Niños y pornografía: cosechamos lo que hemos sembrado
Esta sociedad corrupta en la que vivimos empieza a cosechar el fruto de su apostasía y su miseria moral. En este país hace 25-30 años era impensable que unos niños de 13 años se dedicaran a hacerse fotos o vídeos eróticos. Y mucho menos, que luego se difundieran. No solo por una cuestión de recursos técnicos sino porque los críos no vivían en un ambiente de depravación como el que sí existe ahora.
Hoy eso empieza a ser el pan nuestro de cada día. Como dice la noticia que tenemos en portada “…tal y como recuerda la Policía, ya son varios los casos ocurridos en el último año de fotografías y vídeos de carácter sexual protagonizados por jóvenes que luego se propagaban de forma muy rápida por venganza personal o para la vejación o el chantaje sexual del afectado“. La pregunta es qué narices hacen unos jóvenes tomándose esas fotos y esos vídeos.