¡Bien Venido, Santo Padre!
Benedictus qui venit in nómine Dómini. Bendito Benedicto, que viene en nombre del Señor. Así es. Benedicto XVI, un papa que se distingue por su admirable capacidad de poner en valor la doctrina de la Iglesia y con ella la moral, es una bendición para la diócesis de Barcelona, el mayor foco de neopaganismo de España.
Si alguien piensa que el Papa viene a hacerle el “ rendez vous” a alguien, y que le mueven consideraciones de tipo táctico para venir a Barcelona, que se lo quite de la cabeza. Por supuesto que la oficina diplomática y los servicios de protocolo arreglarán las cosas de tal modo que nadie tenga motivos de queja por la visita del Papa. Pero quítenselo de la cabeza: el Santo Padre no viene a visitar a nadie, viene a predicar. Cuando en vez de recibir en audiencia a los responsables de una demarcación eclesiástica se desplaza él mismo a esa demarcación, no va de visita, va de apostolado.