J.R.R. Tolkien – Ventana a la Tierra Media – Una influencia, bien merecida, de un maestro llamado John Ronald Reuel.

Es más que posible que haya quien no acepte que nuestro autor, J.R.R. Tolkien, tenga influencia más allá de lo que pueda suponer la literatura. Seguramente, quien así vea las cosas es seguro que tiene un problema de percepción de la realidad porque el profesor de Oxford no sólo influencia aquello que lo ha hecho más que merecidamente famoso, la literatura más que fantástica, sino que ha dejado y deja huellas no poco importantes en otros aspectos del arte.

Si hablamos de aquello que supone el mundo de la intelectualidad, Tolkien padre ha llegado más que lejos en su influencia. Así, por ejemplo, su presencia es aceptada o permanece poco advertida (aunque esté ahí) en multitud de autores que han hecho, de la obra de aquel, el origen de la suya cuando no una simple imitación sin llegar, claro está, a captar la totalidad del mundo subcreado por nuestro autor.

Lo que, en general, ha propiciado J.R.R. Tolkien es, por así decirlo, una ampliación de la posibilidad de crear literatura fantástica. Así, por ejemplo, el autor de la tan nombrada “Juego de Tronos”, a la sazón George R.R. Martin, no ha tenido problema alguno en decir bien claro que la influencia del autor de El Hobbit o El Señor de los Anillos, ha sido decisiva en su vida como autor y, luego, en lo que la misma haya podido tener en la serie animada que se ha producido basándose en su obra literaria. Incluso, aunque esto sea lo que es, sin darle más vueltas, resulta curioso que haya coincidencia en las iniciales, R.R., de sus nombres…

El caso es que, a partir de la publicación (dificultosa en algún caso, como bien sabemos) del profesor de Oxford pero, sobre todo, de la aceptación intelectual y literaria de la misma (que de todo hubo en su día y, a lo mejor, hasta hoy mismo…) se abrió un mundo que, hasta entonces, había permanecido casi cerrado. Por eso, podemos decir, sin temor a equivocarnos, que las puertas de la Tierra Media han propiciado no ya la entrada en la misma sino que ha permitido que otros autores den un paso adelante para escribir sobre tal tipo de temas. Al fin y al cabo, ya fue suficientemente zaherido, en un principio, J.R.R. Tolkien por incomprensión o, a lo mejor, por alguna que otra envidia… Se había, pues, abierto una gran puerta que muchos han sabido aprovechar en beneficio, no lo podemos negar, de millones y millones de lectores.

Pero, como decimos arriba, la influencia del subcreador de la Tierra Media es importante. Es, por ejemplo, tal que así:

-No podemos negar que las llamadas Crónicas de Narnia, cuyo autor, C.S. Lewis, fue muy amigo de J.R.R. Tolkien, tienen una influencia notable del autor de El Señor de los Anillos o El Hobbit.

-Alan Garner publica, en 1957 La piedra fantástica de Brisingamen que, a tenor de los críticos literarios, le debe mucho al mundo de la Tierra Media aunque el que esto escribe, una vez la ha tenido entre sus manos y leído, puede decir que se encuentra, como en La Guerra de las Galaxias, en una Galaxia muy, pero que muy lejana… eso, siendo generoso…

-Arriba ya hemos hecho mención al autor de Juego de Tronos y a la influencia que, según él mismo, ha tenido J.R.R. Tolkien

-Las decenas de autores de literatura fantástica que se han servido no del mundo subcreado por nuestro autor (en el sentido de copiarlo) sino, en todo caso, de todo el universo puesto al alcance de quien quiera hacerse cargo de él. Es decir, queremos referirnos a una influencia tan importante y “general” que resulta, de todo punto, imposible no mencionarla aquí.

El caso es que, a nivel musical también ha habido, hay, influencia de parte del profesor de Oxford. Así, por ejemplo:

-En 1969, Led Zeppelin pone en la calle su primer álbum y, en años sucesivos, graba varias piezas musicales inspiradas en las obras de Tolkien.

-Enya que, como compositora, ha tenido intervención en la música de El Señor de los Anillos (en La Comunidad del Anillo, para más señas) incluyendo, por ejemplo, en su tercer álbum, el tema instrumental de título Lothórien que, como podemos imaginar, está inspirado en tal reino élfico.

-Sally Oldfield, a la sazón hermana mayor de Mike Oldfield, que incluyó citas de textos de J.R.R. Tolkien en el primer álbum que sacó a la venta en 1978 de título Water Bearer en “Songs of the Quendi”.

-Shadowfax, grupo que, nacido a principios de los años 70 del pasado siglo, toma el nombre, nada más y nada menos, que del caballo de Gandalf, Sombragrís (Shadowfax), que le fue, al fin y por fin, regalado por el rey Théoden. Una influencia, podríamos decir, más que natural.

-David Arkenstone, artista que publicó en 2001 un álbum de título Music Inspired by Middle Earth que estaba basado, como podemos imaginar, en El Señor de los Anillos. Y no podemos dejar de decir que su apellido, por arte de lo que sea, tiene todo que ver (por ser lo mismo) con la joya buscada por Thorin Escudo de Roble en El Hobbit, a saber: La Piedra del Arca (Arkenstone)…

-Gandalf. ¡Sí!, Heinz Strobl, autor musical austriaco, que toma el nombre de tal personaje, más que conocido aquí.

-Los hermanos David y Steve Gordon, que se hacen llamar “Everstar”, crearon Enchanted Journey como una especie de homenaje a El Señor de los Anillos. Y tanto es así que, cada una de las piezas musicales hace referencia a un determinado momento de la historia.

En fin, estamos más que seguros que ahora mismo, algunas personas que esto lean podrían aportar otros nombres que se han basado en la obra de J.R.R. Tolkien para componer música. Incluso algunos de los lectores de esto lo han podido hacer…

Por otra parte, no vamos a nombrar aquí (porque sería imposible) a todos aquellos que han trabajado y trabajan en la obra de Tolkien padre. Es decir, en aquellos que han elaborado ilustraciones basadas en la misma o han trabajado en la música de las películas que, hasta la fecha, se han hecho de El Hobbit y El Señor de los Anillos o han musicado poemas de los libros de Tolkien padre o, por fin, han creado juegos de mesa de tal jaez. Y no lo hacemos porque tales personas no es que, por decirlo así, se hayan visto “influencias” por la obra del profesor de Oxford sino que están inmersas en la misma. Aquí hemos hecho referencia, seguramente con poca extensión, a todo aquel ser humano que, inspirado en nuestro autor ha visto cambiada su vida o, al menos, ha visto como lo escrito por él ha causado una gran impresión en su propio quehacer.

Qué decir tiene que mucho agradecemos a tales personas el haberse dejado influenciar por tal subcreador pues ellos también son, en lo que les toca, subcreadores de sus pequeños mundos personales.

Gracias, pues, a ellos y gracias, sobre todo, al verdadero maestro, quien ha sido origen de un mundo que parece no tener fin. Y ni queremos, por cierto, que lo tenga.

 Eleuterio Fernández Guzmán- Erkenbrand de Edhellond  

Panecillos de meditación

Llama el Beato Manuel Lozano Garrido, Lolo, “panecillos de meditación” (En “Las golondrinas nunca saben la hora”) a los pequeños momentos que nos pueden servir para ahondar en determinada realidad. Un, a modo, de alimento espiritual del que podemos servirnos.

Panecillo de hoy:

Hay mundos que, sin duda alguna, nos llevan más lejos del que vivimos, nos movemos y existimos.

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Para leer Fe y Obras.

Para leer Apostolado de la Cruz y la Vida Eterna.