¿De verdad evangeliza alguien a través de Internet?
En el artículo anterior, hablábamos de Internet como un nuevo camino de evangelización, según ha dicho Benedicto XVI a los jóvenes. Una lectora, Yolanda, planteó una interesante cuestión:
Las calzadas romanas sirvieron a la evangelización de cristianos entusiastas que difundían el Evangelio de Mateo, Marcos, Lucas, Juan y otros mensajes cercanos a la palabra de Jesús. No parece que hoy, Internet se use para ese mismo fin ni de ese mismo modo cuando de evangelizar se trata, o se dice que se trata. Desde que en el verano de 2007 empecé a conocer estos mundos de la blogosfera religiosa, no he conocido nada que realmente evangelice.
Me refiero, Cristian, a atraer a la Iglesia a los alejados o a quienes la desconocen. Hablar para convencidos puede ser entretenido, hasta edificante, pero no evangeliza.
El tema que plantea Yolanda es muy interesante. Creo que, si queremos hablar de evangelización, es bueno que nos planteemos esas cuestiones. Es cierto que una gran parte de los lectores de los blogs de temas religiosos son personas que ya creen en Dios. También es verdad que, a menudo, nos enfrascamos en discusiones de temas que, en principio, no están directamente relacionados con la evangelización. Otro comentarista, Óscar, ponía incluso en duda la misma posibilidad de evangelizar a través de la red.
Empezaré diciendo que parto del hecho de que es posible evangelizar por Internet. De hecho, el Papa acaba de animar a los jóvenes cristianos a que lo hagan. Estoy convencido de que este nuevo método de comunicación es una herramienta valiosa al servicio de la evangelización, aunque, por supuesto, no pase de ser eso mismo, una herramienta. No es mi intención, ni mucho menos, zanjar este tema, así que sólo voy a dar unas pinceladas sobre este asunto, ofreciendo, como ha hecho Yolanda, mi propia experiencia.
En mi opinión, habría que hacer tres precisiones fundamentales sobre este tema. En primer lugar, creo que la distinción entre “convencidos” y “no convencidos” no es apropiada. No creo que existan los total, plena, definitiva y absolutamente “convencidos” en este mundo. Hasta que lleguemos a la Jerusalén del cielo, todos necesitamos ser evangelizados una y otra vez, también los que ya somos cristianos. San Ignacio de Antioquía, obispo y Padre de la Iglesia, cuando había sido apresado por ser cristiano y era transportado a Roma para morir en las fauces de los leones, escribía: “Ahora empiezo a ser discípulo”. Nuestra evangelización, como nuestra conversión, no es cosa de un único momento concreto, sino algo continuo mientras peregrinamos en esta tierra.
Yo, en particular, necesito que se me anuncie el Evangelio a menudo y, cada vez que así sucede, es para mí una novedad, algo nuevo que cambia mi vida. Se cumplen las palabras de Cristo en el Apocalipsis: Todo lo hago nuevo. Tengo que decir que, en este blog, he sido evangelizado muchas veces. Por ejemplo, el hecho de leer los testimonios de conversión de varios lectores, ha sido para mí un empujón para volver al “amor primero”, como dice el Apocalipsis. También cuando se han contado en el blog experiencias de familia en misión en Japón o en Filipinas, que han renovado mi entusiasmo por anunciar el Evangelio a las personas que viven en oscuridad por no conocer a Cristo. El testimonio de enfermedad, sufrimiento y muerte vividas con confianza en el Señor de Carlos, el marido de Yolanda, también ha sido evangelización para mí. El otro día, el relato de Jan de sus horas de frío ante una clínica abortista me conmovió y me evangelizó.
Podría contar otros muchos casos, porque son numerosas las ocasiones en las que lo que se ha escrito en este blog y en otros blogs que he ido descubriendo ha constituido para mí un anuncio vivo de la Buena Noticia de Nuestro Señor Jesucristo. Espero que haya lectores que también puedan decir lo mismo. Ésa es, al menos, mi esperanza cuando me siento delante del ordenador, para que, a pesar de mi pereza, mi debilidad y mi falta de tiempo, este blog siga en marcha.
En segundo lugar, hay que recordar que la evangelización, al igual que la naturaleza humana, es algo muy amplio. Culmina con el anuncio del Kerygma realizado con el poder del Espíritu Santo y que transforma la vida del que lo recibe, pero hay muchas cosas previas que pueden ayudar a que llegue ese momento. Como dice la Teología clásica, la gracia no destruye la naturaleza, sino que la perfecciona.
Una de esas preparaciones para la evangelización consiste en retirar obstáculos, solucionando problemas meramente intelectuales, eliminando prejuicios infundados, explicando con claridad la doctrina de la Iglesia, etc. Apartar ese tipo de obstáculos para la fe, mediante discusiones, explicaciones o ejemplos es, precisamente, uno de los grandes objetivos de este blog. No sé si se habrá cumplido el objetivo, pero hemos discutido de cientos de temas que, si bien para algunas personas pueden resultar intrascendentes, para otros pueden resultar personalmente importantes para solucionar una duda, una dificultad que les impiden aceptar la fe.
Otra preparación, a mi juicio muy importante, para la evangelización, es dar a conocer a cristianos, personas de fe, que viven de forma diferente a los demás. Como decíamos antes, el cristianismo no se vive en solitario, ni tampoco se engendra por un razonamiento intelectual abstracto. El cristianismo se transmite por contagio. Es, pues, necesario que los cristianos salgamos de las Iglesias y hablemos de nuestra fe en los lugares públicos, que no nos escondamos, como si ser cristiano fuera algo vergonzoso, privado o intrascendente. De nuevo, tengo que decir que he conocido a través de Internet a muchas personas que han fortalecido mi fe y espero que Dios les premiará por ello.
En tercer lugar, los cristianos debemos ver esta cuestión, como todas las cuestiones, con ojos de fe. No podemos olvidar la gracia de Dios, la sobreabundante, misteriosa, poderosa, actuante y milagrosa gracia de Dios. Nuestros esfuerzos pueden ser muy pobres, pero el Señor, con cinco panes birriosos y tres pobres peces puede dar de comer a las multitudes. Los esfuerzos humanos siempre son, por su propia naturaleza, insuficientes para la evangelización, por eso podemos maravillarnos de que alguien reciba la fe, porque necesariamente es un milagro. Otro día les contaré un fruto que, en otro nivel más modesto, ha dado uno de mis artículos de hace más de un año y que, sin duda, se debe a la gracia de Dios.
Finalmente, una vez hechas las precisiones anteriores, quiero retomar el sentido fundamental del comentario de Yolanda: estamos llamados a evangelizar por Internet, pero nuestros resultados en ese sentido son bastante pobres. El Señor nos ha encomendado dar razón de nuestra fe, anunciarla y, en particular, vivirla, pero no nos va a obligar a hacerlo. Podemos ser infieles a esa misión. Más aún, podemos convertirnos en obstáculos para la evangelización en lugar de en evangelizadores.
En ese sentido, pienso que lo más importante para que nuestra presencia en Internet evangelice es que transmita a Dios, que seamos imágenes de Cristo. Que quienes entren en contacto con los cristianos puedan decir: “Yo he visto a Cristo cuando vi a ese cristiano vivir con fe, estar alegre en el sufrimiento, ver la vida con esperanza, amar a sus enemigos, pedir perdón con humildad, mostrar la verdad sobre las cosas…” Si somos sinceros, nos daremos cuenta de que esto es imposible. Pero lo que es imposible para los hombres, no lo es para Dios.
28 comentarios
- los que explican la doctrina de la Iglesia, que iluminan el tesoro de la fe y nos han animado a pensar más en las cosas realmente importantes.
- los relatos autobiográficos de conversión. Es impresionante comprobar como todos los relatos coinciden en algo: tras la conversión, toda la historia de su vida adquiere una nueva luz: la de Cristo que llamaba a la puerta.
internet para ceiertas capas de poblacion puede ir bien...........
aunque lo que hay que trabajar es apie de obra
un saludo y dtb
Pero ver su nombre unido a las palabras que de él dices, al menos me hace llorar no sólo de tristeza y desolación, sino también de emoción.
Al decir "hablar para convencidos" estaba haciendo una simplificación, quizá excesiva, lo admito, pero me refería a qe los que ya nos consideramos cristianos (por muy pecadores, inconsecuentes, etc que seamos). Ya hemos recibido el evangelio y necesitamos ser convertidos o edificados, pero el evangelio lo conocemos.
Yo entendía por evangelizar, dirigirse a los alejados, a los escépticos o a los que no conocen el evangelio; a eso me refería.
Estoy segura de que tú, como yo o cualquier lector, recibe "dosis" suplementarias de evangelio leyendo algunas experiencias de otros, leyendo reflexiones ajenas.
Pero a lo que yo me refería, a hacer llegar la Buena Noticia de Jesucristo a los alejados... no sé, no creo que se esté siendo eficaz.
Obviamente depende mucho del talante personal de cada cual. A mí, por ejemplo, las experiencias de conversión que vengo leyendo por aquí, y sin ánimo de ofender a nadie, no me han servido de gran cosa (y a veces casi al contrario); son las reflexiones de los comentaristas y de algún blogger ocasionalmente las que más me llegan a veces. Tampoco creo que me sirviera de mucho ver en la calle lo que sugiere Cruz.
Dicen H & A que de los post, los que más es evangelizan son "los que explican la doctrina de la Iglesia". Pues a mí -ya te imaginas- muchas veces diría justo lo contrario. Cualquier cita del Evangelio bien traída al caso me sacude mucho más que mil explicaciones de artículos de fe, del catecismo o de cánones.
En fin, y luego está el tema del mal ejemplo que damos muchas veces, y en el cual me incluyo -iba a decir que la priomera, pero no: la segunda o tercera :-)- Ese mal ejemplo retira más posibles adhesiones al evangelio que ninguna otra cosa.
Y en general, las posturas de condena, de cerrazón, de no creo que sirvan para atraer a nadie, y menos aún a los que estén cansados, fatigados, agobiados, a los que esperan una carga ligera o un yugo llevadero.
Por lo demás, gracias por hacer caso de mis comentarios y, sobre todo, gracias por recordar a Carlos. Llevamos cuarenta días sin su presencia física y se hace durísimo; nos consuela estar juntos los tres, sabiéndole vivo en la casa del Padre y confortarnos en el recuerdo de su compañía y de su ejemplo.
Del magnifico,y se nota que bien preparado post,me quedo,para mi comentario, con la frase "estamos llamados a evangelizar por Internet, pero nuestros resultados en ese sentido son bastante pobres",¿cómo lo sabes?.¿Tienes alguna encuesta,estudio sociométrico o similar para llegar a esa conclusión?.
Charles de Foucauld vivió 15 años en el Sáhara,sin fruto aparente,¿fué estéril ese tiempo?,creo que la Evangelización,a través de Internet ha de atravesar unos años de desierto,en el que se probará la fe y los propósitos evangelizadores.
Siguiendo a Foucauld: «Enseguida que comprendí que existía un Dios, comprendí que no podía hacer otra cosa que de vivir sólo para El»,es decir:manos al arado y no volver la vista hacia atrás.
El Buen Pastor deja en el redil al rebaño,y,sale en busca de la oveja perdida,en el blog entran liantes varios,a veces les tratamos,y tratan a los cristianos ,a sartenazos,sin embargo vuelven muchos:paciencia,pronto alguno cambiará.
Y sobre todo Esperanza en quien nos ha confiado esa apasionante tarea de evangelizar,el nos conoce y estamos al cuidado del Espíritu Santo:¡TODO ES GRACIA!.
Un abrazo!
No es una evangelización propiamente dicha, pero, para los que tenemos menos de cuarenta, y vivimos en zonas muy paganizadas, tiene una importancia muy grande.
Cuando sales con tu cuadrilla de diez amigos, mas las mujeres o novias, y el único católico eres tú, y llegas a casa, y el único católico sigues siendo tú, y vas al trabajo, y el único católico, entre doscientas personas, eres tú; o a la reunión familiar, y ¡sorpresa! el único católico eres tú... pues agrada un huevo aparecer por Internet, y ver que tu situación sociológica no es universal, y que hay otra gente que comparte tus creencias.
Solo por eso, para mi vale la pena. Igual algún día puedo compartir con alguien de carne y hueso estos debates, pero la realidad virtual es mejor que la nada más absoluta. Que se lo digan si no a esos frikies que buscan en la red los amores que no encuentran en la vida real (¡triste consuelo!)...
Tienes toda la razón: debería haber escrito "nuestros resultados visibles en ese sentido son bastante pobres" (con lo cual me refería a que no parece que haya una gran presencia cristiana en Internet en comparación con supersticiones, sectas, pornografía, disputas políticas o cosas intrascendentes).
Gracias por recordarme que el mundo, la Historia e Internet no están en mis manos, sino en las de Dios y Él actúa en ellos de mil maneras que ni siquiera puedo imaginar.
Estoy convencido de que una de las cosas de las que disfrutaremos en el cielo es de ver cómo Dios ha usado muchas veces nuestros pobres esfuerzos para hacer milagros en la vida de otras personas, sin que nos demos cuenta.
Sin duda, Internet no es la solución universal. Es sólo un medio más en el que debe estar presente el Evangelio.
Lo esencial sigue siendo el encuentro directo con cristianos. Es triste que, en España, un país teóricamente cristiano, mucha gente viva toda su vida sin que nadie le haya anunciado nunca el Evangeliio. Como tú dices, si las parroquias españolas se lanzasen a evangelizar al estilo de los Apóstoles, el país entero se transformaría en unos pocos años. Dios lo quiera...
Había olvidado el tema que planteas. Creo que, en la práctica, tiene una gran importancia. Los blogs y espacios cristianos en Internet pueden proporcionar un grupo de referencia a muchos cristianos que tienen la impresión de vivir la fe casi completamente en solitario. Si sigue descendiendo el número de cristianos en Europa y España, cada vez será más importante este papel de Internet.
Muchas gracias por tu testimonio personal. Al final, los hechos concretos son los nos permiten comprobar si Internet de verdad puede ayudar o no.
Un saludo y bienvenida al blog.
Aunque lo que se dice tiene mucha importancia, son las personas concretas con las que uno se encuentra las que evangelizan o no. Por eso mismo, iba a hablar con más detalle, al final del artículo, de la importancia del comportamiento de cada uno en Internet, pero ya se me hacía el artículo demasiado largo. Coincido plenamente contigo en que nuestro "mal ejemplo retira más posibles adhesiones al evangelio que ninguna otra cosa".
También me ha gustado especialmente de tu comentario la importancia de tener en cuenta a los "cansados, fatigados, agobiados, a los que esperan una carga ligera o un yugo llevadero". Además, todos estamos en esa situación en más de una ocasión.
Un saludo, mucho ánimo y cuenta con mis oraciones.
Los relatos de conversión también me han ayudado mucho a mí. Espero que sigan enviándome más (se los he pedido a bastantes lectores, pero a la hora de la verdad cuesta ponerse a escribir).
Quiero recordar a los lectores que también me gustaría recibir sus relatos de evangelización, es decir, cómo han podido anunciar el evangelio o compartir su fe en casos concretos, sin necesidad de que sean historias espectaculares. Al contrario, cuanto más "normales" sean, más nos ayudarán a todos. Pueden enviarme sus relatos a:
espadadoblefilo @ hotmail.com
(quitando los espacios de la dirección)
Porque nuestras "defensas cristianas" no permanecen al mismo nivel siempre y hoy puedes estar a mil y al dia siguiente pasar por una crisis de aquellas en las que nada tiene sentido.Para eso sirve internet muchas veces, para "recargarte".
En otras ocasiones aprendes cosas que te sirven en momentos concretos. Por ejemplo las cosas que escribio Yolanda de lo que sentia con su esposo me sirvio a mi con una hermana de mi comunidad, porque el papa de sus hijos murio de cancer en su casa y a mi me sirvio mucho para entender que estaba sintiendo ella y como tratar de ayudarla.
Ademas nosotros somos como bien "verticales" en el uso de internet, es decir tenemos sites concretos que visitamos, etc. etc. En cambio los mas jovenes se meten en salas de chat, juegos interactivos en red, es decir en cosas donde se encuentran con mucha gente "desconocida" en el "continente virtual" y alli se puede dar la evangelizacion "tradicional" si ellos aprovechan esos espacios, que es al final a lo que los ha llamado el papa.
Un testimonio en vivo y en carne y hueso puede convertir. Pero los discursos doctrinales y las condenas de las desviaciones doctrinales, que es lo má frecuente en la blogosfera, o las peleas de "facciones" y las persecuciones al desvío doctrinal, algo aún más frecuente, no evangelizan nada. Esa es mi experiencia
No creo que haya que temer a las discusiones. Si los católicos no buscamos la verdad en cada cuestión de nuestras vidas, ¿cómo vamos a hablar de la Verdad a los que no la conocen?
Eso sí, cuando las discusiones se realizan sin caridad, es cierto que no sirven de nada. Al contrario, alejan aún más a los que ya están alejados. Dice la carta de Santiago que "la ira del hombre no produce la justicia que Dios quiere".
Como todos somos humanos (a no ser que haya entre nosotros algún extraterrestre o un ángel disfrazados), tampoco creo que pase nada por enfadarse de vez en cuando, siempre que luego se pida perdón y, sobre todo, se tenga la mínima humildad de buscar la verdad y no "ganar la discusión".
En la media que desde un blog (o desde una tribuna o desde las páginas de un libro o en un café con tus amigos) seas portador y proclamador de la Alegre Noticia, en esa justa medida, evangelizas.
Por lo demás, echen un vistazo al capítulo 4 del Evangelio de Marcos: ahí podrán leer la parábola del sembrador y un poco después (en el mismo capítulo) la de la semilla que crece sola donde se nos dice que la semilla va creciendo "sin que el sembrador sepa cómo". Y es que nosotros debemos sembrar pero el que hace germinar y crecer la semilla es Otro (sin que sepamos nosotros cómo). En fin, no queramos ocupar el lugar de Dios; bastaría con que hiciésemos bien el trabajo que a nosotros nos toca.
Libertad Digital es una prueba. A mí me encanta leeros. Saludos a todos.
Tambien de alguna manera la parábola del sembrador. Como cristianos debemos preocuparnos en sembrar, sin reparar en el terreno en que sembramos, será el Espíritu Santo quien luego ayude a florecer esa semilla y no la otra.
Tal vez por los tiempos en que vivimos nos preocupamos, a mi entender, excesivamente en recoger el resultado de lo que sembramos, y sin embargo a quien corresponde la cosecha es al Señor, quien todo lo dispone.
Creo que evangelizar por internet, a través de televisión, tomando un café, en un entierro o un campo de fútbol es indiferente, lo verdaremente importante es el hecho del apostolado, y la oración para que aquella semilla germine. Pero no nos preocupemos de lo conveniente o lo inconveniente de nuestro apostolado, siempre es necesario. El resto lo hará el Espíritu Santo.
Como te podrás imaginar, Bruno, no soy un ecumenista enragé, y las actividades de dialogo interreligioso no me parecen gran cosa, además de haberse prestado a delirios varios.
Sin embargo, hace poco leí que el Dalai Lama, en una visita que hizo al monasterio de Thomas Merton en Kentucky, confesó que recordaba una frase que el trapense le dijo, cuarenta años antes, negando enfaticamente la reencarnacion: "One life only, created directly by God". Pues bien, el Dalai habìa quedado impactado por la frase. La inmediatez inmanente del acto creador de Dios, la unicidad de la vida. Le habìa quedado dando vueltas. Lo ha evangelizado.
Fui a los diarios de Merton-el del último año de su vida-, porque recordaba la entrevista. Pues bien, Merton no menciona la frase. Evidentemente, no le llamó la atención lo dicho.
El Espíritu sopla donde quiere, y nosotros no conocemos ni de donde viene, y sobre todo, qué propósitos persigue.
Esto último es muy difícil, sobre todo en nuestra sociedad occidental. Yo creo que los alejados necesitan ver un cristiano convertido de veras, que es como ser testigos de un milagro: alguien que no se resiste al mal, que ama al enemigo. Por eso es tan importante que nosotros, los que nos llamamos católicos, nos convirtamos. Si nuestros familiares y amigos ateos no reciben el Evangelio es por nuestra culpa.
Un saludo muy cordial.
Dice, en forma característica, que no sabemos cuál es el propósito de la Creacion. Y también en forma muy característica, que quizás la Creacion visible es una forma que tiene Dios de iluminar a los ángeles respecto de ciertas perfecciones que existen en El. Por eso, agrego yo, San Pablo dice que "soy espectáculo para los ángeles". Por eso la eucaristía es panis angelorum, porque les predica algo que el solo espìritu no podría alcanzar. El espiritu en su condicion carnal ilumina al ángel sobre cierta perfeccion de Dios inasequible por la mente angelica. La "humildad" de Dios, por ejemplo
Asì que, en todo caso, cuando no encontramos fruto visible, sabemos que evangelizamos también a los ángeles. Que nos contemplan azorados y maravillados. Un poco como en la película de Win Wendersm, "Las alas del deseo"
Estoy de acuerdo con ciudadano en que hay que sembrar y que el viento del Espíritu Santo haga el resto
"Según expone San Isidoro en el libro Etymol., la palabra cisma se ha tomado de la escisión de pareceres. Pues bien, la escisión se opone a la unidad, y por eso se llama pecado de cisma el que directa y esencialmente se opone a la unidad. En efecto, así como en el orden natural no constituye especie lo que es accidental, así tampoco en el orden moral, en el que lo intencional es esencial, mientras que lo que cae fuera de la intención es, por así decirlo, accidental. Por eso el pecado de herejía es propiamente pecado especial, por el hecho de que intenta separar de la unidad realizada por la caridad . Esta no solamente une a las personas entre sí por el vínculo especial del amor espiritual, sino que une a toda la Iglesia en la unidad del Espíritu. Por tanto, se considerará como cismáticos en sentido estricto a quienes espontánea e intencionadamente se apartan de la unidad de la Iglesia, que es la unidad principal. En efecto, la unión particular de unos con otros está ordenada a la unidad de la Iglesia, del mismo modo que la organización de los miembros en el cuerpo natural está ordenada a la unidad de todo el cuerpo.
Por otra parte, la unidad de la Iglesia radica en dos cosas, es decir, en la conexión o comunicación de los miembros de la Iglesia entre sí y en la ordenación de todos ellos a una misma cabeza, a tenor de lo que escribe el Apóstol: Vanamente hinchado por su mente carnal, sin mantenerse unido a la Cabeza, de la cual todo el Cuerpo, por medio de junturas y ligamentos, recibe nutrición y cohesión para realizar su crecimiento en Dios (Col 2,18-19). Pues bien, esa Cabeza es Cristo mismo, cuyas veces desempeña en la Iglesia el Sumo Pontífice. Por eso se llama cismáticos a quienes rehusan someterse al Romano Pontífice y a los que se niegan a comunicar con los miembros de la Iglesia a él sometidos"
No subestimeis vuestro trabajo evangelizador, no solo es posible si no que es muy necesario e importante , no penseis que los resultados son pobres y que solo vale para los " convencidos " muy al contrario es muy valioso para alejados y escépticos, que en el fondo siempre buscan y aquí, encuentran.Precisamente los alejados están en ambientes en los que no tienen con quien compartir inquietudes religiosas y ahí estais vosotros. Yo siempre os leo pero no participo porque tengo TODO que aprender y NADA que enseñar.
Que Dios os bendiga
NADA que enseñar,¡imposible!,a mi ya me has edificado con tu humildad.Gracias.
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