Desde el primer momento en que nuestro n.s.b.a. Cardenal Arzobispo hizo pública la decisión del nombramiento del jesuita Enric Puig (en la foto) como responsable de la Oficina Preparatoria de la Visita del Santo Padre a Barcelona, manifestamos no sólo nuestra perplejidad sino nuestro más rotundo rechazo. Sus conocimientos y contactos con los ambientes romanos que acabaron de modelar en él la astucia de sus gestos y el ambiguo eclecticismo de su toma de decisiones, podían presentarle como un válido diplomático apto para los necesarios encajes con la Santa Sede en la preparación de la visita del Papa. Nadie asumió la idea de que el nombramiento acabaría siendo como un poner a la zorra a guardar las gallinas. O sí. Porque su más que evidente falta de sintonía con las líneas maestras del pontificado de Benedicto XVI, su carácter falto de entusiasmo para cualquier acción evangelizadora que merezca la pena llamarse así, su falta de energía interior salvo para arrumbarse a las zonas de poder que perpetúen la influencia de la Compañía en Cataluña así como su profundo odio a los sectores tradicionales de la Iglesia comenzando en primer lugar por los nuevos movimientos de evangelización, constituían la garantía más segura del fracaso.
El boicot mal encubierto de los llamados “colegios religiosos” y el vacío organizativo de las parroquias progres, el fiasco de un voluntariado organizado mal y tarde, el déficit económico en la financiación del apartado que corresponde a la diócesis por falta de donaciones y donantes (que acabará siendo asumido por las ya exhaustas arcas diocesanas) y finalmente, dando la puntilla para el descabello, la más que sospechosa circular que con fecha 14 de octubre llega a todas las parroquias, entidades y movimientos que habiendo solicitado entradas para los asientos colocados en el exterior, sin que ello fuera requerido al inicio, ahora en el espacio de tres días deben enviar una apresurada pero pormenorizada relación con el nombre y apellidos de todas las personas para las cuales cada entidad pidió las entradas. Tres días (viernes, sábado y domingo) porque el lunes 18 de octubre es el último día . Increíble, vergonzoso, sospechoso. E inverosímil el argumento de “querer satisfacer el máximo número de peticiones y ajustar la disponibilidad de las plazas”.
¿Qué ha sucedido? A tres semanas de la visita, ¿no tienen capacidad económica de alquilar más sillas y más pantallas? Porque espacio no les falta. En los aledaños de la Sagrada Familia no es que no quepan 40.000 es que pueden caber 150.000. Lo que ocurre es que se han dado cuenta que son las parroquias germinantes, los movimientos de mayor vitalidad apostólica y las entidades de mayor fidelidad a la Iglesia y al Papa, de dentro y fuera de Cataluña, los que han asegurado su presencia. Y eso les inquieta por su profundo sectarismo. Y como no pueden solventar el problema presionando para que acudan todos los progrenacionalistas más corrosivamente críticos con la visita, organizan esta movida de criba mal disimulada. Los despistados se la cargaran. Y no les dolerán prendas para justificarse. Se entenderá “que renuncian a la petición hecha”. Todos. Los “benvolguts i benvolgudes”, los estimados y las estimadas, los apreciados y las apreciadas. Además de cínicos, cursis. Y el resto de jesuitas acogerá, a la misma hora, y en la iglesia del Colegio de la calle Caspe a los de Església Plural protestando por el nefasto ejercicio del papado. Nos apostamos un riñón. Dadlo por hecho.
Pero no se saldrán con la suya. No nos van amedrentar. Ya no somos tan meapilas como piensan. Hace tiempo que se nos ha caído el “borrisol del clatell” (la pelusa de la nuca). Con sillas o sin sillas, con espacio reservado o sin él. A pie o a caballo, con patinete o con silla de ruedas. O llevándonos las sillas plegables del camping. ¿Se pueden poner puertas al campo?
Estaremos en la Plaza de la Sagrada Familia y en la calle Marina y en la Avenida Gaudí, en la calle Provenza y llenando las calles Mallorca y Cerdeña. Que no lo duden ni un minuto. Además para que vayan sacándose de la cabeza cualquier intento de monopolizar los símbolos de nuestra catalanidad, el sábado por la noche cargaremos, y si podemos descargaremos, un “quatre de set” con un anxeneta desplegando una senyera bien grande pero sin estrella independentista a la llegada del Papa a la Plaza de Catedral.
No vayan a autosugestionarse pensando que no somos catalanes. Tienen todos los números del caballo perdedor. Que no les quepa ninguna duda. Reciban también ellos nuestra “cordial salutació”. Hipócritas y cursis.
MENSAJE RECIBIDO
A l’atenció de les entitats que han sol·licitat invitacions per assistir a l’acte de dedicació del Temple de la Sagrada Família de Barcelona
Benvolguts i benvolgudes,
Davant del nombre de peticions rebudes a l’oficina preparatòria de la visita de Sant Pare per assistir a l’acte de dedicació del Temple de la Sagrada Família de Barcelona des dels espais habilitats a l’exterior i per tal de poder satisfer el nombre màxim de demandes i ajustar la disponibilitat de places caldrà que ens remetin una relació numerada, amb el nom i cognoms de les persones per la qual aquesta entitat fa la sol·licitud, responent a aquest mateix correu electrònic . Cal indicar en primer lloc el nom de la persona responsable i de l’entitat, si és el cas. Posteriorment se’ls comunicarà la data en què podran passar-les a recollir.
En cas de no remetre aquesta llista abans del proper dia 18 d’octubre s’entendrà que renuncien a la petició feta.
Rebin una cordial salutació.
Oficina preparatòria de la visita de Sant Pare [email protected]
Prudentius de Bárcino