"Sensus Fidei. Sensus fidelium. Sensus Ecclesiae".
Estamos en un momento de la Historia de la Iglesia en la que se hace no solo necesario sino absolutamente imprescindible, como católicos, tener más que claras, clarísimas, el contenido de estas tres expresiones que, acuñadas dentro de la Iglesia Católica y solo en Ella, en el fondo, en el fondo, no son más que una: el sentido de Dios y el Amor que nos tiene, dándonos a su Hijo muy amado, y trayéndonos a su Iglesia, la Una.y Única. Como solo hay un Uno y Único Dios.
Sensus fidei. Literalmente, “el sentido de la Fe". Es decir, significa, muy en primerísimo lugar, el “sentido” -la orientación, el camino, la seguridad y la Verdad de Dios- que la Fe -con la Gracia- va poniendo en el alma del creyente para ir “entendiendo” y, a la vez, “conformando” todos los aspectos de su vida, más y más, con lo que sabemos que Dios nos ha revelado y la Iglesia nos enseña. Es el criterio de “discernimiento” para saber “juzgar", desde Dios, de uno mismo, de los demás y del mundo con sus máximas -que no tienen ese origen divino precisamente: al contrario, son enemigos de la Salvación del hombre-, conforme a Dios.
Por ir a las palabras del mismo Jesucristo, que nos anima a meternos ahí bien a fondo: Teniendo ojos no veis, teniendo oidos no oís, y teniendo entendimiento no entendéis. Lo expresa “en sentido negativo", con esos “no” que va intercalando. Pero eso es solo una manera, aún más pedagógica, de expresarlo. Se entiende perfectamente que quiere decirnos que los ojos están para ver, los oídos para oír y el entendimiento para entender… de las cosas de Dios; que son las primeras que nos han de importar, por encima de cualquier otra consideración o de cualquier otro asunto: DIOS, para el hombre que se sabe hijo suyo porque le es dado de gracia, ES LO PRIMERO.
Sensus fidelium. Literalmente también, “el sentido de los fieles en su conjunto"; es decir, lo que los católicos han entendido del mismo modo, siempre y en todo lugar, a través de los milenios y en el seno de la Iglesia, porque fuera de Ella no se puede entender nada rectamente y por tanto, como acuñaron los Padres, fuera de Ella no hay salvación.
Es la Fe -el contenido de la Revelación- que se hace ROCA, FUNDAMENTO. Y, por tanto, también con palabras del Señor -que nos lo explica siempre todo-, nos convierte en el hombre sensato -el hombre cuerdo- que edificó su casa sobre roca. Y vinieron las lluvias y las tormentas, y la casa prevaleció. El polo opuesto es el hombre insensato, que edifico sobre arena; y de su casa, que tuvo que resistir las mismas tormentas que la del anterior -las tormentas de la vida, que vienen siempre aunque no las busquemos siquiera- no quedó piedra sobre piedra. Fue una ruina.
Y además de “roca” y/o “fundamento", la Fe se hace UNIDAD de todos, RECONOCIMIENTO en UNA VERDAD COMÚN, única para todos: porque Fe verdadera no hay más que UNA y ÚNICA. Verdad común que se hace TAREA común, es decir: MISIÓN, EVANGELIZACIÓN, APOSTOLADO y PROSELITISMO.
Sensus Ecclesiae. Literalmente, “el sentido de la Iglesia"; es decir: lo que la Iglesia “siente” y lo va enseñando, a sus hijos en primer lugar; y, en un segundo momento, lo que debe decir y dice “a todos los hombres de buena voluntad"; que no difiere sustancialmente lo que debe decir a los anglcanos, a los protestantes múltiples y variados, a los musulmanes, a los ateos, etc.; aunque, como es lógico, hay diferencias entre unas situaciones y otras; pero esas diferencias son cuasi insignificantes de cara a lo que Dios nos ha revelado: el que crea se salvará, el que no crea se condenará. Las distinciones, digo, entre las distintas familias de “los que no creen", son discusiones menores de cara a Dios, que las ha resuelto TODAS de un plumazo, y con la misma fórmula: SE CONDENARÁ.
Lógicamente, el sensus Ecclesiae “garantiza” -pues da la consistencia- el sensus fidelium y el sensus Fidei. De ahí la fórmula, para los católicos, de que “fuera de la Iglesia no hay salvación". De ahí tambien que no cabe un “catolicismo a la carta", o de saldos de fin de temporada, o de rebajas de primeros de año, o de admitir y dar “gato por liebre".
Ser católico es lo que es: ser católico. Es decir: resolver los asuntos “en católico” SIEMPRE. Da lo mismo que se trate de trabajar, de la vida de los negocios, de la política y su mundillo, de las relaciones con el mundo y la sociedad, de la vida matrimonial, de ir a Misa obligatoriamente los domingos y festivos, del noviazgo, del arte, de la participación en unas votaciones, de hacer una huelga, de operarse [o no] de las trompas o de [no] abortar. De aplicar [o resistirse a] unas leyes civiles, unas directrices sanitarias, unas normas de circulación, y/o meterse en las redes sociales.
Y no se puede pretender ser católico -"soy católico"- porque voy a Misa y comulgo: pero lo hago sin confesar y con conciencia de pecado grave, o con dudas serias sobre posibles pecados; y/o me someto a una esterilización como el mejor método anticonceptivo; y/o calumnio, porque me cae mal tal persona; o voto a partidos que no respetan la libertad de conciencia, que están a favor del aborto, que no defienden la libertad de educación, que echan a los niños a los pies de los caballos dejando que, con la ley en la mano -lo legal- se les corrompa y se les desgracie para disfrute de unos sádicos con pedigrí; etc. Por supuesto, sin ir a Misa es imposible serlo ya de entrada.
[Lo de las ideologías de género, lo de la discriminación positiva a favor de las féminas, los plásticos o el calentamiento global, y cosas de ese jaez, ni siquiera rozan el ámbito espiritual-religioso de lo católico y de los católicos por el hecho de serlo; es más: son asuntos que chocan de frente con lo que se nos ha revelado y recoge la Escritura Santa. Por eso no me detengo más en ellos].
Esto no es ser catolico, aunque se vaya a Misa todos los domingos y se rece el rosario. Eso es una vida ESQUIZOFRÉNICA, espiritualmente hablando: es decir, voluntariamente adoptada en contra de la Palabra de Dios, y la enseñanza de siemrpe en/de la Iglesia Católica. [No hablo de medicina ni de enfermedades físicas o psíquicas, que todas tienen un sentido profundamente espiritual vividas de cara a Dios, nuestro Padre]. Eso es no saber lo que es “ser católico” o, aún peor: sabiéndolo, no estar dispuesto a serlo, y/o a manifestarse como tal ante los demás.
Para ayudar a nuestro personal “sensus Fidei", está el “sensus fidelium” y el “sensus Ecclesiae", que nos libran, a poco que nos asomemos ahí, de las “locuras” personales en cuestiones de Fe, de moral, de Religión o de Dios.
El problema grave de verdad, hoy y en la Iglesia Católica -las demás “realidades eclesiales” o así no las voy ni a mencionar-, es que se ha perdido -profunda y miserablemente perdido-, tanto una cosa como la otra -el sensus Fidei y el sensus fidelium-, porque una gran parte -y muy encumbrada- de la propia Jerarquía católica, ha perdido el sensus Ecclesiae, después de haber tirado por la borda su personal sensus Fidei, y pretender quebrar el sensus fidelium: lisa y llanamente, han perdido la Fe.
Es lo que se ha fraguado -y no me cansaré de decirlo aunque me quede solo en la empresa- en y desde el CV II. Fue el momento en el que -en Lumen gentium, por ejemplo-, como nunca hasta entonces, más se había hablado del “sensus Fidei". Pero, como en tantos y tantos otros temas, cuanto más énfasis se ha puesto en uno de ellos, más estrepitosamente se ha obrado lo contrario. O se ha fracasado en el empeño, si es que lo ha habido.
Ha sido el gran “triunfo” de la “pastoral” ayuna de teología y complejada, con un complejo de inferioridad que, si no fiese por lo que hay detrás, sería de psiquiatra: pero de estar encerrado una buena temporada. Y la foto del actual obispo auxiliar, y antes el titular de la misma diócesis argentina, en la playita, con su “misita” en trapitos pequeños, y luego -o antes; o antes y después-, sonrientes y juquetones fuera de ella, que ha dado la vuelta al mundo, es la demostración práctica y muy plástica de lo que acabo de afirmar. Sobran comentarios.
Pero no solo por el hecho en sí -y lo que significa- que muestran dichas fotos, sino y especialmente, por el silencio de las autoridades eclesiásticas competentes; en este y en todos los temas -una avalancha de ellos: más cuanto más tiempo pasan esas mismas autoridades en la inopia o en el calladito escándalo permanente- que afectan a la Fe, a la Moral, a la Liturgia, y a la Disciplina de la Iglesia.
Hay que rezar por los eclesiásticos y por los fieles todos. YA y A FONDO.
14 comentarios
"Llegado a este momento final de mi existencia en la tierra, seguramente que ninguno de ustedes va a creer que me voy a atrever a decir lo que no es cierto. Les declaro pues, que el mejor camino para conseguir la salvación es pertenecer a la religión cristiana, ser católico"
En Nagasaki, en Japón, pasión de los santos Pablo Miki junto con veinticinco compañeros.1597
Oración
Oh Dios,
fuerza de los mártires,
que llamaste a la gloria eterna
a San Pablo miki
y a sus compañeros,
a través del martirio de la cruz,
concéde a todos los sacerdotes del mundo,
por su intercesión,
poder testimoniar en la vida
y en el momento de la muerte
la fe de su bautismo.
Por Jesucristo nuestro Señor
que vive y reina
por los siglos de los siglos.
Amén.
San Pablo Miki y Compañeros, rueguen por nosotros!!
Se nos da en La Eucaristia ,viene a nuestro encuentro y nos eleva con El al Padre eterno.
En la liturgia que es celeste se nos revela el Misterio y nos hace vivir en El.
Nos habla Padre de una Teologia acomplejada y una Pastoral que no transforma y sencillamente excepto en la liturgia que es muy meditada y trascendente,no podemos llamar Teologia a reflexiones o ideas aunque parezcan elevadas de nuestro espíritu humano.
Los humanos nos creemos centro y aún los católicos no nos descentramos de nuestro egocentrismo y así no podemos ser liberados ,sino cada vez más esclavizados de un espíritu humano que aprisiona.
Estudiar Teología ,leer ,meditar ,escuchar a las Sagradas Escrituras es volver a recuperar a Jesus hablando e interrogando pues El está centrado en el Padre.
Entremos en diálogo con El después de escucharlo en el texto Sagrado ,en la Sinagoga ,en las calles, en el Jordan ,aprender a ser discípulos es Dios vivo hablándonos ,hay que hacer oración y meditación bíblica y hablar con El para ser transformados ,convertidos y hacia un Camino de libertad con El y en El.
Más Teologia de Creación y de Redención y hacerlo vida en nosotros su Iglesia cuerpo místico,sin El nada podemos hacer ,es Padre que nos enseña y nos amó primero. Postrémonos y El nos elevará, misterio de Amor encarnado siendo .niños
. Gracias Padre por su artículo de Sensus fidei,Sensus Fidelium y Sensus Eclesiae orando bíblicamente.
En las religiones no reveladas, que son todas menos una, hay que apreciar el esfuerzo del hombre por acercarse a Dios. En la única religión revelada, es Dios quien se revela, quien toma la iniciativa, hasta la encarnación del Verbo y su muerte en la cruz para redimirnos del pecado y abrirnos las puertas del cielo. ¡ Gracias Jesucristo ! ¡ Tú eres el Hijo de Dios !
Muchísimas gracias, Maru. Y reza por mí.
Infinitas gracias por su artículo, P. Aberasturi, en el que plasmó magistral y valientemente la dura realidad que nos circunda, lo comparto totalmente.
Sagrado Corazón de Jesús en Vos confío
Inmaculado Corazón de María Ruega por nosotros
El Hijo Único engendrado en el Seno del Padre el padre lo engendra y lo ama eternamente y el Hijo Unico devuelve de sí mismo todo su Amor que el Padre le ha donado y es su Palabra viviente y
El Espíritu Santo es la corriente de Amor de ambos,
En la Trinidad los tres son de la misma esencia ,sustancia y naturaleza divina ,esto es en la Trinidad ad intra .
En la creación hay que tener en cuenta ta Trinidad ab extra y ver cómo actúan cada una de las tres Personas Divinas .este misterio Trinitario es divino sobrenatural e ilumina permanentemente lo humano y como la Iglesia es de Cristo ,todo lo intra mundano ,el pecado ,abusos y la negación de lo sobrenatural y eterno no salva al hombre y es tiempo de salvación perdido ,así la política corrupta ,eutanasia ,aborto ,violencia contra los hermanos, robos ,asesinatos ,lujurias y todo el amplio etc hace que sea muerte permanente.
Que hacer ?oración y suplica al Padre eterno creador y a nuestro Mediador para no hacer inútil su muerte en la cruz ,y conversión a Jesucristo y la Iglesia debe reprender a sus fieles ya que sino no es la Iglesia que redime ,esto algunos fieles querrán seguir en el pecado,sin embargo la Iglesia no es sociológica y no puede perder su misión evangelizadora ,sacramental redentora, caminante hacia la morada celeste.
Y la jerarquía debe proclamar el encargo dado por Nuestro señor Jesucristo.
cinco segundos antes de la muerte!... AMGD
PD: desde hace tiempo estoy muy preocupado por la salvación de las almas. Entonces me opongo pertinazmente ante esos que todo lo saben (no usted padre) y que ya dan por sentado quien se condena y quien no. Puedo asegurar que una persona que vive en pecado mortal y fallece en forma repentina puede salvarse. Si alguno no lo cree se olvida de aquella frase: para Dios nada es imposible.
Rezo por usted y pido a San Josemaría Escrivá de Balaguer lo proteja y le guarde.
Tienes un gran corazón, qué duda cabe. Pero el corazón, a solas, solo acierta por casualidad: necesita la razón si quiere que su capacidad de amar sea eso: "racional". Por eso, me voy a permitir hacer alguna matización respecto a lo que dices; por si te sirve a tí, o a los que nos lean.
Es cierto que toda persona en pecado mortal puede alcanzar la Salvación en el último segundo: le van a sobrar cuatro de los tuyos. Pero se salvará solo SI SE ARREPIENTE. Es decir: si reconoce sus pecados como OFENSAS A DIOS; y, en ese reconocimiento, y con un acto de PERFECTA CONTRICIÓN, se arrepiente totalmente, en intensidad y en dolor respecto a cada uno de ellos. Si no, NO.
Esto no lo digo yo, sino el mismo Señor Jesús: "el que crea se salvará, el que no crea se condenará". Y eso no hay nadie que lo pueda remover, negar, poner entre comillas o... "eso era antes". Eso es un ABSOLUTO MORAL; tan "absoluto moral" que ni Dios mismo puede sustituir a la conciencia o a la libertad de ninguna persona: AUNQUE ESTA SE CONDENE. Como es un absoluto moral que el que muere con un solo pecado mortal no confesado -o no rechazado totalmente con deseo de confesarlo, aunque en ese momento no pueda-, se condena sin remisión. Como es un absoluto la necesidad del Bautismo, al menos de deseo, para convertirnos en destinatarios de esa Salvación. Como se condena irremisiblemente el impenitente final que, además de los pecados que arrastra, comete en ese momento otro muchísimo más grave contra el mismo Espíritu Santo.
Cierto que Él ha redimido a todos. Pero tan cierto como eso es que hay personas que rechazan esa Salvación, y escogen la CONDENACIÓN ETERNA, aun cuando no se den cuenta ellos mismos... que sí se la dan.
Esto, más otras cosas que podríamos añadir, por lo que respecta a los católicos: porque es lo revelado por el Señor, está contenido en la Sagrada Escritura y está enseñado así por la Iglesia Católica.
Respecto a lo no-católicos, ¡y sin culpa moral sobreañadida por no serlo!, no tenemos ni idea de qué va a hacer el Señor con ellos, porque no lo ha revelado. Solo Dios lo sabe; como solo Él sabe "el día y la hora" del Juicio Final.
Estaba triste estos días por el mal momento que estamos pasando los católicos, y me ha servido para serenarme el volver a leer esto que escribe. Lo he copiado con la impresora y lo tengo a mano porque dice bien claro lo que hay que saber
Teniendo Fe y Fidelidad al Evangelio de la Iglesia, sigamos adelante con la ayuda de Jesucristo y el Espíritu Santo que nos comunican el Amor de Dios Padre, que hace todo por nosotros para apartarnos de todo mal.
No deje de escribir nunca porque leer lo que comparte ayuda siempre.
Tal vez, un gran riesgo de las personas dedicadas a las altas esferas jerárquicas, sea que, entre intereses, presiones, burocracia, diplomacia, etc., puedan acabar olvidando -sólo de hecho y, tal vez, parcialmente- los principios básicos de la fe y del Evangelio, a favor de estrategias de poder meramente humanas.
Gracias Padre Aberasturi por su fiel testimonio de amor a Cristo y a su bimilenaria iglesia.
Oremus ad invicem
En primer lugar hoy dia con tanta confusión doctrinal a nuestro alrededor, debemos tener muy presente la frase descrita en Hechos 5,29: Hay que Obedecer a Dios antes que a los hombres.
La doctrina católica está descrita en las Sagradas Escrituras e interpretada por la Jerarquía de la Iglesia a lo largo de dos mil años de historia en el Catecismo. Y si está escrita es para que nadie nos puede engañar con ideologías personales o del maldito diablo.
Por lo tanto si ahora nos vienen con que los adúlteros pueden comulgar, nosotros sabemos que estando en pecado mortal se comete sacrilegio.
Si nos dicen que cualquiera puede anular su matrimonio, nosotros los católicos sabemos que no es así, porque lo que se pretende con esta moda es llevar almas al infierno, ya que la razón de anular matrimonios es para unirse con nuevas parejas y vivir adúlteramente.
Si nos dicen que todas las religiones conducen a Dios, debemos entender que es mentira porque la única religión fundada por Dios es la Católica. El resto serán juzgados por la ley natural.
Si nos dicen que la Virgen NO nació santa o que Jesucristo tenia sangre pagana, debemos pensar que todo ello es falso, porque la doctrina dice que la Virgen Nació Santa es decir que NO tuvo pecado original, y por supuesto Jesucristo siendo el Hijo de Dios no pudo tener sangre pagana, porque Dios le preparó un seno materno INMACULADO. Y asi un sinfin de estupideces que no hacen mas que engañar a los falsos católicos. Porque está escrito en la 2ª tesalonicenses 2: que Dios permite el engaño del anticristo para que se condenen todos aquellos que rechazaron a Cristo que los habría salvado.
Non Nobis.
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