La Virgen María y San José, con san Leandro
Meditamos hoy con tres textos de San Leandro tomados de su “Libro de la Educación de las vírgenes y del Desprecio del mundo".
«María, madre y cabeza de las vírgenes, intercederá ante su Hijo por tus merecimientos cuando ruegues con perseverancia por mí, me levantará en mis posibles caídas y me consolará cuando me halle abatido por mi conciencia culpable»
Somos invitados a confiar en la intercesión de María, y de un modo especial cuando oramos por los demás. San Leandro le pide a su hermana que pide para él esa ayuda de la Virgen. Como Madre nuestra será nuestro auxlio en las situaciones de pecado, será el consuelo en la mayor aflicción que es apartarse de la vida de gracia.
Por ello, no nos cansemos de invocar a Nuestra Señora, y de pedirle que interceda por todo el Pueblo de Dios.
«Pon tus ojos en la virginidad y pobreza de María, que fue tan rica ante el Señor que mereció ser madre de Él, y tan pobrecita en bienes que en su alumbramiento no tuvo la ayuda de una comadrona y tuvo que servirse de un pesebre como cuna»
María también es nuestro modelo en todas las virtudes. Si los santos, además de intercesores son ejemplo para nuestra vida cristiana, la primera entre todos los santos también será el primero de los ejemplos a contemplar.
San Leandro nos pide que prestemos atención a su virginidad y a su pobreza. No hay que entender la virginidad en un sentido negativo, como ausencia o renuncia simplemente, sino como riqueza ante Dios, porque se trata de un amor totalmente entregado al Señor. La Esclava del Señor se ha ofrecido de tal modo a su Creador que ha merecido ser la Llena de Gracia y concebir en su seno al Hijo de Dios; del mismo modo, quien entrega todo su amor a Dios, también es colmado por la fuerza del Espíritu Santo.
Y la pobreza en bienes es igualmente transfigurada en riqueza divina. La pobreza del pesebre es fuente abundante de los dones de Dios para María, para José, los pastores y los Magos, y para toda la Humanidad.
«También José era pobre a la vez que justo, de modo que debía ganar su alimento y vestido con su artesanía»
Y junto a María, encontramos a San José, patrono de la Iglesia, pobre y justo (es decir, santo). El trabajo de cada día es su artesanía, con el que realiza su misión de custodiar (es decir, de cuidar) a Jesús y a María.
Es toda una llamada a vivir nuestras ocupaciones diarias con espíritu cristiano. Que no nos dominen las motivaciones de ganar dinero o fama o lo que sea, sino el servicio a Dios, a la Virgen y a nuestro prójimo.
San Leandro, ruega por nosotros.
5 comentarios
Dios les bendiga.
Salve María.
conociendoseles, como los " Cuatro santos de Cartagena" , hermanos de Teodora de Cartagena, casada con Leovigildo, rey de los Visigodos, y, padres de san Hermenegildo "mártir", y, de Recaredo , rey de los Visigodos, quien , asumió la catolicidad a través de los cuales, Hispania se liberó de la herejía arriana, (negación de la divinidad de Jesucristo y por lo tanto de la Sma Trinidad, tan en boga hoy, por la cual multitudes reconocen a Jesús, solamente como un gran hombre, pero,niegan su divinidad, inclusive ,ex alumnado de colegios, instituciones y universidades católicas , debido a que mas de un catequista ha " ideologizado " la Fe, ) , y , nos libremos a tiempo de la obsesión de acumular, acaparar y amontonar a costa de lo que fuere( estafando, robando y trampeando) como, mas de unos , que se dicen cristianos, católicos y creyentes, quienes, han enfocado sus vidas de espaldas a Dios, transgrediendo, los principios, ética y moral de lo que implica un cristiano, católico y creyente, amén de haber desoído la invitación de Jesús:" Busquen primero el Reino de Dios y su justicia, y, todo lo demás , vendrá por añadidura",( Mateo 6:33) al contrario de Leandro y su Familia, que, contribuyeron con sus opciones de vida a difundir el mensaje del Evangelio.
El artículo anterior sobre Santa Benedicta de Cádiz (que desconocía completamente) me ha animado a saber más sobre las ermitas de los Santos Mártires de Medina Sidonia y de San Ambrosio de Barbate, centros de espiritualidad de la época visigoda gracias al obispo Pimenio. Una época histórica ignorada, de conmovedora brillantez antes de la inexplicable y desgraciada invasión musulmana de la misma zona 65 años después.
Es toda una aventura de investigación rastrear en la época visigoda, pues fue literalmente barrida por la invasión musulmana.
Gracias!!!
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