Hermandades contra el aborto
Y dirán que la mano del Coadjutor no se nota, pero lo cierto y verdad es que algo ha cambiado: esta noticia es una muestra de ello. Las cofradías por fin toman el lugar que les corresponden, el que tenían antaño y que hasta el día de hoy habían abandonado en manos de una vulgarización permitida desde ciertos lugares no muy lejanos a la calle San Gregorio, donde tiene su sede el Consejo de Cofradías.
La coherencia de vida es una exigencia de la fe, si se vive de forma distinta a la que se cree, se acaba creyendo como se vive. Las Hermandades tienen la exigencia de ser fermento en esta sociedad tan alejada de Dios. No era lógico que la única preocupación de las cofradías fuese el tiempo de paso por la carrera oficial, o los estrenos anuales.
El Hermano Mayor del Santo Entierro símplemente ha pedido coherencia al resto de hermanos, expresándolo con una claridad meridiana:
el Consejo o el Pleno de Hermanos Mayores deben posicionarse de manera contundente. Es fundamental que el Pleno haga un manifiesto o declaración de intenciones. Somos cristianos y no podemos quedarnos de brazos cruzados. Si no hacemos esto, es que somos unos cobardes
El aborto es un atentado contra la vida, que sólo a Dios pertenece. Las Hermandades como asociaciones que son de la Iglesia Católica, antiquísimas y de larga vida continuada, tienen que hacerse oir, salir del letargo en el que se encontraban.
Parece que han encontrado el camino. Justo con la llegada del Obispo coadjutor.
Laus tibi Dómine, Rex aetérnae glóriae
7 comentarios
Los comentarios están cerrados para esta publicación.