Uno de los dos argentinos que no murieron mártires

Claretianos de Barbastro

Hace un par de semanas, escribí, en este blog, un artículo titulado “Creo porque he estado en Barbastro“.

En ese artículo hablaba de los claretianos que murieron como mártires en esa ciudad en 1936. Su historia es verdaderamente asombrosa y parece una página arrancada de las actas de los mártires romanos de los primeros siglos.

Los que hayan leído el artículo recordarán que los 59 seminaristas y superiores del seminario claretiano de Barbastro fueron martirizados por no renegar de su fe, con la excepción de dos jóvenes seminaristas que, al ser de nacionalidad argentina, fueron liberados.

Lo cierto es que lo normal es que uno se fije en los mártires, en su sacrificio y en su perdón a los perseguidores, pero también la historia de aquellos dos seminaristas argentinos llama la atención. ¿Qué sentirían al verse separados de sus compañeros que iban hacia la muerte? ¿El lógico alivio o el dolor de tener que abandonar a sus hermanos en el momento más difícil? ¿Por qué Dios decidió pedir a unos que murieran como mártires y a otros no, a pesar de que su situación era prácticamente la misma? ¿Cómo sería luego la vida de aquellos que “casi” fueron mártires? ¿Perseverarían hasta su muerte natural en la fe por la que habían estado a punto de dar la vida? ¿Quedaría en ellos rencor hacia los españoles que mataron a todos sus compañeros?

Normalmente, no podríamos encontrar respuesta a estas preguntas. Sin embargo, como un fruto de las magníficas posibilidades que tiene Internet, he recibido encantado el comentario de un lector que conoció personalmente a uno de aquellos dos seminaristas.

Tan sólo son unas pocas líneas, pero para mí han tenido la virtud de convertir en algo concreto a uno de los dos participantes en este terrible drama. De ser un personaje anónimo de un relato, ha pasado a ser el Padre Ramón Sarmiento, a quien conoció uno de los comentaristas de este blog.

Yo traté mucho al Padre Ramón Sarmiento, claretiano, que fue uno de esos dos seminaristas argentinos que se “salvaron” del martirio por su nacionalidad.

Hasta su muerte, hace solo unos meses, el buen padre lloraba cada vez que contaba sus experiencias de aquellos tremendos días. El hubiera querido quedarse con sus compañeros. Les gritaba a los soldados -que no milicianos- que se los llevaban al refugio del consulado argentino en Barcelona: “Matadme a mi también, matadme y dejarme ir al cielo con ellos".

Siempre tuvo en su celda de religioso una gran bandera española que le regalo Moscardo, y con ella se hizo enterrar.

Estoy convencido de que Dios oyó el grito de aquel seminarista que quería ir al cielo con sus compañeros y, unos cuantos años después, pues para él mil años son como un día, le habrá concedido lo que pedía.

9 comentarios

  
Francisco José Fernández de la Cigoña
Gracias por el hermoso testimonio.
12/08/07 11:43 AM
  
Tovical
Testimonio de uno, ya fallecido, que tuvo que salirse del Cuerpo de la Guardia Civil: ?Actuábamos en la represión y captura de los grupos de maquis en la posguerra por los montes del noreste de España. Una noche nos cobijamos en una masía abandonada y hablamos y descansamos. Pocos días después atrapamos a una partida de aquellos y se nos encargó acompañarlos esposados hasta el Penal de S. Miguel de los Reyes, Valencia, donde serían juzgados y condenados a muerte. Por el camino en el camión, uno de los maquis nos dijo a los guardias: Tal noche en tal sitio, mientras descansaban y charlaban de esto y lo otro y se movian así y así por la casa, los teníamos encañonados y no quisimos hacerles daño, si Vds. no atacaban. Podríamos habérnoslos cargado a todos, pero Vds. sólo eran mandados y no era actitud nuestra ser asesinos. Ahora Vds. son condición para que nos maten por rebeldes. Pregúntenles a su conciencia si la tienen tranquila por lo que hacen."- El testigo abandonó deprimido el Cue...
12/08/07 4:03 PM
  
Tovical
(2)."- El testigo abandonó deprimido el Cuerpo y así vivió hasta su muerte. Por otras partes, antes y después, pasaron cosas semejantes a quienes no les abrirá la Iglesia proceso de beatificación, canonización o martirio. Pero ahí queda Mt. XXV.
12/08/07 4:04 PM
  
Bruno
Tovical:

Como cristiano, siempre me alegro de que haya personas que busquen vivir moralmente y de acuerdo con su conciencia, tengan las opiniones políticas e incluso religiosas que tengan y, si es de manera heroica, mucho mejor. Sin duda Dios lo tendrá en cuenta.

Otra cosa distinta es la declaración como mártires por parte de la Iglesia. Desde San Esteban, las condiciones para ser mártir han sido morir por odio a la fe y morir perdonando a los asesinos.

Creo que es evidente que estas condiciones se pueden aplicar a los seminaristas de Barbastro, pero no a las personas que cita usted.

Dicho eso, estoy convencido de que, por los méritos de Cristo, estarán en el cielo con los mártires muchísimas personas de buena voluntad que, sin culpa suya, nunca han conocido al verdadero Jesucristo.

Un saludo.
14/08/07 3:50 PM
  
Melo
Me alegra haber contribuido en algo. Un saludo afectuoso en JM.
14/08/07 7:31 PM
  
Bruno
Melo:

Muchas gracias otra vez.
14/08/07 9:52 PM
  
Melo
Y creo que el otro se llamaba Parisini.
14/08/07 10:47 PM
  
Tovical
Y al "Mártir de los mártires" lo mataron por blasfemo y sedicioso según los que se constituyeron en sus jueces. Nada contra los que murieron testigos de su fe, pero para la Iglesia debería significar mucho siempre y en esta hora lo que Jesús entiende por Fe en Él y fidelidad a su "Causa". y atenerse a lo que proclama como Palabra de Dios en Mt.XXV. Porque no es coherencia en su mensaje y práctica la ?acepción de personas?. Pio XII, Juan XXIII y Pablo VI. también eran sucesores de Pedro y entendierón y actuaron sobre este asunto de otro modo, tal vez, no porque dudasen del martirio de unos, sino por tener como cierto el martirio de quienes murieron por defender el pan de sus hijos que, sin saberlo explicitamente ellos, eran el mismo Jesús quien consideraba ?CONMIGO hacéis lo que con ellos.?
14/08/07 11:52 PM
  
J
Gracias por este recuerdo de los claretianos argentinos que se libraron de la matanza de Barbastro. Me has puesto sobre la pista, porque tengo una imagen suya (en un calendario de este año, editado por claretianos). Saludos, excelentísimo blog.
25/08/07 7:41 PM

Los comentarios están cerrados para esta publicación.