Vacaciones de invierno
Me gusta pasear abrigado en invierno. Siempre me ha resultado agradable meter las manos en los bolsillos, cruzarme una bufanda por el cuello, y caminar despacio mientras mi aliento se transforma por un instante en ese humillo que se desvanece tan rápidamente.
Confieso que los paseos fríos llegan a su máxima expresión bajo el ambiente de las luces navideñas. La verdad es que no me desagrada que las pongan en noviembre con fines comerciales, ni me importa demasiado que sean un derroche de formas abstractas que olvidan el verdadero sentido de la Navidad. Quizás sea porque son fechas para dejar a un lado mi espíritu crítico, o quizás simplemente porque irradian esa luz hogareña tan hipnotizante, que crea un ambiente tenue como la tulipa del salón, y que te invita a pararte a pensar en los detalles y en las pequeñas cosas que cada día pasamos por alto.
Si aún en octubre ya estoy pensando en la Navidad, es porque el otro día, en uno de los paseos fríos que ya nos adelanta el otoño, le contaba a un amigo mi hipnotizada transigencia con ciertos aspectos “paganizantes” de esas fechas. Pero mi amigo -que me conoce bien y quería despertarme- sacó el tema del Consejero de Educación Catalán, que va a aprobar sustituir el nombre de las vacaciones navideñas por “vacaciones de invierno”, y la Semana Santa por “vacaciones de primavera”. ¡Y no solo consiguió despertarme! hasta tuve que buscar el banco más cercano para sentarme y sentir sobre las sienes el peso de la imbecilidad del mundo que nos rodea.
Nos hemos olvidado de que la Tradición Católica no es un mero componente histórico presente en nuestra cultura, sino que Tradición Católica es la propia semilla y el fundamento de nuestra cultura y de nuestra sociedad. En el momento en el que olvidamos que hemos crecido sobre la cristiandad, y la rebajamos a un “componente histórico a tener en cuenta” para relegar la fe al ámbito puramente privado, estamos dando pie a que imbéciles como el Consejero de Educación Catalán hagan este tipo de propuestas.
Parece que ya vemos las consecuencias del segundo estadio de las tesis gramscianas. Primero relegar la fe y la religión a una dimensión menor, accesoria, pretexto de otras luchas y reducida progresivamente, para luego suprimir todo vestigio de ésta e imponer una “conciencia política” que no contemple nada de lo trascendental.
Cualquier día nos levantaremos en el 18 Brumario de la era 70 después de la fundación de la ONU. Y no sé si para entonces los católicos ya habremos despertado.
Javier Tebas
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10 comentarios
envían felicitaciones por las fechas de Navidad deseando "GREATINGS" y CONGRATULATIONS" por todo lo imaginable.Y,evidentemente ,por el comienzo de la estación invernal...El color masónico al asunto se ve desde lejos...
Ya no se acuerdan los de la Memoria "histérica" que el "ínclito" e inolvidable Alfonso Guerra-sí,el del "tó pa'l pueblo"-pero el pueblo era su hermano
Juan,el de los "cafelitos"...-quiso eliminar la Semana Santa de Sevilla y el éxito de su propuesta fue tan extraordinario que aún se comenta...Estos "rojeras" cuando llegan al poder creen que sus "ocurrencias" son genialidades y se olvidan que el Mediterráneo hace tiempo que está ahí esperando el naufragio de su próxima "idea"...
Y también el 90% de las fiestas locales. Todos a trabajar ¿A que ya seríamos más laicos?
Bueno también podemos defender las auténticas tradiciones y el 25 de Diciembre celebrar el nacimiento de Mitra o el solsticio de invierno.
No me extraña que os guste tan poco la SGAE, tendríais que pagar unos cuantos copyrights por plagiar fiestas y lugares sagrados, como las capillitas de San Nicolás donde rezan los pescadores de todos los pueblecillos marineros de Grecia, que se hicieron sobre templetes dedicados a Poseidón.
En fin, que los católicos os creeis que inventasteis la civilización, con sus vacaciones y todo. Seguro que para algunos el mundo no tiene más de 2.000 años.
Pues hay cosas anteriores al cristianismo que están muy bien, como ese invento pagano llamado "democracia".
Ahora bien, me corresponderían esas vacaciones en otras fechas, fijadas por el Estado o por mí.
De hecho le doy la vuelta a la pregunta, si el Estado permitiera elegir TODOS los días no festivos, ¿de verdad crees que nadie trabajaria el 25 o en semana santa? ¿pudiendo irse de vacaciones la semana siguiente, más barato y con menos gente? de verdad, vivís en vuestro mundo retroalimentado y no escucháis más que vuestros propios argumentos...
LO QUE HAY QUE OIR
para empezar, por si no lo sabes, no se conoce la fecha en que nació ni murió Cristo, son fechas estimadas, y se escogió el 25 de diciembre por coincidir la antigua fiesta celta del equinocio de invierno. Si en la asignatura de Religión enseñaran esas cosas, aún habría menos gente los domingos en misa...
Y respecto a los nombres, vería razonable que lo votara cada localidad, que para eso estamos en democracia, aunque os pese...
También le cambiaron el nombre a la Castellana. Seguro que algunos preferiríais que siguiera siendo la Avenida del Generalísimo.
PD meterse con ZP es un argumento de taaaanto peso...
Llama la atención que algunois que denostan los dogmas de la Iglesia o la Tradición Católica,cada vez que citan a la Constitución Española -de apenas 30 años de "antigüedad" y culpable de casi todos los males que sufre España en la actualidad-lo hacen con una "unción" y una "veneración" digna de mejor causa.
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