Regalo cadena de plata
La semana pasada, tuve que hacer un viaje de quinientos kilómetros de ida y otros tantos de vuelta conduciendo, en sólo dos días. En condiciones normales, el tour de force automovilístico habría sido una fuente de pesadez, fatiga y aburrimiento. El viaje, sin embargo, fue una delicia, porque me acompañó Juanjo Romero, del blog De Lapsis. Nos pasamos las diez horas de viaje hablando sin parar y, además, hablando de Dios y de sus cosas, el tema de conversación más interesante que puede haber. Disfruté tanto que, cuando llegamos, a la ida y a la vuelta, pensé sinceramente que era imposible ya estuviésemos en nuestro destino, porque no podía haber pasado más de una hora de camino.
Como es lógico, no puedo proporcionar a los lectores un viaje de diez horas con buena compañía para que hablen a placer sobre las cosas que merecen la pena. Pero puedo hacer algo parecido: voy a recomendarles un libro que es como una deliciosa conversación sobre las cosas de Dios con una veintena de cristianos que fueron grandes escritores y pensadores. Se trata de la Catena Argentea, de Jack Tollers.
El título hace referencia a la Catena Aurea (la cadena de oro), en la que Santo Tomás recopiló los textos de los Padres de la Iglesia que hacían referencia a cada pasaje de los Evangelios, como un comentario al texto bíblico. El libro de Jack Tollers es una cadena de plata de textos de una veintena de grandes autores cristianos modernos relacionados con cada pasaje del Evangelio de San Juan.
Dicho así, el libro podría parecer un simple alarde de erudición enciclopédica. Nada más lejos de la realidad. El resultado es sorprendentemente ameno y entretenido. Lo más parecido a una conversación. Eso sí, una conversación con personas excepcionales. Auténticos mistagogos, que nos inician en los misterios y nos descubren con sus palabras nuevos mundos insospechados.
El grupo de autores con los que el lector podrá conversar es, francamente, apabullante. Los textos más numerosos son del Beato Cardenal Newman, al que Tollers ha dedicado mucho trabajo, y del “Chesterton argentino”, Leonardo Castellani. Los demás autores no les quedan a la zaga en interés: el propio Chesterton, que ciertamente no podía faltar; Jacques Maritain, el filósofo francés que impulsó el neotomismo; Joseph Ratzinger, que no necesita presentación; Hilaire Belloc, gran escritor y compañero de Chesterton, lo más opuesto al buenismo de nuestra época y tristemente poco conocido en España; Malcom Muggeridge, el escritor y periodista inglés; Simone Weil, la inclasificable filósofa y mística; Maurice Baring, diplomático, literato y gran amigo de Belloc y Chesterton; Jean Borella, filósofo tradicionalista francés, muy influido por el cristianismo oriental; Raymond-Leopold Bruckberger, dominico, predicador (antiguamente, habría sido una redundancia), cineasta y tradicionalista francés; Etiénne Gilson, el gran filósofo neotomista, lleno de amor por la filosofía medieval; Ronald Knox, hijo de un obispo anglicano, converso al catolicismo, gran literato y predicador; C.S. Lewis, uno de los escritores cristianos más conocidos del siglo XX; Albert Frank-Duquesne, teólogo belga de familia judía que fue encerrado en un campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial; Sören Kierkegaard, el gran filósofo, teólogo y poeta existencialista danés (del existencialismo bueno, no del de Sartre y compañeros mártires); Peter Kreeft, converso del protestantismo norteamericano y uno de los principales impulsores del movimiento apologético en los Estados Unidos; Charles Péguy, el poeta impregnado de catolicismo; Josef Pieper, otro filósofo neotomista, quizás el que mejor supo conjugar la simplicidad y la profundidad de Santo Tomás; Antoine de Saint Exupéry, que escribió mucho más que el Principito, Gustave Thibon, filósofo y amigo de Simone Weil; Vladimir Volkoff, el novelista, espía y pensador rusofrancés que transmite las siempre fascinantes intuiciones del cristianismo ruso con un lenguaje occidental;
La Catena Argentea contiene 3400 citas deliciosas, profundas, sorprendentes, ingeniosas, reveladoras y en algunos casos perturbadoras o incluso sobrecogedoras. Es una obra hercúlea, ciclópea, fruto sin duda de miles de horas leyendo a estos autores y de otras tantas traduciendo los textos escogidos. Un esfuerzo, sin embargo, del que los lectores podemos beneficiarnos totalmente gratis y en diversos formatos electrónicos. Creo sinceramente que el libro debería costar dinero. Es más, creo que debería ser un libro caro, para que los compradores apreciasen como se debe la labor que ha supuesto su elaboración. Agradezco, sin embargo, a Jack Tollers que lo haya puesto a disposición de todos de forma gratuita, como un regalo para todos sus lectores.
A menudo, parece que actuar cristianamente implica dejar de lado lo que nos hace disfrutar. En algunas ocasiones, esta disyuntiva es un engaño del Demonio y, en otros, una simple consecuencia del pecado original. Felizmente, sin embargo, la Catena Argentea no plantea este dilema, porque se unen en ella el placer de la buena literatura y la posibilidad de ahondar en ese pozo inagotable de cristianismo que es el cuarto Evangelio.
Si me hacen caso y leen este libro, me lo agradecerán, porque no volverán a leer el Evangelio de la misma forma. Si su párroco se lo lee, me lo agradecerán, porque se notará en sus homilías. Si se lo recomiendan a un amigo, me lo agradecerán, porque será el inicio de multitud de conversaciones interesantísimas con él. O mejor, se lo agradeceremos todos a Jack Tollers, que ha realizado esta magnífica obra gratis et amore.
29 comentarios
Sabiduría 7, 7-9:
Por eso oré, y me fue dada la prudencia,
supliqué, y descendió sobre mí el espíritu de la Sabiduría.
La preferí a los cetros y a los tronos,
y tuve por nada las riquezas en comparación con ella.
No la igualé a la piedra más preciosa,
porque todo el oro, comparado con ella, es un poco de arena;
y la plata, a su lado, será considerada como barro.
Cómo le vendas eso a tu mujer, en lugar de un collarcito por reyes, ya es cosa tuya, claro. Ahí no me meto.
Este libro que ahora voy a recomendar supongo que lo habrán leído más de uno de los aquí presentes; viene bien para ver cómo llegaron al catolicismo,o al cristianismo, algunos de los autores que Tollers expone en su obra,y lo que ocurrió luego:
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=7444
Supongo que habria problemas de copyright muy dificiles de resolver. De otro modo, ya le habria pedido que lo publicara en papel en Vita Brevis.
Aunque nada comparable a hablar hasta las tantas sobre, de y en Dios. Gracias a El, me fue concedido encontrar una persona con la que poder hacerlo, y que ha hecho de mí un mejor cristiano-dentro de lo que mi dureza de cerviz y vanidad lo permiten:)-
Falta un pequeño detalle: la teca (la moneda).
Sí, confieso que resulta de un esfuerzo considerable, sostenido a lo largo de unos cuatro años, y al final quería terminar... aunque también confieso que ahora extraño un poco la gran charla entre tantos buenos amigos. Palos porque bogas y porque no.
Igual, ya estoy abocado a otra empresa que me excede... de modo que...
Aprovecho este lugar para que cualquier lector me señale erratas, faltas de ortografía, de estilo, de lo que fuere, pues eso tiene el formato digital: se puede corregir, enmendar, mejorar y subir la nueva edición para beneficio de todos.
Gracias de nuevo.
Sursum corda.
Jack Tollers
____________
-En este asunto de mistagogia, a este personaje fui yo enviado a introducirle en la problemática de su incógnita mística; Pues dejó escrito:
-"Llegará un día en que un tercer hombre vendrá a enseñarme mi camino".
-Donde lo dedica: To my companion on the road to Emmaus, Allan Frazer. (Ver.Jesus rediscovered- 1969-Malcom Muggeridge)
-Lo que para tantos fuera un síntoma de senectud pues ya rondaba los setenta años; Tanto para él como para mi esta declaración era la misteriosa voz que él oía; y yo conocía.
-Éramos siete; Cada uno con su misteriosa exhortación acorde a nuestra legítima herencia genética.
-Fruto de la entrega total que se nos exigía cinco cayeron. Y solo quedamos dos.
- A Malcolm, reacio a apartarse de su mujer, se lo tragó la uforia de la BBC.
-
No por prurito nacionalista, sino para anotarle algún poroto a nuestra pobre patria.
Gracias Tollers. Gracias Argentina. Gracias a la Verdadera Patria -la Ciudad de Dios- que sigue viva en cada uno de los autores evocados, hayan nacido donde hayan nacido
Pulsas en el enlace que he dado varias veces en el texto (cada vez que pone Catena Argentea). Una vez allí, pulsas en "download" para el tipo de archivo que quieras: PDF, epub, Kindle, etc.
Si lo vas a leer en el ordenador, lo mejor es que pulses en el "download" que hay al lado de "PDF". Esperas un poquito y sale directamente el PDF del libro. Si quieres, lo puedes guardar en tu ordenador.
Saludos.
Este mismo regalo ya me lo hizo luis hace... vaya, ya hace, ya.
:)
Pulsas en cualquiera de las palabras que salen en azul en el texto (o aquí). Entonces, aparece una página. Una vez allí, verás que, en la parte de abajo, hay una tabla en la que salen varios tipos de archivo electrónico: PDF, epub, Kindle, etc.
Puedes elegir el tipo archivo que quieras, pero, si lo vas a leer en el ordenador, lo mejor es que pulses en el "download" de color azul que hay al lado de "PDF (good for reading on PC, or for home printing)". Esperas un poquito y sale directamente el libro.
Si quieres, lo puedes guardar en tu ordenador. Las instrucciones para hacerlo dependen de tu ordenador. Si tiene Windows vista, al pasar el ratón por la parte de abajo de la pantalla del libro, aparecerá una ventanita pequeña con varios dibujos. Hay que dar al de la izquierda de todo, que representa un disquete de ordenador cuadrado. El ordenador te pregunta dónde quieres guardarlo, le dices dónde y das a "Guardar".
Si no te queda claro, pregunta lo que quieras.
Saludos.
Gracias, Jack, seas quien seas.
Antes que nada, un abrazo y gracias por compartir con todos tus conocimientos, testimonios, locuras y ocurrencias, dios bendice todos tus dias :)
Luego, quiero pedirte el favor de ayudarme a saber el santo de mi dia, nací un 07 de septiembre, el año no es necesario, no? ;)
podrias plis?
Un saludo desde el norte del norte de mexico..
Cada día, hay muchos santos. El 7 de septiembre se celebran:
San Alpino de Chalons, - Chalons, Francia
Obispo
Santa Carísima de Albi, - Albi, Francia
Virgen
San Clodoaldo, - Nogent, París, Francia ( †560 )
Sacerdote de estirpe regia, que, asesinados sus padres y hermanos y tutelado por su abuela, santa Clotilde, se hizo clérigo renunciando al reino terreno.
San Esteban de Chatillon, - Die, Francia ( †1208 )
Monje, Obispo que, sacado de la soledad cenobítica de la Cartuja de Les Portes (Belley), presidió la Iglesia con gran diligencia y sin menoscabo de su austeridad cartujana.
Beata Eugenia Picco. Crescenzago, Milán, Italia - Parma, Italia (nació 1867 †1921 )
Religiosa, virgen, de la Congregación de las Pequeñas Hijas de los Sagrados Corazones de Jesús y de María, que, entregada al cumplimiento de la voluntad de Dios, promovió la dignidad de la mujer y se dedicó a la formación de las religiosas.
San Evorcio, - Orleans, Francia
Obispo
San Gauzlino de Toul, - Toul, Francia ( †962 )
Obispo, promotor de la vida monástica.
San Grato de Aosta, - Aosta, Italia
Obispo
San Hilduardo de Flandes, - Flandes, Bélgica (†760)
Obispo
Beato Juan Bautista Mazzucconi, - Woodlark, Papúa Nueva Guinea (†1855)
Mártir, Misionero, Religioso, Sacerdote del Instituto de Milán para Misiones Extranjeras y mártir, que después de dos años evangelizando, ya exhausto por fiebres y llagas, fue decapitado por odio a la fe.
San Juan de Lodi, - Gubbio, Italia (†1106)
Obispo
Santos Memorio de Breuil y compañeros, - Breuil, Francia
Diácono, Mártir
Santa Regina de Autun, - Autun, Francia (†286)
Mártir
San Sozonte de Cilicia, - Pompeyópolis, Turquía
Mártir
Un saludo desde Madrid, en España.
Para el caso, los tendríamos por haberlo publicado en forma digital.
El gran problema, el de siempre, es que el papel en la Argentina es carísimo para nosotros y una edición como sugieres nos saldría un ojo de la cara.
Gracias, igual, por tu interés.
Jack
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