¿Alguien notó algo raro ayer en Misa?
¿Alguien notó algo distinto ayer en Misa? Yo no, la verdad. ¿Y los lectores? Lo pregunto porque, aparentemente, ayer era el día mundial del “¿Domingo sin mujeres?”.
Se trata de una iniciativa de Jennifer Sleeman, una antigua “conversa” irlandesa al catolicismo que tiene ahora ochenta y un años. Jennifer parece estar enfadada por el hecho de que las mujeres no puedan ser ordenadas como sacerdotisas. Ante esta situación, se le ocurrió pedir que las mujeres de todo el mundo enviaran un mensaje al Vaticano de que “las mujeres están cansadas de ser tratadas como miembros de segunda clase de la Iglesia”.
La cosa habría quedado ahí si no fuera porque una periodista norteamericana, Rose Marie Berger, editora de la revista Sojourners, decidió apoyar a Jennifer y promover una campaña por todo el mundo: “Mujeres del mundo, uníos. El día 26 de septiembre debemos boicotear la Misa y dedicarnos a rezar para que haya una mayor integración de las mujeres en la Iglesia Católica”. Otros periodistas de diversos países dieron cobertura a la iniciativa en distintas prensas nacionales.