Pío XII y la IIGM

Se fecha en el 20 de febrero de 1963 como el inico de una leyenda negra sobre Pío XII. Dicho día se estrena en Berlín una obra sobre su figura y se le presenta como cobarde ante el nazismo y como cómplice antijudío. Esta obra, cuyo autor es un joven protestante alemán, no se basa en documentación histórica y como con tantas otras mentiras exitosas, poco importa ese detalle para mucha gente.
Se publica ahora en español un texto que se centra en la historia de Pío XII durante los turbulentos años del nazismo. Su labor en Berlín como nuncio y su labor como Secretario de Estado de Pío XI y más tarde como Pontífice. Escrito como una narración, con diálogos y con ciertos subjetivismos, lo que se gana en agilidad y facilidad de lectura se pierde en objetividad. El autor en la parte final justifica muchas de las situaciones que narra con las fuentes utilizadas, pero algunas licencias exigen citas concretas, como por ejemplo, cuando sostiene que monseñor Canali (cardenal y Penitenciario Mayor, y que fuera mano derecha del cardenal Merry del Val tan español como inglés) veía con malos ojos la actividad vaticana para salvar a tantos de las manos de los nazis.
Es un libro que exculpa claramente a Pío XII de un sambenito injusto, da abundantes pruebas de ello, y considero que sólo quien disponga de un sectarismo a prueba de datos podrá sostener postura tan injusta una vez leído el libro. Queda claramente demostrado que tanto Hitler como los nazis detestaban a Pío XII (y en general a la Iglesia católica) y que el encono que era mutuo podría considerarse que llegó a ser incluso al plano personal.
DAL BELLO, Mario
“El secuestro de Pío XII. La conspiración de Hitler”
Ciudad Nueva, 2015



Siempre es un placer leer a Chesterton. Un hombre muy inteligente, que sabía reírse de lo importante (de sí mismo, lo primero), que analizaba con perspicacia y que aportó ideas para solucionar los problemas que encontraba. Es uno de los padres del distributismo, interesante idea con la que no comulgo, y que le ha granjeado un creciente número de fans en el catolicismo español. Pero por encima de todo es un narrador extraordinario. “Innecesario hablar de la magia y del brillo de Chesterton. Yo quiero ponderar otras virtudes del famoso escritor: su admirable modestia y su cortesía” así se refería Borges en una reseña de la obra “autobiografía” de Chesterton.