Otro éxito del régimen andaluz.


Existe una creencia común – y falsa – que mezcla el derecho a la educación con el derecho a tener un título universitario. La razón siente asco ante esta creencia, tan aplicada en el ámbito educativo por lo demagógico, como contraria en otros ámbitos de la vida.

Por ejemplo, nadie sería capaz de defender que un ciudadano que corre los cien metros lisos en dos minutos, tenga derecho a participar en unos juegos olímpicos. El derecho a participar en los mismos depende de la capacitación del individuo para superar convenientemente las pruebas.

Esto que es tan claro en el mundo del deporte, en el ámbito intelectual se retuerce y se convierte su contrario en una idea evidente y ¡pobre de aquél que contraríe el pensamiento políticamente correcto!.

Que toda persona tenga derecho a recibir una educación, a ser alfabetizada, a poseer una cultura, no implica que tenga derecho a un título universitario, sin embargo, en España, parece que el no poseer una graduación académica lleve aparejado una connotación de disminuido psíquico. Seguro que cualquiera de nosotros conoce a alguien que es un buen trabajador sin tener una carrera universitaria. O cuántos FPes hay en España que son unos buenísimos profesionales. Sin embargo, se sigue pensando que si no tienes el bachiller o una carrera eres un donnadie. Pruritos de grandeza.

Nadie es inferior por no poseer una carrera, igual que nadie es inferior por no jugar en la Primera División del fútbol español.

Los políticos, sabedores que alimentar los sentimientos más viscerales de la población incrementan demagógicamente su bolsa de votos, crean leyes injustas con el único objeto de perpetuarse en el poder. No se mueven por el bien común.

Por esta razón, disminuyen continuamente el nivel de los estudios para que así haya más personas que accedan al mismo, produciendo a su vez una devaluación de dichos títulos.

El PSOE por acción y el PP, por omisión, son culpables de haber castrado intelectualmente a más de una generación gracias a la LOGSE. Y el daño pudiera ser irreversible.

Teniendo en cuenta lo anterior, la Junta de Andalucía nos presenta un nuevo éxito de la Tercera Modernización – pero, ¿se ha acabado la segunda? -: flexibilizar el pase de curso de Bachillerato, esto es, ponerlo aún más fácil.

¿Cuál es el objeto de esta medida? Yo pienso que dos. El primero, retrasar el tiempo de incorporación de los jóvenes al mercado laboral, con lo que no entrarán dentro de las estadísticas –estadísticas a las que, por otra parte, se les modifican los criterios de manera que siempre sean favorables al partido en el gobierno -; el segundo, aumentar la tasa de titulados.

Andalucía será la región con el mayor número de bachilleres analfabetos sin ningún género de dudas.

3 comentarios

  
ciudadano
Desde luego no queda más remedio que estar de acuerdo con Vd. en principio, tal vez lo que algunos grupos no quieren ver es precisamente esa diferencia que existen entre quienes tienen capacidades diferentes, sea para el deporte, sea para el estudio.

No obstante, en la popularización de la universidad tambien hay algo bueno, tal vez el nivel medio puede haber bajado, sin embargo, a cambio personas que en otra época no se hubieran podido permitir conseguir un título universitario ahora si lo pueden conseguir.

Cuando yo era niño, incluso adolescente, el ir a la universidad estaba reservado para los hijos de las llamadas "familias bien", por lo visto los pobres eramos "familias mal". Pues bien en la actualidad chicos y chicas de familias de obreros tienen la posibilidad de acceder a estos estudios, con un gran beneficio para el pais, pues todos conocemos estudiantes de familias modestas con expedientes extraordinarios.

Por tanto no todo es bueno, ni todo es malo. ¿como encontrar el término medio?. Por supuesto estaría con Vd. en que los estudios primarios y medios deberían ser mas exigentes, que los planes de estudios deberian estar pensados para niveles intelectuales medios, pero tambien sería necesario el mejorar los niveles pedagógicos de una gran cantidad de docentes, que lo son con poca preparación y con menos vocación.
Por supuesto estoy y creo que otras muchas personas por un sistema educativo, que en principio fuera eso educativo, que pudiera servir a cada cual según sus capacidades, y un ambiente social en el que el no ser titulado universitario no sea un lastre.
Porque como Vd. dice hay grandes profesionales que no necesitan un título universitario para hacer un gran trabajo.
24/07/08 5:18 PM
  
Isaac García Expósito
Ciudadano: lo que es injusto es que alguien con capacidad se quede fuera por no tener dinero.

Habría que disponer de un sistema de becas generoso, que no fuese una ayuda sino un sueldo que permitiese al estudiante no pensar en otra cosa nada más que en estudiar.

Nuestro sistema de becas es un auténtico timo, un engañabobos que no sirve para nada.
24/07/08 5:56 PM
  
ciudadano
Es obvio que tiene Vd. razón, en mi caso es irrebatible cuando hemos sufrido esa injusticia en uno de nuestros hijos.

Pero hay algo que, digamos que temo más y es la posbilidad de que los estudios superiores, de una manera u otra lleguen a ser para los hijos del régimen, ya pasó en España, en Rusia, ocurre en Cuba, etc.

Pidamos al Señor que aquí no llegue a ocurrir de nuevo.
24/07/08 6:21 PM

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