No, Dios no perdona siempre
Al hilo de una ambigua frase del papa, han surgido interpretaciones buenistas que son completamente ajenas a la fe católica. La frase es “Dios perdona siempre”, que resulta muy atractiva para un titular, pero, para que no lleve a error, debe entenderse bien, es decir, católicamente.
La frase se puede salvar entendiendo que Dios perdona siempre… a condición de que se den las condiciones necesarias. Es decir, en el sentido de que no perdona siempre, pero siempre ofrece el perdón mientras dura la vida aquí en la tierra para el que acepta recibirlo con la disposición adecuada.
Esto no es alta teología, todos lo hemos estudiado al prepararnos para la primera comunión. Para recibir el perdón de los pecados se necesitan cinco cosas: examen de conciencia, dolor de los pecados, propósito de la enmienda, decir los pecados al confesor y cumplir la penitencia. El que va a recibir el perdón de los pecados en la confesión y no cumple alguno de esos requisitos no recibe el perdón. Es así de sencillo.
Según la enseñanza de la Iglesia, “no hay nadie, tan perverso y tan culpable que, si verdaderamente está arrepentido de sus pecados, no pueda contar con la esperanza cierta de perdón” (Catecismo Romano, 1, 11, 5). Eso significa que el Señor le ofrece el perdón y por eso está allí el sacerdote en su nombre, esperando en el camino como el padre del hijo pródigo, pero si el penitente no está dispuesto a recibir el perdón como Dios quiere que lo reciba, entonces no lo recibe. Por eso, san Pablo implora: dejaos reconciliar con Dios (2 Co 5,20).
Pero, pero, pero ¿y en casos excepcionales? ¿No son prescindibles esas condiciones? Solo algunas de ellas. Como enseña el concilio de Trento en su sesión XIV, el dolor de los pecados, el propósito de la enmienda (estas dos englobadas en lo que Trento llama “contrición”), la confesión de los pecados al confesor y el cumplimiento de la penitencia (que Trento incluye en el concepto más amplio de “satisfacción) son “actos que, en cuanto por institución de Dios, se requieren en el penitente”. Eso implica que es Dios mismo el que pone esas condiciones, no la Iglesia y, por lo tanto, la Iglesia no podría dispensar de ellas aunque quisiera hacerlo.
No todas son necesarias en el mismo sentido, sin embargo. Como también enseña Trento, la contrición perfecta alcanza el perdón de Dios antes incluso de haber recibido el sacramento de la confesión, aunque debe incluir siempre el deseo de acudir posteriormente a la confesión sacramental (y, por lo tanto, de cumplir las cuatro condiciones clásicas). Como alguien podría morir después de esa contrición, pero antes de poder confesarse, y esa persona habría recibido el perdón de Dios, eso nos indica que son absolutamente necesarias dos condiciones: el arrepentimiento y el propósito de la enmienda. Para las otras dos (decir los pecados al confesor y cumplir la penitencia), en circunstancias extraordinarias basta el deseo, al menos implícito, de cumplirlas, aunque por esas circunstancias ajenas a la voluntad del penitente se haga imposible llevarlo a cabo.
No se trata de condiciones arbitrarias, impuestas por Dios “porque sí”, sino consecuencia de la esencia misma de lo que significa ser perdonado. Para recibir el perdón hace falta “un dolor del alma y una detestación del pecado cometido con la resolución de no volver a pecar” (Concilio de Trento, sesión XIV). Nadie puede ser perdonado si no rechaza el pecado, tanto el cometido como el hecho de seguir cometiéndolo. Es imposible, porque alguien no puede a la vez ser liberado del pecado y permanecer voluntariamente en ese pecado. No es que Dios no quiera perdonarle, es que perdonar a alguien así no significa nada, carece de sentido. Es como pedir que dos más dos sean cinco o que alguien sea, al mismo tiempo, alto y bajo.
No hace mucho, una catequista me dijo que, en su opinión, la misericordia de Dios podía perdonar incluso al que no se arrepintiera, de modo que también esa persona que no se arrepentía podía ir al cielo. La mujer lo decía con buena intención, claro, deseando que todos se salvaran, pero hay que dejarlo muy claro: eso no tiene nada que ver con el catolicismo, ni con el Evangelio, ni con la lógica más básica. El hijo pródigo no puede volver a la casa del padre y a la vez permanecer lejos de ella. Si pretende seguir haciendo lo segundo, no estará haciendo lo primero y si se decide a lo primero, entonces está decidiendo también no hacer lo segundo. Dicho de otra forma, el pecado no puede entrar en el cielo, porque entonces ya no sería el cielo. Pretender que es posible otra cosa, además de ilógico, es negar la realidad y una forma inconsciente de creerse mejor que Jesucristo.
A todo esto se suma, por supuesto, una condición temporal: el ofrecimiento que hace Dios del perdón solo puede aprovecharse durante la vida en la tierra. Tras la muerte, la decisión ya ha sido tomada y no existe la posibilidad de acogerse al perdón de Dios. El hombre que ha muerto en pecado mortal ya ha tomado la decisión de rechazar definitivamente ese perdón que siempre se le ofrecía durante la vida terrena. Por eso el infierno y el cielo son eternos, como consecuencia de una decisión definitiva.
Es bueno saber todo esto y por eso hemos hablado de ello, pero de nada sirve si se queda en palabras. Este Adviento en el que estamos es para nosotros, para nuestra salvación. Reconciliémonos con Dios. Aprovechemos ese perdón que Cristo ganó en nuestro favor y Dios Padre nos ofrece hoy. Si hoy escucháis su voz, no endurezcáis el corazón. Ahora es tiempo de gracia, ahora es tiempo de salvación.
82 comentarios
El otro día vi un video, supongo que de un pastor protestante, que les decía a un musulmán y a un judío, que en el cristianismo nos salvamos porque Dios nos ama y murió pagando con su sangre nuestra salvación y, por eso, y no por cumplir ningún precepto, llegamos al Cielo.
Supongo que es la Doctrina de la Gracia, pero de un modo que no me pareció muy católico porque en la Doctrina Católica la colaboración del pecador con su arrepentimiento y su dolor de corazón es condición básica. Solo Dios puede salvarte, pero no sin tu consentimiento y tu consentimiento es, precisamente, un acto de verdadera contricción.
Incluso en las homilias sobre la Parábola del Hijo Pródigo, para dar más énfasis al Amor del Padre, se pasa por encima de que el hijo volvió sinceramente arrepentido como si eso no tuviera importancia.
Es así y lo mismo que Cristo no perdía el tiempo con ellos nosotros, al menos yo, no quiero perder el tiempo . Allá ellos , me digo para mis adentros.
Me parece que esta forma de pensar brota de una idea antropomorfizada de Dios. Se piensa que Dios se queda enojado por que lo hemos ofendido, y que el perdón de Dios consistiría más bien en que se le pase el enojo a Dios, y obviamente esta forma de pensar también trae consigo el grave error de que el arrepentimiento tendría que ser una iniciativa del hombre, que sorprende a Dios y le hace pasar Su enojo.
El arrepentimiento en realidad es una gracia de Dios, que necesariamente es fruto de otra gracia previa: la iluminación de la inteligencia sobre el gran misterio del amor divino, que permite ver la miseria humana cuando rechaza ese amor prefiriendo falsos bienes, y entonces viene nuevamente la gracia para mover la voluntad a rechazar esos falsos bienes para volverse hacia el único Bien verdadero, el único Bien que puede llenar el corazón. Pero misteriosamente Dios al dar ambas gracias, permite la posibilidad de que el hombre las rechace y se encierre en su falsa realización de sí mismo. Y bueno, no es que Dios no deja a esta persona entrar a participar de la vida divina, es la persona quien no quiere hacerlo. No es falta de perdón de Dios, es falta de deseos de recibir ese perdón.
«los grandes gestos de los santos [y la contrición es ciertamente el más eminente de ellos] no son autoconscientes, es decir, son auténticos, es decir, son divinos: «padecen a Dios» y obran en cierto modo como divinos autómatas, como obran los enamorados; sin «autosentirse»; como dicen ahora.»
Eso sí, ponga vd la x.
Vivir para ver.
Pdta. No se si es que ha cambiado, pero cuando yo comulgué años ha, había un 5º requisito que era el "examen de conciencia".
No sé, quiza en esta epoca de 9 mandamientos (dicen por ahí que el 6º lo han borrado) estoy algo desactualizado ;-)
¿Has visto un correo que te envié ayer? No sé si has cambiado de dirección de correo electrónico.
Viejo debate, de cuando iba a catequesis de Confirmación: ¿Judas está en el cielo o en el infierno? Dependiendo de la respuesta que se dé, nos comportaremos ante el pecado y el arrepentimiento.
Aunque claro, siempre hay alguien que dice que Judas colgando de la soga o rodando por el barranco, le dio tiempo a arrepentirse... Y que Dios pudo tener misericordia de él.
Yo no lo creo.
Entonces alguien te dice: qué duro eres, no debes juzgar a nadie.
Oiga, oiga, que se juzgó el solito; digo yo.
Y eso, que el debate sigue, o mejor dicho, para los buenistas no hay debate.
Pero si cojo musgo para hacer el Nacimiento, entonces si me condenan al infierno.
Vaya tropa...
Vale.
Pero me llama la atención que también perdonó sus pecados a un paralítico, que lo único que quería es salir de su parálisis. La primera tenía fe y contrición; el segundo -por lo que deducimos del texto (Mc. 2,5)- sólo tenía fe. Y a ambos se les perdonaron los pecados.
Por supuesto me parece disparatado lo de esa catequista, pero lo cierto es que la misericordia de Dios deparará muchas sorpresas.
"La primera tenía fe y contrición; el segundo -por lo que deducimos del texto (Mc. 2,5)- sólo tenía fe. Y a ambos se les perdonaron los pecados"
Es que eso es una conclusión gratuita. Del simple hecho de que no se mencione expresamente su contrición en el texto no se puede deducir legítimamente que no la tuviera. Con ese tipo de razonamiento igualmente podríamos deducir que San Pedro tenía fe, pero el apóstol San Simón no, porque la fe del primero se menciona en el Evangelio y la del segundo no. Por ese camino no se puede ir a ningún sitio.
"Por supuesto me parece disparatado lo de esa catequista, pero lo cierto es que la misericordia de Dios deparará muchas sorpresas"
No lo entiendo, porque lo mismo que dice la catequista es lo que parece que afirma el comentario: hay perdón de los pecados sin arrepentimiento y propósito de la enmienda. Lo cual, en efecto, es un disparate. Quizá no lo he entendido bien.
La misericordia de Dios no da sorpresas contrarias a la fe de la Iglesia y a la razón. Si lo hiciera, igualmente podría decir: "sorpresa: en realidad Jesucristo no os ha salvado, todo era una broma".
"Conozco casos así"
Desgraciadamente es algo muy común. A muchos clérigos les avergüenza la fe católica.
Debemos perdonar a los demás y ayudarles a encontrar la Paz. Debemos ayudarles a encontrar sus errores, la raíz más profunda de sus errores. Debemos mostrar empatía en lo difícil que es para nosotros mismos poder llegar a incinerar la raíz de algunos errores. A veces esa raíz puede tener una ramificación muy profunda que reside en no ser capaces de perdonarnos completamente a nosotros mismos de ahí la frase de "no merezco el perdón de Dios" de algunas personas, muy buenas, que puede que sólo tengan algún pecado venial, pero que son muy autoexigentes consigo mismas.
La raíz del pecado reside en los deseos materiales y mentales que se apartan de la línea espiritual. Al mismo tiempo esos deseos generan unos hábitos (de ahí aquello que muchos dicen :"siempre me confieso de los mismos pecados"), también generan unas tendencias y todo ello origina unos estados de ánimo. O sea, que nadie puede negar que existe un Cambio Anímico (no climático ..pero sí de "clima" interior ..😂) en muchísimas personas.
Aquí debemos purificar esos deseos, hábitos, tendencias y estados de ánimo que nos apartan de Dios y nos hacen "comer" de la fruta prohibida (pecado, manzana, sexo...los 7 pecados capitales...) que es dulce al principio, pero amarga al final puesto que es "agua muerta" que nunca sacia y que muchas veces consigue autoengañarnos.
En el Purgatorio, para la inmensa mayoría de nosotros, seguirá esa purificación en el Plano (universo) Astral. El Purgatorio será más o menos "largo" en tanto en cuanto seamos o no capaces de purificar, perfeccionar y "limpiar" nuestra alma de todas las "manchas" que origina el pecado. Será más o menos larga nuestra estancia en función de nuestro progreso en esa purificación y perfeccionamiento. Desde nuestra libertad y voluntad iremos incinerando todas esa raíces y entonces podremos caminar mucho más rápidamente hacia Dios.
Debemos pues ayudar a los demás a encontrar esas raíces y una de las mejores formas es empezando por nosotros mismos.
Sin duda es un trabajo que requiere mucha oración y meditación y un Camino que no será tan largo cuando incineremos esas raíces ( ya que aunque las arranquemos siempre vuelven a crecer).
Mucho ánimo y un abrazo.
Paz. Amén.
🙏🙏🙏
"El santo cura de Arts le dijo a una mujer..."
Si no recuerdo mal, creo que has juntado en una dos anécdotas distintas del Cura de Ars. Una es la del marido agnóstico que cortaba flores para que la mujer se las pusiera a la Virgen y otra es la del marido suicidado, sobre el cual el Cura de Ars dijo: entre el puente y el agua está la misericordia de Dios.
"había un 5º requisito que era el "examen de conciencia""
Je, je. Está muy bien. Yo no he hablado de ello porque, como oportunamente señala Daniel Iglesias, ese quinto requisito (el primero, en cuanto al orden en que se aprenden) no es propiamente una condición necesaria para la confesión, sino más bien una instrucción práctica para confesarse. En cualquier caso, estrictamente hablando se cumple siempre, porque es evidente que, para poder decir los pecados, antes hay que pensar en qué pecados se tienen. Por lo tanto, las cuestiones referidas al examen de conciencia solo pueden ser de grado, sobre el tiempo que se dedica a él o la profundidad con que se hace, y no sobre si hay que hacerlo o no.
En Trento no se menciona de forma expresa como un acto del penitente ("Y son cuasi materia de este sacramento, los actos del mismo penitente, a saber, la contrición, confesión y satisfacción [Can. 4]"), pero sí de pasada, diciendo: "los penitentes refieran en la confesión todos los pecados mortales de que tienen conciencia después de diligente examen de sí mismos".
De todas maneras, voy a añadirlo al artículo a beneficio de inventario y para no llevar a error a nadie, así que gracias por mencionarlo.
El Concilio de Trento parece recoger lo que expone santo Tomás sobre los tres actos del penitente: contrición, confesión y satisfacción (en la contrición se incluye tanto el dolor de los pecados como el propósito de enmienda).
Hay una cuestión interesante y misteriosa, "vista desde Dios", por así decir. Si Dios quisiera con Voluntad consecuente, es decir, eficazmente, que todos los pecadores se arrepintieran, todos se arrepentirían, infaliblemente, pero libremente, claro está. De hecho, el que uno se arrepienta se debe, en el orden de la causalidad primera, a que Dios quiere que se arrepienta, con tal Voluntad. De modo que si alguien no se arrepiente, Dios no quiere que se arrepienta con tal Voluntad, pero esto no es causa de que no se arrepienta, sino sólo condición: el que no se arrepiente es culpable de su no arrepentimiento. Tampoco quiere Dios que no se arrepienta, lo cual equivaldría a sostener que Dios quiere el mal, lo cual es impío y erróneo. En tal caso, Dios querría permitir que no se arrepintiera. En definitiva, es el misterio de la permisión del mal moral por parte de Dios. Pero a lo que voy es a que, considerando la cuestión desde la Voluntad consecuente de Dios, Dios no quiere siempre perdonar: de lo contrario, todos serían perdonados. Dios quiere con tal Voluntad, misteriosamente, permitir la impenitencia y, consecuentemente, la condenación eterna de algunas de sus creaturas personales: si así no fuera, no se daría ni la impenitencia ni la eterna condenación. Tremendo misterio.
"que Judas colgando de la soga o rodando por el barranco, le dio tiempo a arrepentirse... Y que Dios pudo tener misericordia de él. Yo no lo creo. Entonces alguien te dice: qué duro eres, no debes juzgar a nadie"
Pensar que alguien se ha salvado o se ha condenado no es juzgar a nadie, es tener opinión sobre una cuestión opinable. Hasta donde puedo ver, no hay nada de malo en ello. En el caso de Judas, todo apunta a la condenación, desde sus actos a las palabras de Cristo, pero no tenemos una certeza absoluta (porque no parece que sea una doctrina de fe que se condenó). En cualquier caso, no hay ningún problema en pensar que se condenó, como han creído la inmensa mayoría de los católicos de la historia.
"Pero si cojo musgo para hacer el Nacimiento, entonces si me condenan al infierno"
Je, je. Me he reído muy a gusto. La obsesión con los "pecados ecológicos" actual es un vano intento de tapar el hecho evidente de que prácticamente se han olvidado todos los demás pecados.
Este tema pienso que se ve con toda claridad cuando uno es víctima de la maldad de otra persona, tratándose de un acto muy grave, que atente contra la vida propia o de un ser querido o dañe de forma importante la integridad física o produzca un daño patrimonial muy serio. ¿Es razonable, entonces, pensar que a quienes nos han hecho tanto daño Dios les va a perdonar sin verdadero arrepentimiento...? No, no es razonable. De otro modo, daría lo mismo ser bueno que ser malo, daría igual nuestro sufrimiento y la justicia, simplemente, no existiría. Pero lo cierto es que a Dios todo esto le importa muchísimo; y Él es Misericordia infinita, sí, pero también es Justicia infinita.
En realidad, lo que subyace en todo esto es un desconocimiento de Quién y cómo es Dios y de la gravedad del pecado. Y es tremendo que esto se dé; especialmente, si hablamos de clérigos.
Que la Misericordia es Dios es tan visible como invisible.
Si se cree en la Misericordia en serio el pecado se rechaza en serio.
No hay equivalencia posible, existe una absoluta incompatibilidad entre ambas.
Hubo un a vez tres crucificados un inocente y dos culpables veamos la actitud de cada uno y las palabras de Cristo.
Al necio no hay misericordia con que darle y cuando un ciego guía a otro ciego.
Mantengamos la ventaja extraordinaria que tenemos en el sentido que el tentador no conoce el resultado, lo conocemos nosotros...
Cómo la ves...
En el caso del durísimo trance del juicio de Dios, que todos hemos de conocer, yo pondré mi cara de bobo, o sea la de todos los días y diré al Señor;
"Tú lo sabes todo y yo no sé nada. Esto es poco deportivo, así que acataré tu sentencia sin protestar y sin quejas porque seguro que lo tengo merecido. Ahora bien, si fuere al infierno, alteraría mucho el orden de las cosas. En sus negras paredes carbonizadas por fuego eterno, aparecerían de noche pintadas con el Ave María o el Sub tuum praesidium y recogería 53 brasitas atadas con una cuerda y con dos palitos haría una cruz. Esto contradice a la teología católica pero muchos vascos somos así"
N.B; Este es un comentario jocoso/poético. Quien sea más aburrido que una alpargata no hace falta que me responda.
Hay que tener en cuenta que, según Benedicto XVI y otros autores, los dos ladrones no eran simples ladrones sino de la secta de los zelotes porque el castigo de cruz era castigo de sedición, no de otro tipo de delitos que para eso estaban las galeras, las minas y otro tipos de castigos. Incluso puede que fueran de la peor clase: los sicarios.
Dimas vio la luz que envolvía a Cristo, Gestas tenía el corazón tan negro que no vio nada.
Así de tajante suena como a "trampa". O cumples aquí y ahora o después ya es tarde. La oportunidad es ahora. ¿Sin embargo el conocimiento es después? Así que tienes más o menos que "apostar". Venga, decide. Pero ahora. Después no tiene emoción, ¡así cualquiera! No veo a Dios jugando a eso.
¿Estamos seguros de que "esa decisión ya ha sido tomada"? ¿Podemos JUZGAR que alguien ya ha tomado esa decisión? ¿Estamos seguros de haberla tomado nosotros mismos incluso? ¿Hay decisión libre sobre algo que no se conoce, hasta que no se conoce?
Abusamos mucho de la doctrina de los "novísimos o postrimerías", que recitaban nuestros abuelos, "muerte, juicio, infierno y gloria", y curiosamente se nos olvida que por algo será que pusieron también por ahí el Purgatorio. Una oportunidad que nada tiene que ver con juzgar a nadie con que "ya ha tomado una decisión". La habrá tomado o no, ¿qué sabemos? O incluso qué sabe él mismo. Una oportunidad propia de Dios, que es decir propia de un Padre con su hijo.
El Purgatorio es parte de la Justicia y la Misericordia, todo aquél al que se le hayan perdonado los pecados, pero a consecuencia de ellos hizo algún mal, va al Purgatorio como el invitado que tiene que presentarse al convite con las ropas resplandecientes.
Por eso no es conveniente hacer panegíricos del fallecido como se hace en la actualidad y yo voy a dejar muy claro a mis sobrinas que no se les ocurra hacer eso en la misa de difuntos porque son muy modernas y capaces de tomar un micrófono y decir lo buena que fue su tía. De eso, nada.
Lo terrible del Purgatorio es ver, ya sin posibilidad de recurrir a subterfugios, cómo aquello que hiciste, que te pareció banal en su momento, ofendió a Dios y dañó al prójimo y llorar amargamente.
El que se mantenga alejado, quedará alejado.
Dios perdona, sí, y de su parte está dispuesto a perdonarlo todo. Pero si uno no reconoce el mal que ha hecho como mal, y no lo rechaza porque es un mal y ofende a Dios es impermeable al perdón. No puede recibirlo, porque sólo se puede perdonar algo malo, no algo bueno. Si yo no reconozco mi pecado como algo malo y necesitado de perdón me alzo contra el criterio de Dios. Mi "verdad" contra La Verdad.
Dios ve las cosas como son en sí, las apariencias, que tanto nos confunden a nosotros, son insignificantes para Él. El rechazo a arrepentirse es en el fondo de las cosas un rechazo a la Verdad que es Dios. Es situarse en una posición de lucha contra Él, en el sentido de que implica que nuesto criterio sobre la bondad o maldad de un acto lo ponemos por encima del de Dios. Y Dios no puede sucumbir al criterio de una criatura, no puede dar por bueno lo que por su naturaleza es malo, porque Él es La Verdad y no puede contradecirse a sí mismo.
Por eso es imposible que Dios perdone sin arrepentimiento, no por defecto de su bondad, que es infinita, sino por la cerrazón del pecador, que implícitamente se pone sobre Dios.
Es muy grave sembrar confusión sobre este tema, porque nos jugamos la vida eterna.
Saludos, Bruno, y gracias una vez más por un artículo tan clarificador como necesario.
Si uno muere en pecado mortal sin arrepentirse, se va al infierno. No hay purgatorio...
A mi edad y sabiendo que no puedo tirar ni la primera piedra ni ninguna otra propongo -novedad novedosa- que seamos misericordiosos unos con otros y por ahí...alguien copia...es un consejo bíblico "obtenga un acuerdo antes de llegar al Tribunal"...
Seamos -a mayor Gracia de Dios- colaboradores de las acciones del Espíritu Santo no obstáculos por de pronto no siendo ocasión de pecado, ni de peleas, ni de desunión, ni rompamos lo que no tiene remedio..
No hoy peor infierno que quedarse sin Dios...
Cómo la ves...
Tras el documento "dignidad infinita" o mejor dicho, tras la presentación del propio Tucho hablando del infierno vacío, creo que está claro por dónde va la línea doctrinal de la new iglesia 2030.
Para ilustrarlo mejor en qué herejía estamos, porque es una herejía condenada (en varios sínodos y en un concilio ecuménico), podemos leer por nosotros mismos en el propio Documento guia del Sínodo sinodalizador "hacia-una-espiritualidad-para-la-sinodalidad.html". Está en la página oficial del Sínodo.
Página 29, esto me impacta cada vez que lo leo.
"¿En qué consiste un corazón misericordioso? Es un corazón ardiente por toda la
creación, la humanidad, los pájaros, los animales, LOS DEMONIOS y todo lo que existe.
Mediante el recuerdo de ellos, los ojos de una persona misericordiosa derraman abundantes lágrimas. Por la fuerte y vehemente misericordia que se apodera del corazón de tal persona, y por esa gran compasión, el corazón se humilla, y uno no puede soportar escuchar o ver cualquier injuria o leve dolor de alguno en la creación.
Por esta razón, una tal persona ofrece continuamente una oración cargada de lágrimas, aún por las bestias irracionales, por los enemigos de la verdad y por aquellos que la perjudican, para que sean protegidos y reciban misericordia. Y del mismo modo, la
persona REZA POR LA FAMILIA DE LOS REPTILES debido a la gran compasión que arde sin medida en el corazón que se asemeja a Dios.
Y este es el documento guia aprobado por Hollerich y Francisco. Herejia de la salvación universal de Orígenes, hasta donde yo sé, anatematizaba por varios sínodos y un gran Concilio Ecuménico. Como católico estoy perplejo.
Hemos cambiado el "Yo soy el que soy" por "Tú eres el que nosotros digamos". Así de simple.
La peor de todas las herejías.
Toda la vida se la pasó buscando no sabía qué, leyó la autobiografía de Santa Teresa de Ávila, luego leyó los Evangelios y dijo: "ésta es la verdad". "¿De qué verdad hablas?", le preguntaban y ella contestaba: "es el secreto de mi alma".
Ahora se procede al reves, no se busca, se modela, se programa, se adapta a nosotros lo que no es nuestro sino de Dios, de manera que sacamos a Dios de nuestro interior dándole las características que nos apetece: esto me conviene, esto no me conviene, esto lo adapto, lo otro lo suprimo.
Estoy segura que Santa Teresa Benedicta de la Cruz aprendió a ponerse de rodillas ante el Sagrario sin que nadie le dijera lo que tenía que hacer porque era lo que se desprendía del encuentro con la Verdad y el Amor.
Si empezamos a decir esto no tiene importancia, lo otro tampoco, esto sí, esto no, es que no buscamos nada y, por lo tanto, no podemos encontrarlo.
Y luego nos sorprendemos de que un porcentaje altísimo de católicos no crea en la Transustanciación o que otros confundan la Resurrección con la Transmigración de las almas.
Dios nos viene dado, no podemos cambiarlo porque Él no se muda, mudamos nosotros. Si hay algo que no entendemos, como el que dijo que le chirriaba: "Yo soy la esclava del Señor", y era un católico modelo, es que te estás alejando porque todo católico entiende esa frase.
Proverbios 28:13
¿Quién podrá entender sus propios errores?Líbrame de los que me son ocultos.
Salmos 19, 12
Pidamos a Dios que nos muestre aquello que hacemos mal sin darnos cuenta.
Y recordemos que no gsy tentación que no pueda ser vencida por la gracia de Dios
No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.
1 Corintios 10, 3
A pesar de ello seguimos pecando, pero hay remedio para ello..
Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.
1 Juan 2:1
Isaac el sitio o de Ninive no es Santo para la iglesia Católica, si no por favor agradecería que me lo indicaras cuando es su fecha y cuando se canonizó. Para la iglesia romana desde luego no lo es, que yo sepa
Por el contrario si que es venerado como santo en algunas y no en todas las Iglesias ortodoxas (Calcedonianas); creo que los armenios y coptos (no Calcedonianos) también lo veneran pero no me acuerdo y, también, no se si alguna iglesia oriental que está bajo jurisdicción del Papa (Irak).
La herejía de Orígenes de la salvación universal a la que este asceta se adhirió está condenada. Consultalo. "Sean anatema" todos los que se adhieran a dicha herejía.
No se qué poesía ve usted en orar por demonios y llorar por la familia de los reptiles. Vaya poesía.
Según nota del dicasterio para la unidad de los cristianos "Isaac pertenecía a una Iglesia que no aceptó el Concilio de Efeso". Vamos bien.
Se indica que esto es un gesto ecuménico con la Iglesia Asiria con la que había una disputa desde hace 1500 años.
Finaliza diciendo: “la inclusión de Isaac el Sirio en el Martirologio Romano demuestra que la santidad no se detuvo con las separaciones y existe más allá de las fronteras confesionales”.
¿Significa esto que tengo o tiene la Iglesia romana que adherirse a todos los escritos de un obispo que nestoriamo?. No lo creo. La salvación universal seguirá siendo herejía.
Recuerdo que hace mucho tiempo alguien, muy versado en patrística, estaba convencido de que San Agustín fue hijo único y no le mande a estudiar Patrología.
Cuando no se sabe con quién se está hablando es mejor ser prudente.
Ese texto en particular tiene unos ecos muy antiguos y orientales, así que, aunque no supiera de quién es, jamás me habría metido con él, a ver si lees lo que he escrito y no me atribuyes lo que no he escrito.
Ahora bien, con la incomprensión actual hasta de los Evangelios, un texto de un escritor sirio del S. VII no puede ser comprendido por un cristiano del 2024 más que literalmente. No todos tienen la formación en lengua siriaca y textos antiguos que requeriría la comprensión de un poema de este tipo y meterlo de rondón en los documentos del sínodo esperando que el Espíritu Santo nos dé el Don de las Lenguas se presta a la confusión. No se puede convertirnos en tontos y bombardearnos luego con exquisiteces, a no ser, claro está que pretendan confundirnos.
Meter una morcilla oriental en un texto sinodal ¿a qué viene?
No fastidies, Oriol.
Inerrancia solo la Sagrada Escritura. Los escritos de los grandes santos pueden contener errores, y no pasa nada. San Juan Casiano también tiene algún párrafo en sus Colaciones que parece contradecir a la doctrina ortodoxa sobre la primacía de la gracia, pero no pasa nada.
En ambos casos seguramente si hubieran tenido la oportunidad de recibir una corrección de la Iglesia, la hubieran aceptado de buen grado.
Fermín, si no me equivoco, San Isaac ha sido venerado tradicionalmente en algunas iglesias católicas orientales. Pero tal vez me equivoque. Agradeceré toda la información que puedas darme. (Pero, en todo caso, ahora está en el Martirologio Romano...)
África, lo de que "si no sabes con quién hablas" debe de decirlo por Fermín ¿no? Porque nosotros nos conocemos desde hace ya tiempo... :-)
El documento de referencia del Sinodo, es descargable en su web y creo que no te exigen acreditar el título de máster en patristica para poder obtenerlo. Es una sorpresa que un servidor debiera de estar muy versado en patrística oriental y "bregado" en poética asiria del siglo VII, porque si no, no podría haber entendido los textos de Isaac de Ninive. En algunos de sus textos predica la apokatastasis entre otras cosas.
Sobre el tema de orar por demonios pienso que es muy peligroso. Te coloca contra Dios por un lado, por poner en tela de juicio su justicia. Por otro lado no sé puede ser más bueno que Dios y, además, los demonios no quieren la salvación. Hay ex-satanistas advirtiendo de lo peligroso de ésto: orar por ellos es ganarte su ira. Eso se busca?. Es un tema muy delicado, conectado también con la new age. Tiempos oscuros los que tocan.
Feri: Cuando unos escritos pueden contener errores o malos entendidos no se incluyen en textos destinados a todos los católicos. De hecho no se hacía hasta ahora y de eso se puede deducir una intencionalidad nada clara. Dudo mucho que tal cosa se hubiera hecho en anteriores pontificados porque para hablar de la misericordia a los sencillos tenemos montones de textos mucho menos equívocos.
Ya no estamos en la Era del Padre, ni en la del Hijo, sino, que, superadas ambas, estamos en la del Espíritu Santo, en plena contemplación y en plena mística.
Los textos ambiguos o que pueden llevar a error no se incluían jamás en un documento guía de un sínodo.
Si empezamos a citar a místicos orientales, al Maestro Eckhart, a Joaquín de Fiore y a otros, que son imposibles de entender para el común de los fieles, lo que estamos haciendo es distribuir la confusión urbi et orbi. Ni el Mastro Echkart ni Joaquín de Fiori son herejes, que yo sepa (aunque este úkltimo siempre anduvo entrando y saliendo de la ortodoxia), pero la mística renana no es lo mismo que la castellana. Yo no la entiendo y por eso ni lo intento.
Fuente: Isaac of Nineveh (Isaac the Syrian): The Second Part, Chapters 4-41 (Corpus Scriptorum Christianorum Orientalium)
"...Y está claro que Él no los abandona en el momento en que caen, y que los demonios no permanecerán en su estado demoníaco, y los pecadores no permanecerán en sus pecados; más bien, Él los va a llevar a un único estado igual de perfección en relación con su propio Ser —en un estado en el que los santos ángeles se encuentran ahora, en la perfección del amor y una mente apasiada. Él los va a llevar a esa excelencia de voluntad, donde no será como si estuvieran refrenados y no [libres], o teniendo impulsos del Oponente entonces; más bien, estarán en un estado de conocimiento excelente, con una mente madura en los impulsos que participan del derramamiento divino que el bendito Creador está preparando en su gracia; serán perfeccionados en el amor por Él, con una mente perfecta que está por encima de cualquier aberración en todos sus impulsos.
(II.40.2-4)"
Sobre los ángeles caídos:
'Tal vez serán elevados a una perfección aún mayor que aquella en la que los ángeles existen ahora; porque todos van a existir en un único amor, un único propósito, una única voluntad y un único estado perfecto de conocimiento; contemplarán a Dios con el deseo de un amor insaciable, incluso si alguna dispensación divina [es decir, Gehena] puede ser efectuada mientras tanto por razones conocidas sólo por Dios, que durará un período fijo, decretado por Él de acuerdo con la voluntad de su sabiduría"
(II.40.5).
No estoy en condiciones de juzgar la fuente.
Por otro lado no sé qué tan confiables son las fuentes que se ha usado para atribuir a Isaac tradicionalmente esta clase de escritos, según esto, Dios no castiga, infierno vacío, lo demonios de salvan, los animales también.
Cuando me enfrento a generaciones jóvenes el punto de unión está precisamente en la nebulosa de la New Age, no en la Fe racional de la Iglesia que les parece abstrusa.
Eres persona (Sean cuales sean tus pronombres) con suerte. El otro día me estuve tomando un copazo con Dios y me confirmó qur incluso a ti te va a perdonar. Me dijo que mantener un infierno como a vosotros os gusta es carísimo y ya no le queda presupuesto. Mucho peor si te ponres a hacer grafitis de mal gusto.
Eso sí. Te ha reservado una habitación en el mismo edificio que Cañita Brava y el Cuñào. por eso de tener a todos los humoristas cutres juntos, que luego os ponéis muy cansinos.
Pero salvará a TODOS.
Incluso a ti.
Si le entiendo correctamente usted afirma que todos los humanos se salvan y se van al cielo.
Por favor corrija mi entendimiento o confirme que usted aseguraFranco y Hitler se disfrutan de la gloria de Dios.
El tal Hugo, a menos que se arrepienta, lo cual es muy difícil que ocurra porque la soberbia es incompatible con el arrepentimiento y él está infectado hasta el tuétano de ese pecado capital, tendrá la oportunidad de comprobar que el infierno es eterno. Y como además él ha recibido más luz que incluso tiranos y grandes criminales, será castigado más que ellos.
Recemos por su conversión.
Pero para lectura personal, las homilias de san Isaac son muy recomendables, tienen gran valor epirotual. Las partes de doctrina dudosa o de prosa complicada se las puede pasar por alto, sin perjuicio del enorme fruto que te pueden dejar las partes que son muy faciles de comprender y profundas para meditar. Como dice san Pablo, examinaos todo y quedaos con lo bueno.
Pero, le doy la razón a Fermín en el sentido de que en un texto sinodal no viene a cuento para ejemplificar la misericordia porque eso supondría que San Isaac de Siria está, como los Salmos, en las mesillas de muchos católicos y sabes que no es así.
No hay razón ninguna para que, al que le guste, no lea a Joaquín de Fiore, al fin y al cabo los 12 apóstoles franciscanos de México eran seguidores suyos, es decir milenaristas, porque este monje salía y entraba de la ortodoxia según el papa reinante y, en este momento, no está excomulgado.
Pero, según las visiones de este monje, el mundo pasaría por tres etapas trinitarias: la del Padre, la del Hijo y la del Espíritu Santo. La tercera coincidiría con una época de paz en la que los hombres serían todos contemplativos. Imáginate que se pone de moda y pensamos que ya hemos superado el pecado y sus consecuencias y ahora todos somos seres de luz, que alabamos a Dios y estamos por encima de la Ley Mosaica (Era del Padre), de la del pecado y la penitencia (Era del Hijo) y vamos todos hacia Dios juntos y en unión, en versión Hugo Z. u otras variables.
Coincidiría con tanta mención al Espíritu Santo en el sínodo y el no hay Infierno y, `por lo tanto, encajaría perfectamente con todas las derivas modernistas más dislocadas.
En épocas de penuria no se hacen mudanzas, incentivar todas las visiones de este tipo cuando la Fe y la Razón hacen aguas es altamente peligroso.
Quedan tres telediarios para que Tucho Fernández empiece a poner de moda a Joaquín de Fiore y, si no lo ha hecho ya es porque alguna difícultad le encuentra.
Nada más abrir internet me he encontrado con esta frase: «El siglo XXI será místico o no será», dijo Malraux, y Rahner escribió: «El cristianismo del siglo XXI será místico o no será». La mística es misteriosa y difícil de abarcar pero tiene gran impacto en nuestros contemporáneos". Es decir, al autor de la frase le parece que nuestros contemporáneos, sumergidos en un mundo virtual, tienen gran inclinación hacia la mística mientras se tatúan el cuerpo, cambian de sexo y le dan a los emoticonos.
La frase de Jesús iba dirigida a la multitud que le insultaba, la cual podía perfectamente no saber lo que decía.
Ah lo que sí logré leer es sobre Judas, tener una opinión es juzgar, pero al respecto el Papa Benedicto XVI dijo "Aunque luego se alejó para ahorcarse (cf. Mt 27, 5), a nosotros no nos corresponde juzgar su gesto, poniéndonos en el lugar de Dios, infinitamente misericordioso y justo."
Saludos.
En el caso del post asegurará que todos nos vamos al cielo cuando se trata de la moral personal, pero no de la pública, internamente desea que todo aquel que se opone al marxismo bolchevique debe arder en los infiernos, lo mismo que quienes se opongan a los "justicia social"
Franco y Hitler son personaje muy diferentes, sin duda, pero la progresía los odia por igual, incluso les ha inventado la clasificación de "ultraderecha", a pesar que uno era socialista que se acercaba mucho s las ideas de Trosky (menchevique) y el otro no.
Me entendió muy bien
Mire, como buen ingeniero, tiendo a hacer complacientes mecánicas.
Muchos entienden la salvación como un calibre Pasa/No pasa. O uno se salva o no se salva. Y el xalibre es un Dios juez supremo, que desde su elevado púlpito nos sentencia severamente
Yo sin embargo. Lo en tiendo como una boca de extrusión. El agujero de salida es el que es y Dios, con su misericordia, nos da forma para poder entrar. En el proceso, en función del amor que hayas sido capaz de entregar (el amor es siempre gratuito) unos entrarán holgadamente y otros perderemos mucho material, pero todos pasaremos.
Seguramente, para Hitler. Franco y Fidel o Stalin
Dios ha encontrado la manera de salvar algo. No se ni como, ni que; pero es tan grande la misericordia de Dios que algo habrá salvado.
Así me lo enseñaron y yo así lo creo.
bien por usted, no es tan incoherente como parece. Al menos acepta que salvar a todos significa "salvar algo", lo cual es un buen principio. Pero más que "algo" lo que se nos da es la oportunidad de salvarse, un regalo divino, sin embargo los regalos pueden ser rechazados por el que los recibe, Dios no obliga a nadie. La aceptación del regalo requiere un determinado "procedimiento", como lo explica el post.
Excelente que sea ingeniero , lo felicito, pero Bruno es físico, teólogo, amén de buen esposo y padre de familia, es bueno leerle aunque no siempre se esté de acuerdo con él, yo no siempre lo estoy.
Está próximo el villancico navideño con toda la familia Moreno, el mejor post de infocatólica, año con año nos deleitan con él y es hermoso ver como sus van creciendo, se lo recomiendo.
¿Alguien puede creerse que el comentarista desequilibrado mental oficial de este blog, que expone su esquizofrenia sin pudor con sus nicks cambiantes y sus opiniones contradictorias sea ingeniero?
Pobre hombre, que sin ninguna formación, ni siquiera en el arte de cambiar pañales, se autoproclama gracioso queriendo recibir un poquito de caso.
Su triste vida no da para más.
Yo que soy de letras, y mal juntadas, me he encontrado con personas con carreras de ciencias que decían ser "intuitivas" y, donde yo necesitaba más datos para llegar a un juicio, ellas decían poseer un don que les capacitaba para saber quién tenían en frente con un solo vistazo. Había una en concreto a la que le regalabas un libro, miraba la sobrecubierta, veía la foto del autor, y decía: "éste libro no me interesa porque no me gusta su cara".
¿Quién va a leer a Oscar Wilde con ese criterio?
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