25.05.11

Remedios para una sociedad adolescente

AdolescenteHe leído varias noticias que me han hecho pensar, al considerarlas en conjunto. Por un lado, el cura malagueño que ha sido reelegido después de cuatro años ejerciendo como alcalde. En segundo lugar, la peor suerte que ha sufrido el cura asturiano que dejó el sacerdocio para presentarse a las elecciones y apenas ha conseguido votos. En tercer lugar, el enésimo ataque al celibato sacerdotal y la petición de que los ex-curas casados puedan ejercer el sacerdocio. Después, el inminente referéndum para introducir el divorcio en Malta (uno de los tres países del mundo que aún no lo admiten). Finalmente, un ataque a las familias numerosas en una triste viñeta de Religión Digital.

A veces, las cosas que por separado no parecen tener sentido, unidas revelan algo importante. Como las piezas de un rompecabezas que, una por una, no dicen nada, pero bien colocadas unas con otras forman una imagen. ¿Qué tiene en común todo eso que he mencionado? A mi juicio, el horror por el compromiso permanente. La angustia por el hecho de que elegir algo significa renunciar a otras cosas. El deseo de que las acciones no tengan consecuencias y de poder hacer lo que a uno le dé la gana sin que nadie se atreva a decirle lo que tiene que hacer. Es decir, en una palabra: adolescencia.

Leer más... »

18.05.11

Las ecografías salvan vidas

Ecografía En los últimos meses, se ha dado un paso de gigante en los Estados Unidos en la lucha contra el aborto. Varios estados están preparando leyes que establezcan la obligación de realizar una ecografía antes de que una mujer se someta a un aborto.

Curiosamente, las organizaciones que defienden la “elección de la mujer” han puesto el grito en el cielo. Parecería que cualquier cosa que ayude a una mujer a decidir responsablemente, como el hecho de ver una ecografía del “grupo de células", debería contar con su aprobación, pero no es así. Quizá porque esa “elección” que promueven sólo es, en realidad, una: matar al bebé. Y por ello temen como al agua bendita que la madre pueda ver a su hijo y decidir no matarlo.

Es cierto que mostrar una ecografía apela a los sentimientos de la madre y no va a la cuestión racional. Es, sin embargo, algo necesario, porque la sociedad de hoy no se mueve por argumentos racionales, sino por sentimientos y emociones. De hecho, los argumentos racionales a favor del aborto son prácticamente inexistentes, de modo que sus defensores apelan en su inmensa mayoría a sentimientos irracionales, así que es bueno que haya una respuesta también en ese campo.

Traduzco un testimonio impactante de Kristen Walker, una antigua activista proabortista, que habla de cómo las ecografías cambiaron su vida. Lo he tomado de Live Action.

Leer más... »

17.05.11

Torrentes en el desierto y un Dios que no se deja domesticar

NeguevEl otro día, rezamos en la Liturgia de las Horas un salmo que dice “Que el Señor cambie nuestra suerte como los torrentes del Neguev” (Sal 126,4). En general, esta frase pasa desapercibida, como tantas otras, porque no conocemos Tierra Santa, ni el Antiguo Testamento. Además de que, como buenos habitantes de la ciudad, probablemente no sepamos ni lo que es un torrente.

Neguev significa “seco” o “árido”. Es un desierto, justo al sur de Jerusalén, que ocupa más de la mitad del territorio de Israel (de hecho, en la Biblia muchas veces se traduce simplemente como “Sur”). Si uno se coloca en un lugar alto al sur de Jerusalén, puede contemplarlo: una enorme extensión árida y seca. No es un desierto de arena, como los de las películas, sino un desierto de rocas y cauces secos hasta donde alcanza la vista, con unos cuantos matojos grisáceos y arbolillos retorcidos que acentúan aún más la sequedad de esa tierra. Sólo verlo de lejos, hace que uno, inconscientemente, eche mano a la botella de agua que lleva en la mochila.

No siempre es así, sin embargo. Tras el verano, cuando más seco está el desierto y más agrietada y sedienta está la tierra, cae la lluvia sobre las montañas y, de pronto, surgen los torrentes. Es decir, lo que eran cauces totalmente secos se llenan con riadas de agua de la noche a la mañana, que arrastran a su paso todo lo que encuentran, incluso inundando zonas muy amplias. Donde no había ni una gota de agua, de golpe pasa un río caudaloso y de aguas violentas y peligrosas, que hacen un ruido atronador. De hecho, no hace mucho murieron dos personas en una de estas riadas, ahogadas en el desierto. Gracias a esas aguas, en unos pocos días, el aspecto del Neguev se transforma, cubriéndose de flores.

Leer más... »

14.05.11

10.05.11

Para casarse con cuatrocientos años de retraso

Estos días, estoy ayudando con la edición de una tesis de Historia de la Iglesia que me está resultando particularmente interesante. Trata sobre el matrimonio en el Virreinato del Perú, en el siglo XVII. En aquella época, el matrimonio canónico presentaba ciertas dificultades para los indios conversos, debido a costumbres como la poligamia entre las clases más altas o algunos grados de incesto permitidos en la cultura incaica y a la posibilidad de que uno de los dos cónyuges se convirtiese y el otro no. Ante esta situación, es magnífico ver el enorme esfuerzo de evangelización que se hacía en todos los ámbitos en la América española.

Para que los indios tuvieran absolutamente claro lo que era el sacramento del matrimonio, los Concilios de Lima y los diversos manuales editados preveían no sólo una catequesis teórica, sino también una serie de preguntas concretísimas para asegurarse de que se entendían los requisitos y las consecuencias del matrimonio. Por ejemplo, se preguntaba a los novios sobre los grados de parentesco entre ellos, mencionando los diversos casos concretos de afinidad y consanguinidad, por las posibles uniones anteriores en todas sus modalidades, por los errores sobre el matrimonio más frecuentes en la cultura indígena, por los impedimentos, etc.Todo ello de la forma más concreta y clara posible, para que no hubiera lugar a error. Y, para evitar cualquier posible malentendido, se traducían las preguntas y catequesis al quechua (en algunos casos, con un gran esfuerzo, por la necesidad de traducir conceptos nuevos, que no existían en la cultura incaica).

Al leer estas cosas, me he quedado pensando en la situación actual en España. En los cursillos prematrimoniales que conozco, de primera mano o por conversaciones, se prescinde de la cuestión de lo que significa en realidad y de forma concreta casarse ante Dios. En el mejor de los casos, se habla en general sobre ello, pero sin explicar de forma concreta las consecuencias que tiene este acto y, sobre todo, sin señalar las diferencias con lo que promueve la cultura dominante. Lo más triste es que los asuntos omitidos son, normalmente, los que más necesidad tienen de clarificación y explicación. Sin duda, habrá parroquias ejemplares en las que esto no suceda, pero, desgraciadamente, todo apunta a que la situación es muy general.

Leer más... »