Aún importa la Familia: VI Encuentro Mundial en Ciudad de México
Es bien cierto que el tiempo pasa muy deprisa. Por eso resulta un tanto sorprendente que ya hayan pasado casi tres años desde que Benedicto XVI asistiera, en Valencia, a las dos últimas jornadas del V Encuentro Mundial de las Familias celebrado en la capital de la Comunidad Valenciana.
Efectivamente, han pasado casi 36 meses desde aquellos 8 y 9 de julio de 2006 pero, por mucho que se haya intentado hacer lo posible para que la familia haya venido a menos (mediando legislaciones, etc.) no es menos cierto que la tan básica institución social sigue viva.
Ciudad de México es una demostración de ello porque el VI Encuentro Mundial de las Familias ha empezado hoy a celebrarse y, hasta el próximo domingo, 18, irá demostrando que, pese a quien pese, la Familia sí importa.
El lema escogido para estos días en los que la familia destaca (aún más) por sobre otras realidades falsas es “La Familia formadora en los valores humanos y cristianos” porque se entiende que, en realidad, quien constituye el núcleo de formación de la persona como ciudadano es la familia.
En la página oficial del Encuentro se puede acceder a toda la documentación necesaria para comprender, mejor, lo aquí dicho.
Sabemos, sobre todo, que la familia es la primera educadora de la fe; que es, educadora de la verdad del hombre; que es educadora de la dignidad y el respeto de toda persona humana; que es trasmisora de las virtudes y valores humanos; que está abierta a Dios y al prójimo; que es formadora de la recta conciencia moral.
Pero, además, también sabemos que en la familia se tiene la primera experiencia de Iglesia; que, además, tenemos, como colaboradores de la familia a la parroquia y a la escuela (esto es algo ilusorio en España, imposible e impensable); que, además, tenemos a la familia de Nazaret como modelo de familia.
Pero, por último, sabemos que la familia es, sobre todo, destinataria y agente de la nueva evangelización.
Y todas estas realidades espirituales, que son el contenido de las Catequesis que se han preparado para que el VI Encuentro Mundial de las Familias estuviera, desde antes, lleno de razón y de fe, no deberíamos olvidarlas.
Y no deberíamos olvidarlas, sobre todo, los católicos porque el Maligno siempre las tiene en cuenta, al revés, para destruirla.
Por eso, la oración que abajo consta, debería ser convenientemente meditada por todo católico e, incluso, por todo cristiano que no lo sea.
ORACIÓN POR LAS FAMILIAS
Dios nuestro, Trinidad indivisible,
tú creaste al ser humano “a tu imagen y semejanza”
y lo formaste admirablemente como varón y mujer
para que, unidos y en colaboración recíproca en el amor,
cumplieran tu proyecto de “ser fecundos y dominar la tierra";
Te pedimos por todas nuestras familias
para que, encontrando en ti su modelo e inspiración inicial,
que se manifiesta plenamente en la Sagrada Familia de Nazaret,
puedan vivir los valores humanos y cristianos
que son necesarios para consolidar y sostener la vivencia del amor
y sean fundamento para una construcción más humana
y cristiana de nuestra sociedad.
Te lo pedimos por intercesión de María, Nuestra Madre y de San José.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
AMEN.
Por otra parte, dice el estribillo del “Canto a la Familia” que la Familia es lo que sigue:
Es la familia fuerza y unidad
es el cimiento de la humanidad,
es nuestra sangre que continuará
un nuevo tiempo…
Fuerza, unidad, cimiento… palabras que, en sí mismas, constituyen toda una forma de comprender el sentido básico de la familia hoy día.
También habla el lema de “valores humanos y cristianos”…
¿No será, todo esto, un sueño?
14 comentarios
La familia es uno de los dones más especiales de Dios. Y, pese a que tan necesaria institución está siendo atacaada y denostada por muchos, hemos de recordar dos aspectos fundamentales:
1º. La familia, encabezada por el amor entre el hombre y la mujer, es la mayor garante de la vida. En su seno debe producirse y la procreación, pues Dios, en su alianza con el hombre, le encomendó esta bella misión. Así pues, no hay familia sin hijos y no hay hijos sin un padre y una madre.
2º. En la familia se produce la formación como persona que vive en sociedad. Son los padres los que educan a los hijos a ser responsables y son el mejor canal de transmisión de valores (cristianos).
Por ello, la familia cristiana, germen de la sociedad, debe ser apoyada y defendida frente a los que quieren desvirtuar su esencia y natural configuración.
Me uno a tus oraciones y esperemos que este VI Encuentro Mundial de las Familias de abundantes frutos, que, obviamente, redundarán en mantener fuerte a la FAMILIA.
+Que Dios te bendiga.
Todo lo que Ud. dice es ciertamente cierto.
Por eso es tan importante estos días en los que se va a recordar la importancia que tiene la familia.
También espero que los frutos sean abundantes porque la fortaleza de la familia es la fortaleza de la sociedad entera.
www.movimadrid.blogspot.com
Pues muchas gracias por la advertencia y, sobre todo, por el enlace porque el que esto escribe también asistió, en Valencia, al Congreso Teológico Pastoral y los demás actos.
Gracias, de nuevo.
Por lo menos veo que el interés va más allá de lo que yo, tristemente, creía.
Todas las características que enumera el autor se pueden aplicar a los diversos tipos de familia que, según la sociología, existen en pleno siglo XXI, a saber: familias monoparentales, de homosexuales, lesbianas, de curas casados con hijos, ensambladas, de madres solteras, de divorciados vueltos a casar, familias numerosas, familia nuclear y un gran etc.
Son tan dignas y merecen tanto respeto como las "tradicionales".
Sería positivo, entonces, que no las dejaran afuera del encuentro que se celebrará en Mexico, que las invitaran a participar. Lo contrario sería una posición discriminatoria y exluyente que, me parece, Cristo nunca tuvo.
Saludos.
Es evidente que lo que Ud. pretente es provocar.
Sin embargo, como católicos, los que lo somos, sabemos (y así lo entendemos) la familia es de una forma y no puede ser de otra (unión de hombre y mujer, etc.). Por eso, aunque sabemos que, en muchas ocasiones, se pretende dar el mismo sentido que tiene la familia cristiana a otro tipo de uniones, también sabemos que no tiene el mismo.
Por tanto, si bien cada cual es libre (libertad donada por Dios a su creación) para unirse a otra persona como lo crea conveniente, no vamos a llamar familia a lo que no lo es.
Nosotros creemos que las cosas son así. El Encuentro Mundial de las Familias (El VI) que se celebra, desde hoy, en Ciudad de México, lo es católico. Por tanto, lo positivo es defender la familia católica. El resto claro que puede existir pero no nos van a hacer comulgar con ruedas de molino.
El que puede,puede, y convoca a nivel mundial a las familias,siguiendo el modelo que ha hecho posible la evolución de la Humanidad hasta nuestros días.El modelo que ha dado amor,cobijo,sustento, educación, sociabilidad,etc. Otros modelos dan...lo que dan,porque ni siquiera son modelos,por mucho que se empeñen algunos.Lo que me fastidia es la trompetería de quienes nada ofrecen,solo critican...y mal,pero, eso sí, se les cae la baba de envidia ante una familia como Dios manda...¡pues hagan la prueba,leñe!.
El que no puede...vocifera...y sin argumentos.
!Que Dios te bendiga!
También fuimos a algunas de las comunicaciones, una de ellas de Kiko Arguello.
Si Méjico estuviera más cerca volvería
La verdad es que aquellas personas que no entienden entendible a la familia cristiana sólo puede vociferar en contra de ella. Eso hacen en las manifestaciones de homosexuales del famoso orgullo gay y en cualquier momento que les parece oportuno.
A mí, francamente, que hagan tal cosa me parece bien pues hacen uso de su libertad. Ahora bien, eso no empece el hecho de que defendamos, los cristianos, el modelo de familia que creemos positivo y que, como tú dices, se ha demostrado válido a largo de cientos, miles, de años.
Ahora bien, yo digo eso de "ladran, luego cabalgamos".
Por razones obvias (vivo en Valencia) yo también disfruté de toda la semana. Además, enviaba una crónica diaria a la revista Ecclesia que había creado un Blog para tal evento.
Por tanto, también gozé con todo lo que pude vivir y, con la Eucaristía (!nada de larga, seguramente corta!) mucho. Todo fue bien, muy bien, requetebien (si puede decirse así)
Por eso comprendo y sé cómo lo deben estar pasando, ahora, en Ciudad de México las miles de personas que allí estén.
1. No pretendo provocar, sí pensar libremente.
2. Ud. dice: "...como católicos, los que lo somos, sabemos (y así lo entendemos) la familia es de una forma y no puede ser de otra (unión de hombre y mujer, etc.)". Es que en aquellas familias que enumeré (y a Ud. no le gustó), TAMBIEN HAY CATÓLICOS mal que le pese. El problema que tiene el integrismo y la oligarquía eclesiastica es que no pueden darle una respuesta desde la religión a esos colectivos. Implica una contradicción, por cuanto esas personas fueron integradas a la iglesia católica por el bautismo y ahora, por su situación o elección de vida, han sido expulsadas, se les dice que no son católicos y son vituperadas e insultadas sin miramientos en honor a lo "natural" o "tradicional", que no es otra cosa que el imaginario de los curas.
3. La familia puede ser de varias formas ¡claro que sí!. Lea algún manual de sociología o demografía y tendrá ejemplos de modelos o tipos de familia que existen en la actualidad.
1. Dices: "se les cae la baba de envidia ante una familia como Dios manda".
No sabía que tu Dios le gusta que miles de mujeres católicas "aparenten" un matrimonio "ejemplar", aguanten infidelidades, violencia familiar, machismo y no puedan separarse por el "qué dirán", o porque no tienen la independencia económica para hacerlo (otras u otros no lo hacen por comodidad y tienen "doble vida"). Eso sí: van todos los domingos a misa...
2. Si quieres ver matrimonios y familias "como Dios manda", también puedes ir a los tribunales eclesiásticos. Ahí encontrarás católicos "de libro" que por seguir la receta mágica del matrimonio y familia cristianos (vendido por los curas), están tramitando su nulidad matrimonial.
¡Cuánta hipocresía, por favor!
Saludos.
Sí que se puede dar una respuesta: la familia, compuesta por un hombre y una mujer. No digo yo que desde la teoría (e, incluso, la práctica) no pueda pretenderse que existen otros tipos de familia.
Sin embargo, para un católico, aunque pueda ser planteable, no es admisible.
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