Una familia de testigos de Jehová saca del hospital a su hijo, en peligro de muerte

Una familia británica de testigos de Jehová “secuestró” a su hijo de 5 años de un hospital británico en Portsmouth, sin el consentimiento de los médicos. El pequeño Ashya King estaba siendo tratado de un cáncer en el cerebro: no habla ni camina, debe ser medicado y corre peligro de muerte si no es tratado en un hospital. La familia desapareció junto a sus otros 6 hijos rumbo a Francia, en un ferry. La policía lanzó una búsqueda internacional para dar con su paradero, según explica María Laura Avignolo en el diario Clarín.

Una imagen de las cámaras del hospital muestra al niño en una silla de ruedas llevado por su padre, Brett King, a las dos de la tarde del pasado 28 de agosto. Inmediatamente después, la familia y sus seis hijos tomaron un ferry en un coche gris y se dirigieron a Cherbourg, en el norte de Francia, para eventualmente tratar de llegar a España.

La policía británica de Hampshire dijo que hay una seria amenaza porque el chico necesita constante atención medica, al estar siendo tratado con esteroides para que se desinflame el cerebro, después de la operación que le llevaron a cabo un mes atrás. Aparentemente sus esperanzas de vida son escasas.

“Asha está en una silla de ruedas y se alimenta por un tubo. El sistema de alimentación es operado por una batería y la batería se va a acabar hoy. Debe ser alimentado por ese tubo por alguien con entrenamiento médico. Si no recibe tratamiento urgente o se le da el tratamiento equivocado, su condición amenaza su vida”, anunció la policía británica, al lanzar la búsqueda, que está siendo promovida en las redes sociales. Pidieron a los usuarios de Twitter y Facebook encontrar a la familia y publicaron fotos de ellos y del automóvil gris que estaban usando: un Hyundai 1800 con la matrícula KP60HWK.

Los padres pertenecen a los testigos de Jehová, que no permiten transfusiones de sangre, basados en prohibiciones religiosas, pero que generalmente aceptan otros procedimientos médicos. Según la policía, la familia King llegó a Francia a las 8 de la mañana del día 28 y después se han perdido sus rastros. “Es nuestra esperanza que sus padres escuchen este llamado. Ellos reconocerán la gravedad de la situación y llevarán al nene al hospital. Pero nosotros vamos a seguir buscándolo hasta que los encontremos”, dijo la policía.

Por otra parte, los efectivos se preguntan por qué tardaron en el hospital en llamarlos ante la desaparición del chico, después de que su padre dijo a las enfermeras que iba a tomar un café. Aishya estuvo en el hospital recibiendo tratamiento por el tumor y la ultima operación se había producido 7 horas antes del “secuestro”.

La familia y su hermano Naveed King habían informado regularmente por Facebook sobre los progresos de su pequeño Ashya y subido varias fotos de él con sus padres. Incluso Naveed hizo un video, pidiendo que todos rezaran por él. “Nosotros queremos ver sonreír otra vez”, dijo en YouTube. En tanto, la compañía de ferry Brittany confirmó que la familia había viajado en uno de sus barcos y habían descrito al chico como “un niño con necesidades médicas especiales”.

Un portavoz de los testigos de Jehová confirmó que la familia pertenece a la secta. “No hay ninguna confirmación de que la decisión se adoptó por convicciones religiosas. Los testigos de Jehová son persuadidos de encontrar los mejores tratamientos para ellos y sus familias”, dijo.

La policía británica continúa trabajando en colaboración con los franceses. El padre de Ashya es director de una empresa inmobiliaria en el sector inmobiliario en Marbella. La policía presume que podrían estar viajando rumbo a España.

En Telecinco leemos que una amiga de la familia, Wisper Gwena, señala a Mail Online que “son gente muy cariñosa. Todo lo que sé es que si han hecho algo así será con buenas intenciones. Les conozco y no son esa clase de familia que quebrantan la ley o algo así”.

La familia puso mensajes en Facebook agradeciendo a la gente que rezara por su hijo y la atención que les prestaban ayudándoles en lo que podían. “Como familia agradecemos a todos los que han dedicado tiempo a rezar para que Ashya se recupere y también por los increíbles regalos que ha recibido de esas oraciones! Aún está lejos de ser un niño normal y todavía no está fuera de la zona de peligro donde las cosas de menor importancia pueden causar problemas graves para su cerebro, así que por favor, continúen rezando para que tenga la fuerza y el poder de recuperarse rápidamente!”.

En un mensaje anterior señalaban, también en Facebook: “Aunque podría no tener una larga esperanza de vida, rezamos para que se recupere pronto y disfrute de su preciosa vida. Siguen haciéndole tests para ver si hay algo que puedan hacer por él”.