Eppur si muove - Iglesia católica: renovarse y morir
En muchos aspectos de la vida suele ser conveniente dejar de lado el pensamiento que se tenía sobre determinados aspectos y ponerse, digamos, al día de lo que pasa.
Eso no es nada censurable sino que es, además, obligado.
Por eso de dice eso de “renovarse o morir” porque, al fin y al cabo, estancarse en algo no suele ser muy recomendable.
Sin embargo, cuando hablamos de la Iglesia católica, de la doctrina que transmite y que defiende y de lo que, en resumidas cuentas, es la función que lleva a cabo, las cosas son diferentes. Es más, nada de lo dicho arriba tiene que ver, ni tendría que ver nunca, con la Esposa de Cristo.
¿Acaso la Iglesia católica no tiene que renovarse como lo tiene que hacer cualquier hijo de vecino?
Ante esto también se dan dos posicionamientos en el seno de la Iglesia que son, por eso mismo, antagónicos. Además, estar de acuerdo con uno u otro supone, a fin de cuentas, participar o no de la vida misma de la Iglesia católica.
Por ejemplo, supongamos que ponemos sobre el tapete los siguientes temas:
-El aborto
-La eutanasia
-La utilización de células madre embrionarias
-La “utilización” política de la doctrina católica
Aunque podrían ser muchos más los temas a reflejar aquí (por ejemplo, el de los preservativos como contracepción y la doctrina contraria, al respecto, de Benedicto XVI manifestada en su viaje a África), creo que son más que suficientes como para entender quién es quién en la Iglesia católica pero, sobre todo, dónde está cada cual.
Sobre cada uno de estos temas podemos encontrar, con toda seguridad, respuestas que, según sean, las tendremos como más acordes o menos con la doctrina.
Por ejemplo, en lo referido al aborto parte de la Iglesia católica entiende que, según se mira, tampoco es importante porque, al fin y al cabo, habría que mantener un “Equilibrio al debatir sobre el aborto.” Y esto lo dice Juan Masiá, profeta progre de la Iglesia católica.
Y esto muestra lo malo que es, en el fondo y en la superficie, no tener claras las ideas en materia de doctrina católica sobre la vida y la defensa de la misma.
Por ejemplo, en lo referido a la eutanasia tampoco crean que las cosas las tengan, algunas personas, nada claras porque creen que, si al fin y al cabo, se trata del bien del enfermo…
Pues en esto la doctrina de la Iglesia católica es bastante clara: es inmoral y antisocial, que no es poco.
Por ejemplo, en lo referido a la utilización de células madre embrionarias como “remedio”, por ejemplo, a enfermedades presentes en el ser humano existe, digamos, un confusión notable: mientras que se sostiene, desde sectores “avanzados” que no está mal según el fin que se busca, la Iglesia católica entiende, muy al contrario, que conviene “reafirmar la dignidad y los derechos fundamentales e inalienables de todo ser humano, incluso en las” primeras etapas de su existencia” (Dignitas personae 37)
Y, por último, en lo referido a la utilización de la doctrina católica desde el punto de vista político bien sabemos de la existencia de la denominada Teología de la Liberación (muy “bien” representada por Leonardo Boff, Pedro Casaldáliga et alii) y del daño que han pretendido hacer a la Iglesia católica sembrando cizaña y administrando ponzoña teológica que causa estragos entre los creyentes sencillos (siendo, esto, un gran pecado, según el mismo Cristo)
Así, según cada cual entienda estos cuatro temas apenas aquí apuntados sabrá si está a favor o no de la doctrina de la Iglesia católica a la que pertenece o, al contrario, sólo ostenta una pertenencia de número sin, de verdad, someterse buenamente a lo que establece.
Es que, al fin y al cabo, renovar la doctrina en ciertos temas es, para la Iglesia, morir, porque dejaría de ser ella para ser, eso sí, más moderna, más de hoy, más nada.
Aunque, claro, también es cierto que para algunos sectores del catolicismo lo que les gustaría es que, precisamente, desapareciera la Iglesia católica como es.
Así sí se entienden ciertas cosas.
9 comentarios
El caso es que la Iglesia católica no está podrida. Por lo tanto, no puede caer. Es más, no puede caer nunca porque la sustenta Jesucristo, Quien la fundó.
Lo que Ud. quiere decir es que la Iglesia católica se tiene que someter a la realidad: al relativismo, al nihilismo y así.
El resto de temas, como digo en el artículo supondría, por eso lo digo, la muerte real de la Iglesia católica porque sería otra cosa.
La Iglesia no morirá nunca puesto que "el poder del infierno no la derrotará". La muerte es la soledad y Cristo nunca abandonará a su Esposa. Los que si vemos morir cada día son todos aquellos que abrazan lo políticamente correcto, olvidando a Dios. No mueren físicamente, pero sí espiritualmente.
La Iglesia Católica, guiada por el Paráclito, nuca abjurará de su doctrina (aborto, eutanasia, sodomía, etc.), ni de su tradición (por ejemplo la forma extraordionaria de la liturgia), ni de sus dogmas de fe (trinidad divina, virginidad mariana, etc.), ni de la Palabra de Dios. La única Iglesia de Cristo permanecerá junto a su fundador, pese a que muchos quieran desvirtuarla.
El hombre no es el que decide qué enseña la Iglesia, sino que es el mismo Jesús el que estableció hace casi 2000 años cómo convertirse y creer en el Evangelio.
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Ciertamente; afirmativo: Vista y constatada la agonía: Si la Iglesia de Cristo no se renueva: El final, su final de ella, es morir y por lo mismo como tal Iglesia, no le queda otra destino que el de desaparecer de la faz de la Tierra.
Dicho sea: El llamado Misterio de la Redención, y por lo tanto la resurrección, quedaría limitado a la inmaculada naturaleza del cuerpo resucitado de Jesús; y de su apsunta Madre, la Virgen María.
Y aquí la esperanza y el consuelo para quien de esto entiende que el propio Cristo nos hace: -"Las puertas del infierno no prevalecerán contra ella".
El Evangélio es taxativo: Para que esta renovación sea efectiva: Hay que separar -y guardar o quemar- el trigo de la cizaña; el sarmiento inútil de la cepa útil; Separar poner a la izquierda o a la derecha cabras y cabritos de ovejas y de corderos.De vírgenes -iglesias- necias y otras prudentes. De réprovos y bienaventurados etc. etc.
Dicho sea: ¿En qué consiste esta renovación de la Iglesia -y de tal forma sea- para que no vuelva a corromperse? Digo más: ¿en qué consistirá esta renovación? El Evangelio taxativamente dice que la Iglesia de Cristo no puede ser convenientmente renovada, almenos que este Mundo, -donde la Iglesia prisionerá está- no sea desintegrado.
Y aquí la pregunta del tresmilmillones de los que se dicen Cristiano.
Piense: Cada cual como seguidor de la filosofía de Cristo; Y así conscientemente responsable de la respuesta a dar: Imagínese que Dios, en su fuero interno, le dice a cada cual personalmente como responsable cristiano de la siguiente manera:
-Si quieres que al Iglesia sea convenientemente renovada y así, como está escrito, salvarte tú y los tuyos: Debes destruir el Mundo.-
Visto lo visto de los cristianos que aquí pululan: Queda constatado que si la pregunta, así personalmente, por Dios fuera hecha: La respuesta de este noventa y tantos porciento sería algo así cómo: -¡Qué locura Señor, destruir el Mundo. Necesitas un psiquiatra!
Totalmente de acuerdo contigo. El problema es que muchas personas, dentro de la Iglesia católica, no entiendan lo que es tan sencillo de entender.
A lo mejor me equivoco pero creo que, en lo referido al trigo y a la cizaña lo que hemos de entender por eso es apartar de nuestro corazón lo que sea malo para que lo bueno fructifique en él.
Por otra parte, la destrucción de mundo no ha de querer decir la destrucción física sino, más bien, de una que lo sea espiritual: dejar de lado lo que, en general, es negativo y aportar, a la sociedad, lo que es bueno y benéfico.
No quisiera entender que sea tu ignorancia respecto al fin de los tiempos, sino más bien la educación la que te sugiera esta escapada por la tengente. No obstante te responderé.
Otros menos educados y más ignorantes de la exégesis en su hermenéutica - de Hermes el oscuro- que los hay. Me hubieran dicho: ¡Otra vez este loco!
Y así te diré que la destrucción de este Mundo será el efecto consumado de la división de la parte y el todo de la estructura física, mal llamada a tómica o indivisible, de este Universo. Entrar en detalles de esta singular deflagración o desintegración física del todo universo, bien que tenga su parte de la física nuclear conocida. No por esto deja de tener su parte misteriosa a tenor de sus más íntimas consecuencias cuando este conocimiento es apoyado por lo que es tenido como mística de "FE". Esa denominación -que el Evangelio habla- como fuerza que no sólo puede mover montañas sino que puede reventar universos. El hecho de que la ciencia actual, sin saber cómo ni porqué, no consideré esta ionización de los elementos: No debe pretenderse de que no se pueda provocar esta división de los elementos, -a potencia de potencia- contrariamente a cómo se fueran integrados a través del tiempo de la Creación, por unos dicho. Y por otros: a través de la evolución.
Por lo que se refiere a lo del trigo y la cizaña: Si lees bien la parábola (Mt.13,24-30) entenderás que el campo sembrado -siendo este planeta Tierra- se refiere por una parte a la antropología humana, propiamente definida por herencia genetica, creada y creadora que de Dios procede; Y otra, la que no lo es y que de Dios no procede porque es sembrada por el enemigo.(¿...?) Cizaña ésta, genealogía de extranjeros que hasta el fin del tiempo convive y cohabita promiscuamente en la Tierra con el trigo, no sólo socialmente. Sino que incluso a modo de enfermedad místico-psíquica- se presenta por conducto de herencia genética en sujetos procedientes de un mismo origen de génesis. Visto y comprendido esto entenderás porqué a veces, hijos de los mismos padres, unos son tan distintos de los otros. Como así -socialmente en la Tierra- los llamados humanos unos son tan distintos de los otros. La razón es muy simple: No todos los moradores del planeta Tierra tenemos el mismo origen genético, pues unos son de origen cizaña; Y otros somos de origen trigo.
A estos, los de la cizaña en otro sitio se les dice de estar destinados a la cautividad, porque de la cautividad proceden y a la cautividad irán.(Ap.13,9-10) Dicho sea aquellos que si siguen la dosctrina de Satán (v.Ap.2,21-26)
El problema ha sido sus cenizas en Hispaniamerica o latinoamerica. La acciones pastorales enfocadas al desarrollo humano, olvidando hablar del mensaje de conversion I salvacion. Es excelente pero si solo haces Eso te conviertes en una buena ong. Xto y la Iglesia siempre ha estado con los pobres, los enfeemos, los ancianos y los debiles pero ademas de por la dignidad humana por la salvacion en Xto
En guatemala en algunos sitios quedaron casi eriales exagerando. Cuando oyes hablar a los obispos cabrera o ramazzini parecen politicos. La conversion en ideologia provoca el rechaz de otros pobres y personas q piensan distinto en temas opinables. En el Salvador arena gano todas las elecciones hasta hace poco por ejemplo cuando el fmln se modero
Ese vacio espiritual fue reemplazado por las sectas o Iglesias evangelicas aunq Guatemala fue un caso especial por el apoyo politico a los evangelicos. Fue transversal: en todas las clases sociales
Ademas es + complejo pq algunos sacerdotes y misioneros espanoles son admirables
personas, mucho + q yo, pero con problemss doctrinales de base; nos conociamos cuando vivia alli por ser espanoles. Y es por las ensenanzas y libros recibidos
Un articulo muy bueno sobre la teologia liberacion esta aqui:
Www.defiendetufe.org/site/content/view/73/2
Estoy de acuerdo con Ud.
Por cierto, muchas gracias por el enlace porque es impresionante el trabajo hecho por Martín Zavala en el artículo que contiene. Me parece fundamental para conocer qué es la Teología de la Liberación y para saber cómo enfrentarse a ella.
Gracias.
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