacionado con las ideas de individualismo y derechos individuales que emanan de las filosofías modernistas. La humanidad siempre fue fundamentalmente colectivista. Esto de "yo hago de mi capa un sayo siempre que sea legal y al que no le guste, que no mire" es, hasta donde a mí se me alcanza, una novedad histórica antes sólo tolerada en las juergas de los poderosos, porque eran poderosos y a ver quién les tosía, no porque fuese algo generalmente aceptado sin más como lo es ahora. Es el individualismo liberal el que lo permite y fomenta, y también el que está saboteando las formas organizadas de religión, dejando el espacio para que cada cual se monte su religión a su medida. Y por eso estamos asistiendo también a estos fenómenos de sincretismo y secularización. Con el comunismo tenías que ser ateo, pero todos ateos, porque era igualmente colectivista. Esto de que "cada cual sea lo que quiera y vaya por libre", extendido a toda la sociedad, es hasta donde a mí se me alcanza una novedad. (Otra cosa es que haya tendencias y modas colectivas, pero aquí "todo lo que no es ilegal es legal.") Que yo sepa, nunca se había visto algo así salvo en tiempos de anarquía y caos, no en sociedades tan altamente organizadas (y a su manera funcionales, y desde luego prósperas) como las nuestras. Esto habría dejado atónitos a los antiguos, paganos o no... y me tiene atónito a mí también. Hace 25 años yo decía a quien quería escucharme que nuestra sociedad se sumía en el colapso y el caos, precisamente por todo esto. Bien... Obviamente, me equivoqué. Este "experimento", perverso y todo, funciona y está demostrando ser singularmente estable. Yo no sé si se había visto antes algo así.
Otras cuestiones, son intenciones y fines, la práctica de su instrumentalización.
Cultivar una sensación extendida de irrealidad es útil y funcional, a quienes conservan sus espacios de realidad, y ahí fundan -escondidos, oscurecidos- su dominio y poder.
Un "retorno al paganismo" creo que sólo puede entenderse con cierto rigor si lo asimilamos a un "abandono del cristianismo".
Pero el paganismo resultante nada tendrá que ver con el de los incas o el de los sajones. Por más que Evo Morales inciense a la "Pachamama". O los nórdicos se calcen cascos vikingos.
No, mire usted, no podemos andar pidiendo respeto para nuestros símbolos religiosos y hacer ostentación de una estampa en que uno de nuestros santos, hacha en mano, se carga los ajenos. La fe se propone, no se impone con violencia, ni siquiera hacia objetos o símbolos.
Dice usted que no ve pertinente la comparación entre San Bonifacio con el hacha y un yihadista con el mazo. Pues le digo que casi es peor lo de San Bonifacio, porque cuando estos días los yihadistas destruían los ídolos asirios se cargaban, que no es poco, arte e historia, ya que desde hace milenios esas estatuas no son símbolos religiosos para nadie. Pero San Bonifacio, además, en el momento de talar el roble, atentaba contra un símbolo que era sagrado para gentes que vivían en aquel mismo momento.
Saber que la nuestra es la religión verdadera y que extra ecclesia nulla salus no nos autoriza ni a cometer barbaridades ni a atentar contra lo que otros consideran sagrado. Aunque sólo sea por reciprocidad. Porque los que destruyen iglesias y matan cristianos aplican un silogismo muy parecido al que usted ha planteado.
"Espantáronse los isleños de ver aquella flota y metiéronse al monte, dejando desamparadas sus casas y haciendas. Entraron algunos españoles la tierra adentro y hallaron cuatro mujeres con tres criaturas y trajéronlas a Cortés, y por señas de los indios que consigo llevaba, entendió que la una dellas era la señora de aquella tierra y madre de los niños. Hízole Cortés buen tratamiento, y ella hizo venir allí a su marido, el cual mandó dar a los españoles buenas posadas y regalarlos mucho. Y cuando vio Cortés que ya estaban asegurados y contentos, comenzó a predicarles la fe de Cristo. Mandó a la lengua que llevaba, que les dijese que les quería dar otro mejor Dios que el que tenían. Rogóles que adorasen la Cruz y una imagen de Nuestra Señora, y dijeron que les placía. Llevólos a su templo y quebrantóles los ídolos y puso en lugar dellos cruces y imágines de Nuestra Señora, lo cual todo tuvieron los indios por bueno. Estando allí Cortés nunca sacrificaron hombres, que lo solían hacer cada día.
Historia de la vida y hechos del Emperador Carlos V, de Prudencio de Sandoval". sacado de la Wikipedia :)
La única cosa sagrada que podríamos tener los católicos y que se comparase con los fetiches del paganismo sería la hostia. Al menos así lo entiendo yo. Precisamente el hecho de derribar los ídolos paganos venía condicionado por el carácter de "sagrados" que tenían, de tabú. Los talibanes y los del Estado Islámico derriban los restos de culturas antiguas atribuyéndoles un carácter sagrado que ni siquiera tienen ya. Es un atentado cultural. Es como si los conquistadores hubiesen derribado la pirámide de Palenque o la de Chichén Itzá..
Solo quería apuntar el matiz, que me parece importante.
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