Operación policial en Asturias: arrestan a varias personas en un ritual con ayahuasca y detienen al chamán

Un «impresionante» despliegue policial en la tarde-noche del pasado viernes 30 de septiembre alteró la localidad de Tuilla, en Langreo (Asturias), según relata Marta Varela en el diario El Comercio.

Una exconcejala detenida

Tras casi ocho horas de registro en una vivienda de la zona de La Braña se llevaron detenidas a siete personas presuntamente relacionadas con la tenencia ilícita de una planta alucinógena procedente de Brasil, la ayahuasca.

Entre los detenidos figura la propietaria de la casa, R.H.C., nacida en La Felguera, de 43 años, profesora de un instituto, escritora y conferenciante. En los comicios de 2015 fue en las listas de Somos Llangréu, llegando a ser concejal del equipo de gobierno (IU y Somos) en 2016 tras la dimisión de otra edil. No repitió en el cargo.

Inquietud en el pueblo

Las alarmas entre los vecinos saltaron a mediados de semana, cuando, según quienes viven en la zona, «comenzamos a comentar la presencia de hombres no habituales por el pueblo. Ahora creemos que eran policías de paisano». Previsiblemente personal de la Unidad Central de Estupefacientes de Madrid.

Los vecinos de la zona se percataron de que había mucho revuelo en una casa ubicada a escasos metros de este pequeño pueblo «por donde antes había una carbonería y donde actualmente vivía una mujer con su hijo menor de edad, a la que visitaban con frecuencia más personas».

Hasta el viernes, nada era sospechoso. Pero la presencia de «tantos policías en dicha casa y alrededores que estuvieron hasta al menos las cuatro de la mañana nos asustó», explicaban el sábado 1 de octubre, aún sorprendidos de lo sucedido en Tuilla.

El chamán, único imputado

En las informaciones publicadas hoy, 3 de octubre, también por El Comercio, leemos que los detenidos fueron cuatro. En la tarde del domingo 2, tras prestar declaración en los juzgados langreanos, fueron puestos en libertad provisional.

A tres de ellos no les han imputado cargos; sólo se ha imputado a un guía-chamán de origen sueco. Esta persona estaba dirigiendo un retiro de meditación en el que todos participaban de forma voluntaria.

En el momento del registro, el chamán era el único que estaba en posesión de dicha planta alucinógena. La investigación, dirigida desde la Unidad Central de Estupefacientes de Madrid, continúa abierta, y no se descartan nuevas actuaciones.

Así se defienden: no es una droga

Las cuatro personas detenidas declararon que consideran que dicha planta ancestral, a la que atribuyen poderes mágicos, no es una droga, ya que sostienen que no genera adicción y es cien por cien natural. Afirmaron también que su uso es habitualmente con fines terapéuticos y medicinales.

Además, aseguraron que su consumo se realiza en microdosis. Apuntaron que cuando se presentaron los agentes estaban participando una jornada de meditación y de sensibilización sobre el pueblo Arauco, dirigida por el chamán.

El registro y las posteriores detenciones se produjeron en el domicilio de R.H.C, quien fue edil en el pasado mandato. Finalmente ha quedado en libertad sin cargos, como otros dos de los participantes en dicha jornada.

Ya es “normal” en Asturias

Asturias es una de las regiones donde es posible participar en retiros y meditaciones, fundamentalmente en áreas rurales. En ellas, el consumo de ayahuasca en microdosis forma parte del programa, aprovechando que existe un vacío legal sobre su ingesta.

Los precios de estas experiencias van desde los 200 a superar los 1.000 euros dependiendo de los días. En el Principado se organizan en lugares como Oviedo, Gijón, Avilés, Luanco, Luarca, Cudillero, Pravia y Cangas del Narcea, entre otros.

Qué es la ayahuasca

La ayahuasca se obtiene mezclando dos plantas. Una, la propia ayahuasca (Banisteriopsis caapi), que es una liana de las selvas de Sudamérica. Otra, la chacruna (Psychotria viridis). Ninguna de ellas es alucinógena si se consumen por separado.

El alucinógeno está en las hojas de la chacruna, que contienen DMT, o dimetiltriptamina. Pero las hojas solas no hacen efecto, ya que nuestras enzimas intestinales desactivan la DMT. Ahí entran en juego los tallos de la ayahuasca, que interrumpen el efecto de estas enzimas y permiten que la DMT sea absorbida.

No existe una única manera de prepararla. Algunos añaden alucinógenos como el peyote u otros aditivos no psicoactivos como ají o ceiba. Un recipiente de 100 litros se deja hervir hasta reducirlo a unos 10 litros.

La ayahuasca se suele beber, aunque se puede fumar e inyectar. Bebida, la DMT entra en la sangre y llega al cerebro. Las alucinaciones comienzan unos 40 minutos después. Alcanzan su máximo efecto en una hora. Las diarreas y vómitos son habituales. Puede provocar taquicardia.

Entre los efectos psicoactivos es frecuente la evocación de recuerdos y una fuerte introspección e hipersensibilidad sensorial. Las alucinaciones no sólo son visuales, sino también sonoras. También puede derivar en ansiedad y paranoia.