(52) Del deseo de santidad, o que todo has de considerarlo basura con tal de ganar a Cristo.

Gracias por sus posts Alonso Gracián. “Tu sola voluntad no puede. ( ) Tremendo el peligro que se corre, si uno, MOVIDO POR DIOS, no se propone en serio ser santo con total e inaplazable determinación. ( ) No hay voluntad de santificación que sea extraeucarística. ( ) Cuando el pecado mata la sed de gracia se detiene el caminante, y sólo en la confesión de los pecados se reaviva la sed y se recomienza el camino.”---------------------------------------------------------------------------------------------------Cuando perdemos el estado de gracia necesitamos recuperarlo comenzando por el sacramento de la Penitencia y Reconciliación. El mayor daño que provocan los consagrados que propalan herejías, es que parecen justificar a católicos que pierden la confianza en quienes deben ser sus confesores. La Confesión es el sacramento más atacado por los enemigos de la Iglesia.
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A.G.-- En efecto, Horacio Castro, si perdemos el estado de gracia, hemos de recuperarlo cuanto antes, acudiendo a confesarnos al momento, sin demora.

Ciertamente, es sacramento atacado, menospreciado. Más necesario que nunca.

Respecto a las herejías. Dado el daño y la confusión que siembran, llenando de obstáculos la vida cristiana, me parece a mí que debería tenerse tolerancia cero respecto a ellas.

Gracias y un saludo en Cristo, con María.

Buen tema porque hoy en día a aparecido un monofisismo larvado en muchas personas que dicen que la santidad es algo inalcanzable porque según ellos Jesus como es Dios el si es santo en cambio nosotros no podemos
“Porque yo soy el Señor vuestro Dios. Por tanto, consagraos y sed santos, porque yo soy santo. (Lev 11,44)
Por tanto, sed vosotros perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto.
(Mt 5,48)

Gracias Alonso
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A.G.-- Es verdad, milton, he leído y escuchado a menudo eso de que la santidad es imposible. Es porque no creen en la eficacia de la gracia. Y claro, les parece dificilísima. Es un síntoma claro de voluntarismo: dado que la vida cristiana reposa sobre la sola voluntad, la santidad parece imposible. Y ciertamente, es que sin la gracia es inalcanzable. Pero sabemos que todo lo podemos en Aquel que nos conforta.

Un saludo en Cristo con María Inmaculada, y gracias.

Articulo radical fuera de lugar en la actual Iglesia abierta a todos. Da miedo.
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A.G.-- Me ha gustado que le parezca radical, jeje, porque el deseo de santidad es radical, de hecho, es la raíz de nuestra vida cristiana.

Gracias por el comentario, espero que me siga leyendo.

Un saludo muy cordial en Cristo, con su Madre.

De como la verdadera espiritualidad en Cristo,es necesariaramente radical hasta el desprecio de si mismo.
De como el que no busca con anhelo indecible la santidad,esta fuera de lugar,concretamente,en las tinieblas exteriores,donde el corazon no desea a Dios y donde solo una llamada sobrenatural,puede sacarnos de la inconsciencia.
De como la cercania de Dios en el alma,aumenta el sufrimiento y la cruz en este destierro,porque;"muero porque no muero". Y de como contra mas sufro por la falta de la pleintud de Cristo, mas estoy gozando de SU cercania. Pues los crucificados por SU Amor,estan glorificando SU sacrificio ; unidos en una Causa Comun.

Querido hermano,tal vez,si no te parece mal,pudieras decirnos cual es el libro espiritual por medio del cual Dios mas ha compungido y contristado tu corazon. Creo que ,dadas las fechas,estaria muy bien un consejo de tu parte.
Gracias por estas santas sentencias,a las que solo cabe decir; Amen.
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A.G.-- Como apunta tu comentario, Luiscar73, el deseo de santidad ha de ser radical, totalizante, dominante, es lo más importante de nuestra vida, tanto, que con tal de ganar a Cristo hemos de estimarlo todo como pérdida, si nos impide ser santos.

Respecto al libro que más me ha estimulado a santidad, citaría la Vida, y el Camino de Perfección, de Santa Teresa, así como la Subida de san Juan de la Cruz. Y la Historia de un alma, de Santa Teresita.

Hay obras que ayudan mucho a la vida cristiana, como son las de Jacques Philippe, La libertad interior, la paz interior, etc., en Patmos.

Para formarse bien, recomiendo encarecidamente esa maravilla que es la Teología de la Perfección Cristiana, de Royo Marín. Para avanzar en oración, el Peregrino Ruso, obra maravillosa.

Gracias, y un saludo en Cristo, con su Madre Inmaculada.

El punto 9 lo he comprobado infinidad de veces; después de confesar, los ánimos para seguir luchando por la santidad son mayores con nuevas luces y gracias; en cambio si paso mucho tiempo sin confesar, me voy entibiando y por consiguiente deteniendo en el camino.
Maravilloso sacramento el de la Confesión en el que Dios nos muestra su misericordia, y por supuesto el centro de nuestra vida como cristianos: Jesús Eucaristía


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A.G.-- Sin duda, María de los Ángeles, es como dices. Cuando nos confesamos con frecuencia el Espíritu Santo nos mantiene en una admirable tensión positiva, por la que deseamos perfección y nos movemos en ella.

Pero si esa regularidad la abandonamos, es común entibiarse y relajarse.

Gracias por el comentario, y saludos en Cristo, con su querida Madre.

En lo personal, la Filotea me ayudó bastante en su tiempo, y qué decir de la Imitación de Cristo, indispensable su lectura.
No me pregunta Luiscar, pero quisiera decirle que los sermones del Cura de Ars, me sacudieron, y me movieron a hacer un serio examen de conciencia, porque muchos de los puntos que aborda, son verdades como templos.
Qué ciega estaba yo, creyendo que era buena cristiana, y aunque esos sermones llegan a asustar (sobretodo el del Juicio Final y el Aplazamiento de la Conversión), eso mismo ayuda a regresar a Dios.
Bendiciones.
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A.G.-- Buenas e importantes lecturas recomiendas, María de los Ángeles. La Imitación de Cristo tiene muchas virtudes y consuela, aunque llega un momento en que el alma busca una piedad más objetiva. No obstante, es un libro con grandes riquezas. Del Cura de Ars, qué decir. Es un poderoso intercesor. Sus palabras nos interpelan, sin duda.

Gracias por el comentario, y saludos en el Señor con su Madre.

Gracias a los dos.
Maria de los Angeles;
La Imitacion de Cristo y los sermones del Santo cura de Ars ,la-os re-visito de vez en cuando. Son un puro deleite y a la vez,una tremenda bofetada,pues descubren,como bien dices,nuestra misera mediocridad como cristianos. La "introducion a la vida devota" ,me la apunto.Muchas gracias.
Alonso;
Las obras de Santa Teresa y San Juan de la Cruz las he leido,pero la de Santa Teresita no. Tambien me he apuntado tus otras recomendaciones. El Peregrino Ruso lo he empezado precisamente hace unos dias. Muchas Gracias.

De como cuando volvemos al orden de Dios por la gracia,somos despegados gradualmente de todos los afectos desordenados para que el alma quede libre para solo Dios. El que baja profundiza y el que profundiza encuentra la clave para subir a Dios.
La Paz de Cristo.
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A.G.-- Es que realmente Dios con sus auxilios, y siempre eclesialmente, nos va ordenando la vida y purificando nuestro corazón de malos apegos, para que le amemos como a Él le agrada y seamos santos e inmaculados ante Él.

Saludos en Cristo con su Madre y gracias de nuevo

Gracias por sus palabra hermano, llegan en el mejor momento. DIOS lo bendiga y siga haciendo de usted un instrumento de amor y bendición.

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A.G.-- Gracias Mariel por leer y comentar. Me alegro le ayuden mis palabras, en el momento propicio.

Saludos en Cristo con su Madre

El Señor que es bondadoso nos ofrece el ser santos. Pero no podemos alcanzar la santidad por cuenta propia, esto es imposible, pues Alonso, también ha dicho esta verdad en esta enseñanza espiritual, volviendo a releer, pero esta vez con más atención, descubriremos que Alonso lo ha expresado mejor.
Estar separado de Cristo nadie puede vencer las propias tentaciones, fuera de Cristo el alma está a disposición del demonio, que lo maneja según le conviene, como una marioneta de cuerda.

Pero la santidad, de la que todos necesitamos trabajar, no debe contaminarse, no debe profanarse por cuestiones terrenales, ni el orgullo, la presunción, la arrogancia, etc.

Sabemos que el Señor nos ha pedido ser santo, no "buenista", porque la santidad ya supera al "buenismo", el hacer las cosas sin la mirada ni el corazón puestos en Dios. El "buenismo" es hacer las cosas con la mirada en el mundo, los aplausos, Jesús rechaza estas cosas, recibiendo ya estas personas la recompensa mundana. No necesita más. Es hacer algún bien, pero esperando algo también. Por el contrario, el hacer las cosas en atención a Cristo, supera todo tipo de "buenismo" (Cfr. Lc 6, 33-38).

Queda dicho que la santidad siempre es superior, la perfección, espiritualmente trabajar por la paz, porque hay personas que buscan la paz en su propia nación, pero constantemente entablan una batalla contra Dios, no colaborando por la extensión del Reinado de Cristo, y tienen más miedo que "Herodes", porque han puesto su corazón en las cosas materiales, y legalizar distintos pecados... Los cuales, por su breve dedicación a lo terrenal, nunca podrán ver a Dios ya que no han comenzado a dar los primeros pasos hacia la santidad que es la conversión del corazón, y sin penitencia ni oración, no hay santidad posible.

« Buscad la paz con todos y la santificación, sin la cual nadie verá al Señor. Procurad que nadie se quede sin la Gracia de Dios y que ninguna raíz amarga rebrote y haga daño, contaminando a muchos.» (Hebreos 12, 15).

Esas raíces amargas brotan cuando nuestro corazón se divide, porque es imposible que nadie pueda estar al servicio de dos señores... Y debemos cuidar de nosotros mismos, en atención al Señor nuestro Dios que nos ama.

Dice San Pablo: «12 Que el Señor os colme y os haga rebosar en la caridad de unos con otros y en la caridad hacia todos, como es la nuestra hacia vosotros, 13 para que se confirmen vuestros corazones en una santidad sin tacha ante Dios, nuestro Padre, el día de la venida de nuestro Señor Jesús con todos sus santos. Amén. » (1 Ts 3,12-13)

Nuestra santidad debe ser sin tacha. La Palabra de Dios es bien clara, como ya he comentado en otras ocasiones.

Cada uno de nosotros tenemos a nuestro alcance las Sagradas Escrituras, y hay mucha ganancia el poner en práctica, aquello que leemos, pues Dios mismos nos está hablando, no hagamos oídos sordos.

Estas enseñanzas nos anima a estar más despejados en los asuntos espirituales y caminar para el Señor.

Muchas gracias Alonso, y bendiciones para todos.


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A.G.-- Realmente, José Luis, nuestra santidad no puede tener mancha, de lo contrario no es santidad. Como bien apuntas, de un corazón dividido no puede surgir nada bueno. La obra de Dios en nosotros consiste, también, en centrar todos nuestros esfuerzos, movidos por el Espíritu Santo, en completar la obra que Él mismo comenzó y llevará a término. Siempre teniendo en cuenta que sin Él no podemos nada (Jn 15, 5). Como bien dices, fuera de Cristo, el maligno nos espera para amargarnos la vida.

Gracias por el comentario, y saludos en Cristo con su Madre

Alonso

Ya que el punto 10 habla que la Escritura te da aliento de perfección. Dígame cómo empezar a leer la biblia? Le pregunto esto, porque en mi educación escolar católica, nunca de los nunca me enseñaron a leer la biblia. Solamente era estudiar un libro que hablaba de Dios y la moral.

Dígame cómo empiezo a leer la biblia. Empiezo por el Génesis? O primero empiezo a leer los 4 evangelios del N.T., y después me vuelvo al A.T.? ......... O cómo empiezo a leer la biblia? Se lo agradecería mucho.

Saludos Cordiales
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A.G.--Estimado Hernán, a mí personalmente me ayuda mucho leer y meditar la Sagrada Escritura a partir de la oración litúrgica de la Iglesia, y de la santa Eucaristía. Otra forma muy provechosa es a partir del Catecismo, que es muy rico en citas bíblicas y patrísticas, enmarcadas en la sana doctrina de la Iglesia.

Los salmos son para meditarlos a diario y orar con ellos. Yo todos los días oro con ellos, desde el principio, hasta que los acabo y empiezo de nuevo, o selecciono los que sintonizan con cada momento.

Y no olvide lo fundamental, que es leer la Escritura en actitud orante, estudiarla, y memorizar a diario algún pasaje.

Espero haberle ayudado. Un saludo muy cordial en el Señor, con su Madre.

Aaah, y también dígame por favor cuál biblia me aconseja leer?

Saludos
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A.G.- Con tal que sea una Biblia católica, con un buen aparato de notas, hay muchas. La Nacar Colunga es una maravilla. Pero hay más. En la red puede encontrar la Biblia Clerus, que es muy útil porque pinchando en la sección de comentarios puede encontrar muchas observaciones patrísticas y del Magisterio sobre el pasaje en cuestión.

Saludos cordiales

Estos acrílicos son de tu autoría? tal cual para ilustrar tan reconfortante post! Gracias!
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A.G.-- En efecto, Silvia Inés, los he pintado yo, poco a poco, despacio y pincelada a pincelada, porque tengo poco tiempo.

Gracias, y un saludo en Cristo, con su Madre