Antoni Matabosch: “En Cataluña, la Iglesia será catalana o no será”
Con estas palabras concluía su discurso el Rvdo. Antoni Matabosch, entre otros muchos cargos Presidente de la Fundación Joan Maragall, al recibir el XXXIII Premio de Honor Lluís Carulla otorgado a la Fundación que él preside. Estas palabras sin duda están sacadas de la gran frase que en otro tiempo pronunciara el que fuera obispo de Vic, Don Josep Torras i Bages: “Cataluña será cristiana o no será”. Pero como pueden comprobar el cambio es significativo, para el obispo, Cataluña no tiene sentido si pierde su identidad cristiana, para el “amiguet” (amiguito) de n.s.b.a. cardenal Martínez Sistach, es la Iglesia en Cataluña quien pierde su sentido si no es “nacional”.
Porque esa es la palabra clave repetida continuamente a lo largo del discurso del Rvdo. Matabosch: “nación”, “iglesia nacional”, realidad nacional”… siempre referidas a Cataluña. No es de extrañar esas referencias teniendo en cuenta a quien se entrega el citado premio y que cito de forma literal: “El Premio se concede a personas o entidades que, con la calidad de su actividad científica, cultural o cívica, han ayudado a fortalecer la conciencia de comunidad nacional (catalana) y el sentido de pertenencia a la cultura de los países de habla catalana”
El propio Rvdo. Matabosch se reafirmó en ese principio, al considerarse merecedor del mismo diciendo: “Es cierto que la Fundación Joan Maragall tiene el objetivo de servir a nuestra comunidad nacional”. Pues ya sabemos perfectamente para que sirve esta fundación que creó hace unos veinte años S.E.R. el cardenal Narcís Jubany Arnau (R.I.P.) y que puso en manos del Rvdo. Matabosch desde un principio y hasta el día de hoy. Como tantas instituciones creadas por la Iglesia en Cataluña sólo sirven para cobijar a los miembros del progresismo-nacionalista, (como la larga lista que hace unos días nos detallaba y clasificaba Quinto Sertorius Crescens), y para promover ese diálogo político (que no religioso) entre una parte de la Iglesia catalana y el nacionalismo socialista y convergente.
Pero tampoco tiene desperdicio las alusiones al tipo de Iglesia en la que cree el Dr. Matabosch, porqué se ve obligado a marcar distancias con el catolicismo español que encarna S.E.R. el cardenal Antonio María Rouco, e incluso de la Iglesia romana de Benedicto XVI y Juan Pablo II. Porque como ya dijo hace unos días el expresidente Pujol, este tipo de personajes se consideran “el ejercito derrotado de Montini”. Algo que venden con el bonito y manipulado logotipo de “fieles al Concilio Vaticano II”, como dice el mismo Matabosch cuando afirma que forman parte “de una Iglesia Católica catalana arraigada sólidamente en dos pilares que han forjado su identidad: la doctrina del Concilio Vaticano II y la vinculación a nuestra realidad nacional catalana”.
Sólo se cita a Juan Pablo II, para recoger fragmentos que hagan referencia a nación y nacionalismo, aplicándolos a la realidad catalana, lo que me parece una clara manipulación, algo que ya estamos acostumbrados con los documentos de otro satélite nacionalista eclesial como es la Federació de Cristians de Catalunya, con los Rvdos. Oriol Tataret y Joan Costa a la cabeza.
La Iglesia del Dr. Matabosch y de sus compinches de Fundación (llena de políticos convergentes y socialistas: “Pipo” Carbonell, Joan Rigol, Pla i Arxé…) es según palabras de su presidente una Iglesia “que ama y libera, no la que condena; la que ilumina las conciencias no la que las secuestra; la que hace presente el amor de Dios, entre los hombres, sin difamar, ni odiar a los que no son como nosotros”. Sólo le faltaba hacer referencia a Germinans, pero después de la experiencia del Abad de Montserrat en Gracia, ha preferido sólo citarnos indirectamente.
Antoninus Pius