Un post para el Doctor Who
Este post está dedicado al Doctor Who (a modo de ejemplo de trolls similares), bajo sospecha de ser el enviado de Rubalkeitor, el temible esprinter cojo al que ya no quiere ni el ministro de bombilla-tanga-consejo, para, si fuera posible tal cosa, confundir a los lectores de Infocatólica.
Lo ilustraremos mediante una conversación realizada a petición de la multinacional Infocatólica, la cual encargó a un comentarista habitual a probar las características de un comentarista aspirante a provocar turbulencias en el ciberespacio de la multinacional.
Llega pues el Doctor Who a la entrevista con un comentarista habitual, encargado del Depto. de Recursos Humanos. Ahí le espera el comentarista habitual, que le indica que va a comenzar por hacerle algunas preguntas para evaluar sus conocimientos.
El Doctor Who dice:
- ¡Por supuesto, jolines, pregúnteme!
El comentarista habitual comienza:
- Explíqueme brevemente que son los rayos catódicos.
El Doctor Who piensa por unos segundos y contesta:
- Los rayos catódicos son Isabel y Fernando.
El comentarista habitual queda estupefacto y le pregunta:
- Entonces, si Isabel y Fernando son los “rayos catódicos", ¿quiénes son los Reyes Católicos?
El Doctor Who contesta rápidamente:
- Pues Melchor, Gaspar y Baltasar.
- Ah!!!
El comentarista habitual no podía contenerse ya, pero para rematar le hace una última pregunta (y es allí dónde falla amigos míos, allí, allí):
-Y si Melchor, Gaspar y Baltasar son los “Reyes Católicos", quiénes son los Reyes Magos?
El Doctor Who, un poco extrañado por la pregunta le dice:
- En serio, ¿no sabe quiénes son los Reyes Magos?
El comentarista niega con la cabeza. Entonces el Doctor Who se le acerca y le dice al oído en voz baja:
–Los Reyes Magos son los papás…
…
¿Ves, comentarista insensato, a qué situación te expones? Pues apáñate tú mismo luego si te pica. Y eso porque no quieres seguir el consejo de cómo actuar que está bien clarito: las cosas claras, técnica probada y punto. Mira, otra vez tenemos que utilizar la analogía con el boxeo, pero esta vez de los que comienzan, que es más ilustrativo para la ocasión.
Se desquita la defensa y luego se procede con la contundencia de la verdad,… y a cerrarle la boca y a meditar.
A veces, no se sabe exactamente lo que quieren, lo mejor es como nos indica sabiamente Ricardo de Argentina, dejarle que se canse y luego a luego se golpee a sí mismo. Recomiendo para la ilustración el siguiente vídeo, especialmente a partir del minuto cinco.
Porque si no, si a nuestro pilar Catholicus le tocas las narices, se enfada de esta manera, y tampoco es el plan.
P.D. Ricardo, creo que te he entendido.