Juan Pablo II Magno - Vida
Serie “Juan Pablo II Magno”
Sin duda alguna, la vida es algo muy importante para un cristiano porque consideramos, en general, que su protección resulta esencial para la pervivencia del ser humano, semejanza de Dios y, sobre todo, por tener carácter sagrado.
Por eso, era de esperar que Juan Pablo II Magno dijera que “La vida humana es sagrada e inviolable en cada momento de su existencia, también en el inicial que precede al nacimiento. El hombre, desde el seno materno, pertenece a Dios que lo escruta y conoce todo, que lo forma y lo plasma con sus manos, que lo ve mientras es todavía un pequeño embrión informe y que en él entrevé el adulto de mañana, cuyos días están contados y cuya vocación está ya escrita en el libro de la vida” (Encíclica Evangelium vitae, de 1995) (61)
Por tanto:
-El ser humano es pertenencia de Dios.
-Los días del ser humano están contados en el libro de la vida.
Por eso no podemos hacer, digamos, con nuestra vida, lo que más nos convenga porque, en realidad, no nos pertenece a nosotros sino a Quien nos creó.
Por eso, resulta lógico que, en la misma Encíclica citada arriba, hiciera una llamada clara en defensa de la vida: “!Respeta, defiende, ama y sirve a la vida, a toda vida humana¡!Sólo siguiendo este camino encontrarás justicia, desarrollo, libertad verdadera, paz y felicidad” (EV 5)