De Miss Monja a los franciscanos. Ésto es una conspiración
Terminé mi post anterior postulando la imposibilidad metafísica de que cupiese algún tonto más, pero compruebo con estupor que he errado gravemente. En mi descargo tengo que decir que no lo hice a sabiendas, lo que disminuye la gravedad del error.
Eso sí, que sea leve no implica que no pida perdón a mis lectores, así que, contrito´, triste y dolorido ruego me disculpen.
¿A qué viene todo esto? Muy sencillo. En el blog Secretum meum mihi (cuya lectura recomiendo), he encontrado el siguiente video.
No sé lo que pensarán ustedes, yo, personalmente, prefiero no saber.
Así está la cosa.
12 comentarios
En caso de que haya realidad detrás de
tales penosas escenas, cantos monótonos
y reiterativos hasta el cansancio, es señal de la poca inspiración, que surge de la propia fe, dado que se va en busca de imitaciones grotescas de festivales rockeros.
No alcanza con poner letras devotas ("Celebriamo il Dio d' amor"), para dar el toque religioso a cadencias y canciones más para "San Remo" que para un convento de religiosas.
Cuando llegue el Hijo del propietario veremos qué hace con ese árbol tan frondoso y bonito que produce semejantes frutos.
Mientras tanto, c'mon, babe... let's dance!
Saludetes.
NO me extraña que la gente que se quiera meter monja se plantee la clausura , la orden de la M. Teresa y vocaciones exigentes. Para hacer esto, lo haces muchiiiiisimo mejor en una disco.
Un alumno mío me comentó en clase que salió de un cole religioso con 16 años y que apenas le habian hablado de religión: ojo al dato. ¿Serían las suyas unas monjas bailarinas?
Dios nos pille confesados
Si de verdad son franciscanos es "pa" morirse del berrinche, antes los religiosos dedicaban el tiempo a orar, estudiar, obras de misericordia, leer, cultivar el huerto... Sí, cantar también, pero en fin no haciendo el ridículo. ¿Y los superiores? a lo peor son los coreógrafos.
Isaac, he hablado un par de veces, con la persona que se encarga del regreso a la norma, y podéis estar tranquilos que aun quedan consagrados de verdad.
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