Santiago Carrillo Solares: descanse en la paz que se ha merecido

Por la libertad de Asia Bibi.

……………………..

Por el respeto a la libertad religiosa.

……………………..

Enlace a Libros y otros textos.

……………………..

Hace unos días que dejó el mundo de los vivos una persona a la había que darle de comer aparte. Además de que era lo que era y nunca dejó de serlo porque no quería dejar de serlo, fue muy agraciado con las alabanzas más groseras, impresentables pero esperadas que, en estos casos siempre salen de la boca de muchos.

Cuando el cuerpo aún estaba caliente pero ya no estaba entre los mortales, muchas personas (Rey de España incluido; Presidente del Gobierno de España, por supuesto) no dudaron en proferir grandes loas hacia la persona que hacía poco acababa de fallecer. Todo era bueno porque nada malo se dijo y, ya, sabemos, que quien calla, otorga…

Pues bien aquella persona que tan alabada ha sido por los adláteres de una falsa democracia como la que sostiene con su dinero y poder a personas que como aquella que murió hace pocos días y que, en tiempos pretéritos (pero no olvidados por todos) provocó (por acción u omisión) una matanza de inocentes en el municipio de Paracuellos (España), también tiene, claro, una parte muy negra en su existencia. Es más, podemos decir que si, además, contribuyó a que España esté como esté en aquella tan loada “transición” hacia el desastre en el que estamos, aún podemos decir legítimamente (los resultados están ahí) que aquella persona que murió hace pocos días y que tan contentos dejó a muchos, ha sido una de la que sólo podemos decir malas, muy malas cosas.

Y, como, lo mejor es recordar para que no se olvide nada de nada de lo que aquí se ha escrito sobre tal persona, esto es lo que escribí cuando correspondió escribirlo.

En una ocasión, esto:

“Santiago Carrillo: ser lo que se es”

Está claro que cada cual puede ser como le parece que tiene que ser y que, sobre el gusto de lo que cada persona quiera hacer de su vida y su comportamiento, no hay nada escrito y si lo hay seguro que se queda corto porque hay tantas formas de ser como personas existen en el mundo.

Hasta ahí el razonamiento no puede ponerse en duda y, en resumen, cada uno es como es.

Sin embargo, hay que formas de ser que denotan que el Maligno tiene buenos hijos entre los seres humanos.

C.S. Lewis escribió un libro notable de título “Cartas del Diablo a su sobrino” en el que, en efecto, Escrutopo escribe a Orugario en perfecta camaradería de Mal a Mal acerca del hombre y, en general, de cómo dirigirse a su interior para dominarlo y llevarlo por el camino del mal y la perdición del alma.

Parece que Santiago Carrillo ha recibido muchos escritos de su padre Satanás. Por eso dice lo que dice, hizo lo que hizo y es como es. Además tiene el cuajo de estar cobrando algún tipo de pensión del dinero de los españoles.

Además, estoy más que seguro que, por lo que dice, estaría dispuesto a hacer lo mismo que hizo en tiempos de la Guerra Civil española. Y se llama Paracuellos.

Al parecer el comisario Santiago Carrillo ha juntado cuatro letras y la poca vergüenza que tiene para pergeñar un panfleto de título ‘La difícil reconciliación de los españoles‘ que es un tema que conoce muy bien porque la mayor dificultad que tuvo, en su día, fue que muchos españoles católicos se reconciliasen con el cementerio donde los destinó desde su elevado puesto político-criminal.

Resulta, claro, difícil reconciliarse con alguien que ha dedicado su vida a cumplir las órdenes de Satanás y, como fiel hijo, esquilmar las filas católicas.

Pero sigue igual. El paracuellero sigue igual que siempre. Por él no pasan los años de maldad porque para nada le sirve estar con un pie más en el infierno que este mundo. Nada de arrepentimiento, nada de “lo siento”, nada de “pido perdón”. Es como es el hijo del Mal.

A lo mismo, sigue a lo mismo. Hay que ver el lenguaje que utiliza, muy propio de las capas más profundas del infierno de las que escribiera Anne Catherine Emmerich en “La amarga Pasión de Nuestro Señor Jesucristo”. Cristo bajó a los infiernos pero subió a la Casa del Padre para sentarse a su derecha.

Sin embargo, a Santiago Carrillo parece que le gusta calentarse en los fuegos eternos porque no hay forma de que de ahí salga. Y ahí se refocila.

Vean, digo, la forma tan precivilizada de hablar:

“Seguimos teniendo una Iglesia de cruzada y reconquista”, porque debe suponer que no sabemos quién es y qué representa su poco augusta figura pero, sobre todo, porque hace como si los católicos no supiéramos lo que somos y a Quién seguimos.

“La crispación debe mucho al hecho de tener una Iglesia muy integrista, muy nacional-católica” o, lo que es lo mismo, que es la Iglesia católica la que fomenta un clima poco respirable. No es la presencia de alguien que se propuso terminar con lo católico a fuerza de camiones y disparos. No. Es la Iglesia católica, la que soportó su bota comunista la que, además, provoca.

Yo, con franqueza, no soy capaz de entender cómo a este individuo malcarado y chulesco no se le juzga por crímenes contra la humanidad y por genocidio que son delitos que no prescriben.

Tendrá cómplices.

Y, esto otro, también:

“Santiago Carrillo, borracho de ideología perversa, insulta al Papa”

Hay artículos que se escriben solos porque hay personas que se definen por lo que dicen e, incluso, por lo que hacen.

Una de ellas es Santiago Carrillo Solares, comunista de profesión y fascista de vocación.

Ahora, en connivencia con Gema Nierga, la dizque periodista de la cadena falsaria llamada SER (recuerden los, según Gabilondo, terroristas islamistas con tres pares de calzoncillos que estaban en los trenes del 11-M), se han dedicado a insultar al Santo Padre (por las comparaciones que hacen) y, sobre todo, a demostrar lo zotes que son ambos y, más que nada, la poca vergüenza que tiene Carrillo.
Por otra parte, no voy a negar que le tengo ganas a este matarife ideológico.

Como no podía ser de otra forma, tenía que ser en
Religión Digital donde se reprodujera una especie de tertulia que la susodicha citada arriba tiene en la susodicha emisora.
En un momento de la tertulia el comunista Carrillo dice que, en verdad, el Papa no es marxista sino lo siguiente:

“No, el Papa es un demagogo. Desde mi punto de vista, esa encíclica encubre otra política real del Papa y del Vaticano que no es acabar con la avaricia del capitalismo, y tal y cual, sino que es seguir manteniendo las costumbres tradicionales, frenar el avance de la Historia,… Y, claro, a un público como el suyo, al que les está diciendo que las costumbres son perversas, y tal y cual, hay que darle de vez en cuando algo que entienda mejor. Y lo que entiende hoy muchísima gente es que este mundo es injusto y que hay que cambiar cosas”.

Vayamos por partes.

“El Papa es un demagogo”

Resulta curioso que una persona como Santiago Carrillo diga que el Papa trata de halagar los sentimientos elementales de los ciudadanos para conseguir o mantener el poder. Eso es la mar de falso además de bastante alejado de la realidad.

Benedicto XVI no necesita ningún tipo de acción distinta de la que consista en ejercer su especial función de Pastor de la Iglesia católica.

Y es que cree el ladrón que todos son de su condición.

El Papa encubre su verdadera voluntad

El Santo Padre no tiene necesidad de encubrir la voluntad que tiene porque está bastante clara: denunciar los abusos de determinados procedimientos económicos.

Sí, sin embargo, tiene que ocultar la verdadera voluntad una persona como Santiago Carrillo Solares, ferviente admirador de una ideología que ha causado cientos de millones de muertos a la humanidad y que es la misma que él tiene.

Vamos, un asco.

“Frenar el avance de la historia”

Esto suena a muy viejo. Decir que la Iglesia católica quiere detener el avance de la historia es algo que, además de ser falso… es patético y que puesto en boca de un partidario del comunismo lo retrata bastante bien.

Ejemplo de la falsedad de esto:

En el número 11 de la última encíclica de Benedicto XVI, Caritas in
Veritate, dice (en palabras de Pablo VI y su Populorum progressio) que “Toda la Iglesia, en todo su ser y obrar, cuando anuncia, celebra y actúa en la caridad, tiende a promover el desarrollo integral del hombre” que es muy contrario al simple desarrollo científico o material y, por eso mismo, mucho más importante. O sea, al simple materialismo lo supera en calidad humana y humanitaria.

Por otra parte, ya sabemos lo que ha avanzado la historia de la humanidad con personas como Carrillo: exactamente hasta la caverna.
Y, por terminar:

“A un público como el suyo, al que les está diciendo que las costumbres son perversas, y tal y cual, hay que darle de vez en cuando algo que entienda mejor”

Nunca dice el Papa, así y ya está, que las costumbres sean perversas. Son perversas las que son perversas.

Lo que pasa es que Santiago Carrillo Solares, el paracuellero, toda costumbre la parece mala excepto la de mangonear la política y todo lo que pueda. Tal costumbre la lleva a rajatabla desde hace muchos, demasiados años.

Y, por cierto, al “público”, como nos llama a los creyentes este comunistón, no nos tiene que decir nada Benedicto XVI para que lo entendamos mejor.

Lo entendemos bastante bien: Santiago Carrillo Solares es un impresentable que no llega a la suela de los zapatos al Papa y se dedica a despotricar, cual asno, en la cadena laicista en cuya casa televisiva quemaron, en una sartén o microondas (no recuerdo ahora) una imagen de Cristo.

Está todo bastante claro.

Pero lo más gracioso es que la tertulia de la SER donde participa el paracuellero Santiago Carrillo Solares se llama “Tertulia de Sabios”.
Vamos, ¡qué más quisiera él! Como mucho, de asnos (y con perdón para tan abnegadas bestias).

En fin… eso es lo que hay. Por eso extraña, aunque no tanto en personas que aparentan ser lo que no son, que Santiago Carrillo Solares, comunista hasta la muerte, sostenedor de una ideología asesina y matarife alabado por tantas ilustres personas (hasta la aplaudieron en las Cortes españolas) se haya ido al inframundo (si Dios quiere que esto haya sido así, claro) sin que nadie, nadie, nadie, le dijera del mal que tenía que morirse que bien podría haberlo recibido en prisión.

Y eso, la verdad, da bastante asco.

Y, ahora, para los desmemoriados reyes, rajoys y otros por el estilo, traigo aquí la imagen de la esquela que Juan José Romero, ilustre mandamás técnico de InfoCatólica publicó en su blog al día siguiente de la salida hacia quién sabe donde (sólo Dios lo sabe) de Santiago Carrillo Solares. Es ésta:

Santiago Carrillo Solares

Eleuterio Fernández Guzmán
…………………………….
Para leer Fe y Obras.
…………………………….

InfoCatólica necesita vuestra ayuda.

Escucha a tu corazón de hijo de Dios y piedra viva de la Santa Madre Iglesia y pincha aquí abajo:


Y da el siguiente paso. Recuerda que “Dios ama al que da con alegría” (2Cor 9,7), y haz click aquí.

4 comentarios

  
José Luis
«¿Quién de vosotros podrá habitar en aquel fuego devorador? ¿Quién de vosotros podrá morar entre los ardores siempre eterno? » (Isaías 33, 14)
26/09/12 4:20 PM
  
Juan Mariner
Los hay criminales "de guerra", y los hay criminales "abortistas" (un millón de asesinados en España sin defensa alguna): los árboles no nos dejan ver el bosque cercano a Madrid.
26/09/12 8:37 PM
  
Maria M.
Realmente esta sociedad está muy enferma moralmente cuando homenajean del Rey abajo a un sanguinario genocida como ese , cuando el rector de la U. Autónoma , Angel Gabilondo , le concedió el doctorado honoris causa, con el aplauso los " intelectuales " Bardenes , Ana Belenes etc ( otro síntoma de la enfermedad es que los intelectuales patrios sea esos ), cuando es contertulio en una emisoria de radio... No entro en la Ley de amnistía ni mucho menos en el juicio de Dios , pero realmente da mucho asco que una sociedad homenajee a un criminal genocida.
Gracias a Juan José Romero y a usted por recordar a las víctimas del criminal , religiosos, laicos , niños , que su único " delito " fué el ser católicos

Maria M.
26/09/12 9:48 PM
  
kantabriko
Comparto su comentario estimado Eleuterio .
12/01/13 1:25 AM

Dejar un comentario



No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.