No es una inocentada: Griñán hablando de mala gestión
Al presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, no se le ha ocurrido mejor cosa que trasladar al arzobispo de Sevilla su opinión sobre el nombramiento de Mons. Santiago Gómez Sierra como obispo auxiliar de la archidiócesis hispalense. Griñán imagina que habrán tenido en cuenta sus “méritos apostólicos o religiosos” y añade que “si para nombrarle obispo auxiliar se han tenido en cuenta sus méritos financieros, pues habrían hecho muy mal la elección".
Qué sagaz y agudo es el presidente andaluz. Su inteligencia le da para discernir que a la hora de elegir a un obispo se tiene en cuenta sus valores espirituales y no su capacidad para dirigir una caja de ahorros. Digo yo que tras semejante esfuerzo intelectual, Griñán se habrá tomado unas vacaciones.
Ahora bien, tiene su guasa que el presidente de una de las comunidades autónomas españolas con más indice de paro, pobreza y deuda critique a Gómez Sierra por su gestión financiera al frente de CajaSur. “Apártate que me tiznas", le dijo la sartén al cazo. Que un cura no sepa dirigir eficientemente una caja de ahorros entra dentro de lo previsibile, porque en el seminario no se enseña alta economía a los futuros sacerdotes. Lo grave es cuando el que no sabe gestionar la economía está al frente de un gobierno. Que es lo que le pasa a Griñán y a su “jefe” Zapatero.