Lo Dan Brown lleidatà
Mi incesante curiosidad y una irreprimible voracidad lectora me han llevado a leer el libro El Complot, del periodista ilerdense Eugeni Casanova. El libro se anuncia como una completa y novedosa información sobre la segregación de la diócesis de Lérida y el litigio sobre las obras de arte. A quien haya seguido mínimamente la información durante estos años –de por sí, ya copiosa- el libro no le va a aportar mucha novedad. Quizás, para destacar algo, las declaraciones que se ponen en boca de “Il Maestro”, el catalán Valentí Miserachs Grau, Director del Pontificio Istituto di Musica Sacra que, de ser ciertas, nos lo presentan como un inútil abanderado de la causa catalana. Inútil, por cuanto sus lamentos y quejas de la anticatalanidad de la curia romana, jamás son considerados. Parece evidente que la labor de “Il Maestro catalano” fuera del canto gregoriano, no goza de ninguna eficacia. Aparte de ello, el aspecto que mayor curiosidad me ha atraído del libro del periodista Casanova- por cierto, muy pobremente editado- es la sucesión que nos presenta de anticatalanes.