Aborto: se aprobó el proyecto de Ley de Crimen Organizado... para fomentarlo

La desgracia cae sobre una nación cuando Satanás se apodera de sus gobernantes y consigue que elaboren normas que, en sí mismas consideradas, atentan contra la propia especie humana.

Eso ha pasado con el Ejecutivo laicista, anticatólico y, ahora, favorecedor de la muerte ajena, que preside Rodríguez Zapatero.

Era de esperar que pasara lo que ha pasado porque tenían (nunca mejor dicho) entre ceja y ceja (de Zapatero) la aprobación de lo que es, sin duda alguna, el mayor ataque legal al ser humano y que, por estos lares, se llama, ley del aborto.

Todo lo peor que se venía venir en ha llegado. No han dado oportunidad, siquiera, a que pensáramos que, a lo mejor, quedaba algo de humanidad en sus corazones. Han demostrado que no corre sangre por sus venas sino, todo lo más, algún líquido que, del infierno, les lleva por el mundo.

Lo aprobado es tan aberrante que no podemos, por menos, que poner los puntos sobre la íes para que no se crea que otorgamos callando.

Por otra parte, lo que pueda decir, por ejemplo, el Partido Popular, dado su pasado y presente a favor del aborto, lo tenemos como no dicho hasta que no rechace, en su totalidad, tan gran barbaridad.

Pues bien, si alguien esperaba algo bueno de lo que podía decidir el Consejo de Ministros… debería tomar, de vuelta a la realidad, el billete que le trajera del Reino Babia o el de Inopia donde ha habitado los últimos meses o años.

El nombre del engendro es, como poco, para nota de desnorte: ”Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE)”.

O sea que se trata de algo saludable, sexualmente hablando, matar a quien va a nacer. A esto, además, lo llaman “interrupción”, de una forma que demuestra, a la perfección, que quien ha elaborado tal norma es un completo ignorante.

En realidad no se puede interrumpir un embarazo porque eso supondría que, con el tiempo, el mismo embarazo podría continuar. Y eso en base a que “interrumpir” es “Cortar la continuidad de algo en el lugar o el tiempo” y “continuidad”, la “Unión natural que tienen entre sí las partes del continuo“. Es decir, de algo que continúa.

Lo que pasa es que hablan así porque es una forma burda de proceder. Burda y homicida, en el fondo. Que lo llamen matanza y ya está.

Les hubiera bastado con consultar un diccionario cualquiera. Pero, para eso, se les debería reconocer algún tipo de conocimiento de la realidad. Y esto, en verdad, está aún por demostrar.

Pues, una vez reconocida la incapacidad intelectual de nuestros desgobernantes, conviene reconocer que el objetivo que pretendían lo han conseguido:

1.-El aborto será libre hasta las la semana 14 de embarazo.

2.-Las menores de edad entre los 16 y 18 años no tendrán que demandar el consentimiento paterno para abortar.

Son dos “grandes” novedades contiene la tal IVE y la demostración más simple de que estamos en manos de ingenieros sociales que, en realidad, no han hecho más que la carrera de matarifes con sueldo.

Entonces, bien podemos decir que lo que se ha aprobado ha sido, en forma de proyecto, la Ley del Crimen Organizado porque no otra cosa es facilitar con tantas facilidades fáciles que quien quiera y pueda (mujer embarazada) pueda deshacerse del nasciturus como si se tratara de una escoria o, lo que es lo mismo, de algo que sobra en su vida.

Y a esto lo llaman legislar. Yo más bien lo llamaría holocaustear porque, en verdad, se está preparando un buen Holocausto.

Y, a lo mejor, con consentimiento de muchos votantes a los que, sólo por caridad, llamaremos miembros de la humanidad.

Aunque, bien mirado, aún tienen el remedio de hacer uso de la píldora del día después.

Y es que, para matar, los progres, se las pintan solos.

Y no sólo los progres, por desgracia.