La Iglesia en México alerta sobre la Santa Muerte, adorada por muchos católicos
La adoración a la Santa Muerte sigue preocupando a la Iglesia católica en México. En la reciente Semana Santa algunos pastores han advertido a los fieles sobre esto. Recogemos a continuación algunos de estos testimonios.
La búsqueda de supersticiones
En la pasada Misa Crismal, celebrada en la Catedral de Xalapa (Veracruz, México), su arzobispo, Hipólito Reyes Larios, refirió que hoy vivimos en un mundo que tiene muchas depresiones, muchas problemáticas y muchas enfermedades, tanto físicas como psicológicas, y la gente necesita ser escuchada; por eso siempre los confesionarios están llenos, la gente necesita que alguien le escuche y le consuele; y expuso que lo mismo sucede con quienes buscan oración de liberación.
Según leemos en el medio digital Al Calor político, al explicar el significado y uso de cada uno de los óleos, monseñor Reyes Larios dijo que el Óleo de los Catecúmenos se utiliza para exorcismos menores y hay sacerdotes nombrados para realizarlos y para hacer estas oraciones de liberación. Manifestó que los exorcismos mayores se dan de vez en cuando, pero hoy tenemos mucha maldad.
“Hay mucha gente que adora a Satanás, hay mucho satanismo, hay gente que adora a la mal llamada Santa Muerte, hay gente que anda buscando en todos lados supersticiones, amuletos, horóscopos y tanta cosa de este tipo. Esa es nuestra sociedad y es fácil que la tentación llegue por distintos motivos”, afirmó.
“No se puede adorar”
Por otro lado, según leemos en E-Consulta, el portavoz de la archidiócesis de Puebla (México), Dante Pimentel, destacó que no se puede adorar a la Santa Muerte porque no tiene una realidad. Sin embargo, aclaró, se respeta las posturas de quienes piensan lo contrario.
Ante las personas que realizaron algún tipo de celebración dedicada a la Santa Muerte el pasado Viernes Santo en la ciudad de Puebla y en otros puntos del estado, el portavoz de la diócesis poblana exhortó a los fieles a adorar a Cristo, quien venció a la muerte con su misterio pascual.
Comentó que la arquidiócesis respeta las posturas de quienes piensan diferente o tienen costumbres ajenas a la fe católica. “No se puede adorar a la muerte porque la muerte no es nada, no tiene una realidad. La muerte simplemente es un paso a una vida que nos espera mucho mejor. En ese sentido nosotros exhortamos a nuestros feligreses a adorar a quien es la vida, Jesucristo, que vence a la muerte para darnos vida en abundancia”, resaltó Dante Pimentel.
Defensores de esta idolatría
Por su parte, José Manuel Bello Núñez, quien asegura es sacerdote de la llamada iglesia de la Santa Muerte, aseguró que cada año, aumenta el número de seguidores de la también denominada “flaquita”. “Hay diferentes altares en Puebla. Algunos hacen su procesión en estas fechas pero nosotros la realizamos en noviembre”, expresó.
Durante el anuncio de los festejos por el octavo aniversario del majestuoso altar a la Santa Muerte en Puebla, el custodio guardián del altar, Víctor Miguel Sánchez, aseguró que la Iglesia católica no los reconoce como parte del culto cristiano. Lo cuenta el medio Intolerancia Diario.
Señaló que “la Iglesia católica no nos reconoce como tal, porque para ellos la Santísima Muerte no tiene nada que ver con los dogmas de la fe católica, sin embargo, el 90 por ciento de los devotos de la Santísima Muerte, somos católicos, profesamos esa religión”.
Reveló que la gran mayoría de los creyentes de la Santa Muerte son bautizados, casados por la Iglesia y cumplen los rituales como cualquier católico. Empero, reiteró, para la Iglesia católica no representan una parte del culto religioso.
En rueda de prensa, reveló que cada año realizan los festejos y para el presente 2015, celebran el octavo aniversario de la llamada “niña blanca”, en el que esperan entre 6.000 y 8.000 devotos, los días 14 y 15 de abril, con una gran caravana artística.
Una percepción errónea de su crecimiento
Asimismo, Sánchez reveló que el culto a la Santísima Muerte es netamente mexicano, aunque en la actualidad mucha gente dice que el culto va creciendo y no es así. Simplemente, el culto ahora se va abriendo más al decir que son devotos, “que creemos en ella y no nos da pena decirlo”.
Recordó que a partir que se abrió el altar, en la 9 Norte 1204, más personas han creado una conciencia de tolerancia y de respeto a los devotos a la llamada niña blanca. Por eso, reiteró que a la Santísima Muerte la veneran como a cualquier otro santo, porque al único que le rinden adoración es a Dios.
Víctor Miguel Sánchez reiteró que el culto a la Santísima Muerte, es una tradición prehispánica, de etnias como los mayas y los aztecas, que le rendían devoción a la señora Mictecacihuatl.
Reveló que el culto a la Santísima Muerte, principalmente, consiste en el agradecimiento, aunque hay mucha gente que piensa que aquí se viene a matar animales y se hacen misas negras o algo extraño y cuando se acercan encuentran que es una devoción como cualquier otra, según su explicación.
Por eso, dijo que “el culto que se le da es venir y rezarle sus padres nuestros, hacerle sus peticiones, ponerle sus veladoras, dejarle una ofrenda y hasta ahí. Pero no hay nada negro ni extraordinario en su culto”. Dijo que al ver eso, muchos se sorprenden y dicen: “yo pensaba que era una cosa muy distinta y cuando se dan cuenta que es una devoción como cualquier otra, se sorprenden”.
Se calcula que por lo menos dos de cada diez poblanos son devotos “es una población de devoción muy grande, a la niña blanca”. Dijo que los caracteriza, que son personas que llevan muy arraigada su fe y su devoción, porque para todo rezan, piden y tienen la confianza que ella los va a ayudar, “pero no caemos en el fanatismo, porque mucha gente piensa que los devotos de la niña blanca somos fanáticos y no es así, no hay fanatismo en la devoción a la niña blanca”.
18 comentarios
28. Examínese, pues, cada cual, y coma así el pan y beba de la copa.
29. Pues quien come y bebe sin discernir el Cuerpo, come y bebe su propio castigo.
Convendría determinar ¿cuál es esa carencia?, para poder llenar dicho espacio con las devociones propias.
-La primera carencia es no saber que es Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, quienes otorgan favores y milagros.
-La segunda es que los ángeles y los Santos, tan solo interceden como que son seres agradables a Dios por su santidad quienes son escuchados y por ello son quienes presentan nuestras peticiones ante Dios. No tienen la categoría de ser adorados ni alabados sino tan solo venerados.
-La falta de información acerca del Demonio y las maneras en que nos podemos ligar a su influjo es la mayor carencia. Si se nos hablara de que hay maneras promovidas, permitidas y que han nacido en el seno de la Iglesia Católica para liberarnos del influjo de Satanás en lugar de tantas prácticas populares, conocidas y difundidas en nuestro medio latinoamericano como las limpias...y todo el catálogo de usos y costumbres practicados para estos fines...
Es tiempo de llamar al diablo y sus acciones por su nombre, es tiempo de hacerles saber a los bautizados en la fe Católica que él es el adversario y que esas prácticas llevan su sello. Programas de radio y TV, cine, cortos informativos, campaña en espectaculares y paraderos de transporte urbano, una verdadera campaña de información al respecto es la manera de llenar ese enorme vacío.Hagamos de la libre expresión un instrumento de liberación de satanás.
Al acercarse a la niña blanca, no le solicitan un favor o milagro, le dicen "hazme el paro", una frase muy de nuestro léxico urbano y que denota una subcultura, una manifestación casi subterránea cargada de desencanto por no haber recibido los santos favores. Aquí es dónde se llena con estas manifestaciones devocionales el vacío que se genera porque mis caprichos (peticiones) no son concedidas, o por que simplemente los tiempos de Dios no son nuestros tiempos a la hora de conceder ó simplemente por que falta fe al pedir. El hecho es que si aquí no abren pues toco otras puertas.
Adorar sólo a Cristo Hijo de Dios. Venerar: a nuestra Madre, la Santísima Virgen y los innumerables Santos que pueblan el Cielo.
4.- Los idolos de ellos son plata y oro, obra de manos de hombres
5.- Tienen boca, mas no hablan; tienen ojos, mas no ve;
6.- Orejas tienen, mas no oyen; Tienen narices, mas no huelen;
7.- Manos tienen, mas no palpan, tienen pies, mas no andan8.- Semejantes a ellos son los que los hacen , Y cualquiera que confia en ellos
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