La Palabra del Domingo -26 de diciembre de 2010 - Escuchar a Dios
Mt 2, 13-15.19-23. Coge al niño y a su madre y huye a Egipto.
13 Después que ellos se retiraron, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: ‘Levántate, toma contigo al niño y a su madre y huye a Egipto; y estate allí hasta que yo te diga. Porque Herodes va a buscar al niño para matarle.’ 14 El se levantó, tomó de noche al niño y a su madre, y se retiró a Egipto; 15 y estuvo allí hasta la muerte de Herodes; para que se cumpliera el oráculo del Señor por medio del profeta: = De Egipto llamé a mi hijo. =
19 Muerto Herodes, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José en Egipto y le dijo: 20 ‘Levántate, toma contigo al niño y a su madre, y ponte en camino de la tierra de Israel; pues ya han muerto los que buscaban la vida del niño.’
21 El se levantó, tomó consigo al niño y a su madre, y entró en tierra de Israel. 22 Pero al enterarse de que Arquelao reinaba en Judea en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allí; y avisado en sueños, se retiró a la región de Galilea, 23 y fue a vivir en una ciudad llamada Nazaret; para que se cumpliese el oráculo de los profetas: = Será llamado Nazoreo. =
COMENTARIO
Escuchar a Dios
En muchas ocasiones no nos conviene lo que nos dice Dios. No digo lo que nos puede decir, como posibilidad, sino lo que, en efecto, nos comunica y no podemos negar que nos ha dicho. Talentos tenemos que, incluso descubiertos, no ponemos en práctica por conveniencia, egoísmo o la razón que sea.
José, el carpintero, no hizo lo mismo. Puso atención y actuó.
Ciertamente, había tenido oportunidad demostrar su fe y la fidelidad que tenía a Dios cuando el Ángel del Señor le dijo que el caso de María, su desposada mujer, era bastante especial. No dudó o, al menos, no demostró tal estado de ánimo y aceptó la situación por la que tenía que pasar.
Ahora había llegado el momento de renovar la fe y confesarla.
Cuando aquellos sabios que habían llegaron de oriente para adorar al niño que acababa de nacer se retiraron es de suponer que José se disponía a iniciar su nueva vida de padre. Pero Dios tenía otros planes para él que debía acatar y cumplir.
Dos veces se cumplen las Escrituras y dos veces más José es fiel.
Primero se va a Egipto y luego regresa a su tierra. Así se cumple la profecía de Oseas (11, 1) “Cuando Israel era niño, yo le amé, y de Egipto llamé a mi hijo”. Tenían, pues que volver de aquel forzado exilio. José escucha a Dios y muestra su fidelidad.
Pero no parecía suficiente aquello. Los hombres aún podían buscar el aniquilamiento de la Esperanza de Israel.
Se vuelve, entonces, a cumplir la Escritura. Es la segunda vez en un corto espacio de tiempo que José es humilde y cede su voluntad ante la de Dios.
A Jesús, según las profecías recogidas en lo que damos en llamar el Antiguo Testamento, se le llamaría Nazoreo porque sería en aquella ciudad, Nazaret, donde viviría sus primeros años. Así, por cierto, también, lo llamarían los discípulos de Emaus cuando se encontraron con Jesús camino de su casa pero, por tener los ojos velados, no pudieron reconocerlo.
Por eso José, después de conocer que Arquelao aún reinaba en Judea “se retiró”, dice el texto de san Mateo, a Galilea y, en concreto, a la ciudad de Nazaret. Fue avisado en sueños y siguió las indicaciones que se le hicieron.
Decimos que José fue fiel no una ni dos sino bastantes veces antes de asentarse definitivamente en la ciudad que daría hombre al mismo Jesús, llamado de Nazaret. Insistentemente se le requirió y de forma perseverante actuó como se le pedía.
Todo se había cumplido porque así era la voluntad de Dios. Y José había actuado como sólo una persona fiel puede actuar: entregando su vida por Aquel que la creó.
PRECES
Por todos aquellos que no quieren escuchar a Dios.
Roguemos al Señor.
Por todos aquellos que no se dejan influenciar por la voluntad de Dios.
Roguemos al Señor.
ORACIÓN
Padre Dios; ayúdanos a ser fieles como lo fue José; cumplidores con tu voluntad como fue José.
Gracias, Señor, por poder transmitir esto
El texto bíblico ha sido tomado de la Biblia de Jerusalén.
Eleuterio Fernández Guzmán
P.D.:
Click sobre la imagen para más información
InfoCatólica necesita vuestra ayuda.
Escucha a tu corazón de hijo de Dios y piedra viva de la Santa Madre Iglesia y pincha aquí abajo:
Y da el siguiente paso. Recuerda que “Dios ama al que da con alegría” (2Cor 9,7), y haz click aquí.
1 comentario
Enseñó a caminar al que era el Camino,
enseñó a hablar al que era la Palabra y enseñó a vivir al que era la Vida.
Dejar un comentario