Poemas al Sagrado Corazón
Hoy que es la solemnidad del Sagrado Corazón, propongo a los lectores que hagamos algo para celebrarlo. Mi propuesta es que compongan algún verso en su honor y lo escriban en los comentarios, para que todos podamos rezar y disfrutar con él. Y para que no me llamen Capitán Araña, yo ya lo he hecho, nada más levantarme, y más abajo tienen el pobre resultado.
Sabiendo, sin embargo, que no siempre está uno inspirado, admitiremos también poemas de otros autores, oraciones, jaculatorias, textos, anécdotas, recomendaciones, prácticas, recuerdos o cualquier otra cosa que dé gloria al Corazón de Cristo. Ánimo a todos.
Hay quien dice que la devoción al Sagrado Corazón es ñoña, espiritualista, barroca o incluso absurda. Otros se quejan de que no es tradicional. Pues bien, ante esas afirmaciones, yo, con la libertad de los hijos de Dios, me río tranquilamente y, olvidándome de la sabiduría de los hombres, pongo mis ojos en la locura de Dios, que nos dio ese Corazón abierto de par en par por la lanza de Longinos. Y allí, como diría San Juan de la Cruz, cesó todo y dejeme, dejando mis cuidados entre azucenas olvidados.
Como dice un monje, “el Corazón de Jesús es Jesús mismo".
SAGRADO CORAZÓN
Vengo en lágrimas deshecho
A pedirte, Cristo mío,
Que rompas mi duro pecho
Y colmes tú su vacío.
Vengo débil y maltrecho,
Harto ya de mi extravío,
Mas, si mi fuerza sospecho,
En tu Corazón confío.
Recordando en esta hora
Tu piedad y compasión
Por aquella pecadora,
Más allá de mi razón
Y mi conciencia deudora,
Confío en tu Corazón,
Puerta de todo perdón,
De amor, de fe y de esperanza,
Que dejó abierta la lanza.
47 comentarios
Instrucción 13, sobre Cristo, fuente de vida, 2-3 (trad. Breviario, jueves XXI semana)
«Uno de los soldados, le atravesó el costado y al instante brotó sangre y agua»
Hermanos, seamos fieles a nuestra vocación. A través de ella nos llama a la fuente de la vida aquel que es la vida misma, que es fuente de agua viva(Jn 4,10), y fuente de vida eterna, fuente de luz y fuente de resplandor, ya que de él procede todo esto: sabiduría y vida, luz eterna...
Señor, tú mismo eres esa fuente que hemos de anhelar cada vez más, aunque no cesemos de beber de ella. Cristo Señor, danos siempre esa agua, para que haya también en nosotros un surtidor de agua viva que salta hasta la vida eterna (Jn 4,15.14)... Es verdad que pido grandes cosas, ¿quién lo puede ignorar? Pero tú eres el rey de la gloria y sabes dar cosas excelentes, y tus promesas son magníficas. No hay ser que te aventaje. Y te diste a nosotros. Y te diste por nosotros. Por eso, te pedimos que vayamos ahondando en el conocimiento de lo que tiene que constituir nuestro
amor. No pedimos que nos des cosa distinta de ti. Porque tú eres todo lo nuestro: nuestra vida, nuestra luz, nuestra salvación, nuestro alimento, nuestra bebida, nuestro Dios. Infunde en nuestro corazones, Jesús querido, el soplo de tu espíritu e inflama nuestras almas en tu amor, de modo que cada uno de nosotros pueda decir con verdad: " Muestrame al amado
de mi alma" (Ct 3,3), porque estoy herido de amor. Que no falte en mí esas heridas,Señor. Dichosa el alma que está así herida de amor.Ésa va en busca de la fuente. Ésa va a beber. Y, por más que bebe, siempre tiene
sed. Siempre sorbe con ansia, porque siempre bebe con sed. Y, así, siempre va buscando con amor, porque halla la salud en las mismas heridas.
Es un texto precioso de San Columbano. Siempre me alegra el día cuando sale en el Oficio de Lecturas.
"Bruno, falta el estrambote en tu soneto ..."
Je, je. Trabajaré un poco y, mientras, pensaré en ello.
Para el que no lo sepa, Norberto es el mayor defensor de los estrambotes que ha existido y existirá jamás.
Cor Iesu, fornax ardens caritatis, miserere nobis.
(Corazón de Jesús, horno ardiente de caridad, ten misericordia de nosotros)
Cor Iesu, lancea perforatum, miserere nobis.
(Corazón de Jesús, atravesado por la lanza, ten misericordia de nosotros)
Forman parte de las letanías (en latín, en español) aprobadas por León XIII
44 Cada árbol se conoce por su fruto. No se recogen higos de los espinos, ni de la zarza se vendimian uvas.
45 El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca lo bueno, y el malo, del malo saca lo malo. Porque de lo que rebosa el corazón habla su boca.
http://www.youtube.com/watch?v=Lrb0dHKJBR4&feature=related
y al tercero vendrá la resurrección;
mientras tanto nos aguarda en el Sagrario
que vayamos a rendirle adoración,
venerando su Sagrado Corazón,
y esperando hasta que llegue el fin del mundo,
cuando juzgue lo que hicimos mal o bien;
a los malos los arrojará al infierno
y al los buenos se los llevará con Él,
transcurridos ya los días de Daniel (12,12).
"Un momento de duda. Un sueño no cumplido. Una esperanza ahogada. Un deseo alcanzado. Una alegría que difumina el resto. Subo y bajo como una violenta marea intentando no ahogarme en este mar a veces tan contradictorio, que con su fuerza me puede aniquilar. Vivo. Con la ventaja que me otorgan las canas.
Como uno más. Lágrimas y sonrisas entremezcladas que se congelan al observar su imagen; Cristo coronado por afiladas espinas. Desgarrándose en un dolor que vierte por nosotros, sus preciosas criaturas. Motas de sangre le salpican rezumando amor en su calvario. Ojos suplicantes que barruntan un final inmediato. Alzo las manos intentando alcanzarle mientras su mirada vierte perdón infinito. Me despido de su imagen inundada de fuerte energía, con la promesa de su amor eterno. Me voy satisfecha, contando con su lealtad. Me esperará. Como ha hecho siempre."
Descúbrete despacio, no me deslumbre el verte
¡son tantas las miradas que habrás ido guardando!
Revélate en silencio, sin prisa, con cuidado
de desbordar primero mi corazón rebelde.
Y muéstrame después tus ojos verdes,
la música incesante de tu canto
la dicha de ese estar así, cercano,
el amor que se crea y que se vierte.
Y deja que se mezcle con mi llanto
la sangre de tu frente
y el agua que te fluye del costado.
Ese costado abierto que, por amor, sufriente
sangra y susurra, de la cruz colgado:
“Soy Yo, mi amor, que por Amor, en ti se vuelve”
José Manuel Genovés
Con estrambote:
Descúbrete despacio, no me deslumbre el verte
¡son tantas las miradas que habrás ido guardando!
Revélate en silencio, sin prisa, con cuidado
de desbordar primero mi corazón rebelde.
Y muéstrame después tus ojos verdes,
la música incesante de tu canto
la dicha de ese estar así, cercano,
el amor que se crea y que se vierte.
Y deja que se mezcle con mi llanto
la sangre de tu frente
y el agua que te fluye del costado.
Ese costado abierto que, por amor, sufriente
sangra y susurra, de la cruz colgado:
“Soy Yo, mi amor, que por Amor, en ti se vuelve”
(Y el Malo se revuelve
Al verme rescatado por la sangre
De Aquel que por amor me dio a su Madre.)
José Manuel Genovés.
Para hacer rabiar algo al bendito Luis enemigo del barroco español que estropició a la Cristiandad según sus sesudas interpretaciones.
Pero más aún en homenaje a mis queridas hermanitas una ya fallecida y otra superviviente: ellas la rezaban, la siguen rezando cada primer viernes de més, con más devoción el viernes del Sdo. Corazón de Jesús; ellas no le hacen ascos a ninguna imagen ni estatua del Sdo Corazón de Jesús por fea, barroca, minimalista, abigarrada, desproporcionada, contrahecha, malpintada etc. que sea (algunas hay preciosas también). Tienen la fe, la piedad y el amor de los sencillos, que no se tambalea con la prosperidad o la desgracia, la salud o enfermedad, la juventud o vejez. El Señor les mira y ellas le miran y son felices.
Yo aún no la he aprendido, pero la he copiado, para que no se me pierda. En el coche canto: Jesús Confío en Tí, Nada nos separará del amor de Dios y Lo que le agrada a Dios de mi pequeña alma (para mí son jaculatorias sencillas al Cor Iesu sacratissime)
si tienes la amabilidad de añadir un salto de línea entre "estrambote:" y el primer verso, te lo agradeceré.
Un saludo.
Rendido a vuestros pies, oh Jesús mío, considerando las inefables muestras de amor que me habéis dado y las sublimes lecciones que me enseña de continuo vuestro adorable corazón, os pido humildemente la gracia de conoceros, amaros y serviros como fiel discípulo vuestro, para hacerme digno de las mercedes y bendiciones que generoso concedéis a los que de veras os conocen, aman y sirven.
Mirad que soy muy pobre, dulcísimo Jesús, y necesito de Vos como el mendigo de la limosna que el rico le ha de dar. Mirad, que soy muy rudo, oh soberano Maestro, y necesito de vuestras divinas enseñanzas para luz y guía de mi ignorancia. Mirad que soy muy débil, oh poderoso amparo de los flacos, y caigo a cada paso, y necesito apoyarme en Vos para no desfallecer. Sedlo todo para mí, Sagrado Corazón: socorro de mi miseria, lumbre de mis ojos, báculo de mis pasos, remedio de mis males, auxilio en toda necesidad.
De Vos lo espera todo mi pobre corazón. Vos lo alentasteis y convidasteis, cuando con tan tiernos acentos dijisteis repetidas veces en vuestro Evangelio: "Venid a mí, aprended de mí, pedid, llamad." A las puertas de vuestro Corazón vengo, pues, hoy; y llamo, y pido, y espero.
Del mío os hago, oh Señor, firme, formal y decidida entrega. Tomadlo Vos, y dame en cambio lo que sabéis me ha de hacer bueno en la tierra y dichoso en la eternidad. Amén.
http://caminante-wanderer.blogspot.com.ar/2008/05/multum-in-parvo.html
Gracias por el postre, digo por el estrambote ... será la hora. :)
"Hay quien dice que la devoción al Sagrado Corazón es ...barroca ..."
Sabía que sería un anzuelo irresistible :)
Creo que el athonita resume muy bien: "el Corazón de Jesús es Jesús mismo". Voy a citarlo en el artículo.
Que aproveche. Yo aún no he comido.
Un saludo muy cariñoso.
José Manuel Genovés.
Aquí va el estrambote:
Puerta de todo perdón,
De amor, de fe y de esperanza,
que dejó abierta la lanza.
Precioso tu soneto. Está claro que tendremos que convocar otros juegos florales este verano.
Me ha gustado.
"Mirad que soy muy pobre, dulcísimo Jesús, y necesito de Vos como el mendigo de la limosna que el rico le ha de dar".
Sólo con tener esto presente, se solucionarían la mitad de los problemas de la Iglesia y de cada católico en particular.
Me encantaba, pero hace años perdí o regalé el libro en el que estaba y me quedé sin ella. ¿Dará la casualidad de que algún lector tenga la misma estampa?
Consuela mi llanto con tus caricias, dame el beso que extraño de mi madre y el abrazo que ya nunca me dio mi padre, toca mi cabeza como lo hacia mi abuelo cuando volvía por las tardes, y cuida mi sueño como mi abuela cuando me enfermaba.
Ayúdame a descansar de las cargas que yo mismo me he puesto, rompe los ideales que yo mismo formé para pasarme la factura por los errores que he cometido. Lava mis pies que ya no quieren seguir caminando en este lodo interminable a los que mis ojos se van acostumbrando.
Abreme y entraré, Señor, al calor de tu amor, deja que este pobre hijo tuyo se reponga de sus fatigas, permite siquiera que toque la puerta...
¿Como? ¿No hay puerta...? ¿Tu corazón bendito no tiene puerta mi Señor? ¿Puedo entrar así sin pedirte permiso? Esperaré la luz del día guarecido entre tus entrañas de misericordia.
Muchas gracias, he disfrutado mucho leyendo ambos textos.
por mi pecado herido y traspasado
lávanos Tú con el agua del costado
y con tu sangre danos redención.
Mira este mi malvado corazón,
Atráelo hacia el tuyo, hacia tu lado,
Rescátalo del polvo y hazlo alado,
En penitente vuelo de oración.
Que ya no lata al ritmo de este eón,
Que ya no sea mío sino tuyo
Que seamos uno, uno en tu Corazón,
Pues si me dejas solo me destruyo
Y no aprovecha en mí tu inmolación,
rehundiéndote la lanza del orgullo.
precioso - y muy cierto - el estrambote, muchas gracias, de corazón, y esto no es un cumplido.
gracias por tu benevolencia. El poema me gusta, porque me admira y sobrecoge lo que significa.
Si convocas juegos florales, participaré. Pero se prudente y no hables de plazos...Por no pillarte los dedos, digo.
Un saludo.
José Manuel.
Bendice, alma mía, al Señor,
y todo mi ser a su santo nombre.
Bendice, alma mía, al Señor,
y no olvides sus beneficios.
Él perdona todas tus culpas
y cura todas tus enfermedades;
él rescata tu vida de la fosa,
y te colma de gracia y de ternura;
él sacia de bienes tus días,
y como un águila
se renueva tu juventud.
El Señor hace justicia
y defiende a todos los oprimidos;
enseñó sus caminos a Moisés
y sus hazañas a los hijos de Israel.
El Señor es compasivo y misericordioso,
lento a la ira y rico en clemencia.
No está siempre acusando
ni guarda rencor perpetuo;
no nos trata como merecen nuestros pecados
ni nos paga según nuestras culpas.
Como se levanta el cielo sobre la tierra,
se levanta su bondad sobre los que lo temen;
como dista el oriente del ocaso,
así aleja de nosotros nuestros delitos.
Como un padre siente ternura por sus hijos,
siente el Señor ternura por los que lo temen;
porque él conoce nuestra masa,
se acuerda de que somos barro.
Los días del hombre duran lo que la hierba,
florecen como flor del campo,
que el viento la roza, y ya no existe,
su terreno no volverá a verla.
Pero la misericordia del Señor
dura desde siempre y por siempre,
para aquellos que lo temen;
su justicia pasa de hijos a nietos:
para los que guardan la alianza
y recitan y cumplen sus mandatos.
El Señor puso en el cielo su trono,
su soberanía gobierna el universo.
Bendecid al Señor, ángeles suyos,
poderosos ejecutores de sus órdenes,
prontos a la voz de su palabra.
Bendecid al Señor, ejércitos suyos,
servidores que cumplís sus deseos.
Bendecid al Señor, todas sus obras,
en todo lugar de su imperio.
¡Bendice, alma mía, al Señor!
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[Versión oficial de la Conferencia Episcopal Española]
ADORO, OH CRISTO, LAS LLAGAS
DE TUS MANOS, PIES Y COSTADO,
QUE EN LA SANTA CRUZ RECIBISTE
PARA CANCELAR MI PECADO.
QUE LA PRECIOSÍSIMA SANGRE
DE TUS CINCO HERIDAS DE AMOR
ME OTORGUE SIEMPRE LA VICTORIA
EN TODA TENTACIÓN, SEÑOR.
OH DULCE CORAZÓN DE CRISTO,
ATRAE A TI TODAS LAS ALMAS
Y CONSÚMELAS EN LAS LLAMAS
DE TU ARDIENTE AMOR INFINITO.
CORAZÓN DE JESÚS,
QUE ARDES DE AMOR POR NOSOTROS:
HAZ ARDER NUESTRO CORAZÓN
DE AMOR A TI Y AL PRÓJIMO.
Este es el Corazón que por amor latía
cuando la espalda ingrato yo le daba;
y este es el Corazón que amable me esperaba
cuando mi mente no lo comprendía.
Esta es la amable entrada que Dios Hijo
dejó ya para siempre bien abierta;
y para el pecador esta es la puerta
en que halla su consuelo y su cobijo.
Este es el Corazón que sabe de ternura,
porque en amor va Cristo bien delante;
descanse aquí de su camino el caminante,
y aplaque ya la sed que le tortura.
Esta es la hermosa y muy feliz ventana
en que mirar al Cielo es concedido;
¡dichoso el pecador arrepentido,
si bebe de la fuente que aquí mana!
Amén.
Tiene sencilla melodía:
http://fraynelson.com/blog/2012/06/13/al-corazon-de-jesucristo/
Gracias, Bruno, por esta feliz iniciativa.
que tu corazón de sagrario teja flamas en mi alma,
¡oh espinas quebradas, muertas a espadas de salmos!
hincado, sepulto en mi ceguera virtual te espero,
¡oh collareja de estelas, puente de fuego, templo magno!
conviérteme,
transfórmame,
resucítame,
tú que eres la luz del mundo, brújula de extensos mares nocturnos
guía esta oveja ciega Pastor, sálvame, ten piedad de mi alma.
señor he dejado mis puertas abiertas
mi casa es Tú casa, Tú ley es mi ley, habítala eternamente,
amadísimo y misericordioso corazón de Jesús
has de mi la gracia voluntad de tus oleos
derrámame Tú Poema, obra aquí y allá el milagro.
Acelerado, aun late tu corazón
tu respirar sin ritmo, asfixiado
pendes en la cruz, así, apoyado
en brazos y pies el clavazón.
Las venas están de más, cuando
no hay sangre que transportar,
se ha derramado toda, amando
sigues, pues a eso viniste, a amar
Tu sublime e irrevocable aceptación
Palabra hecha carne y, así, mortal
ahora seco, vaciado, late tu corazón
Apenas puede seguir,ya se detiene.
No lo para el odio, no, ni el sufrimiento
solo el amor, pues solo Amor contiene
Todavía tiene un servicio que prestar
, lanceado, sangre y agua derramar
San Juan Eudes (1601-1680), sacerdote, predicador, fundador de institutos religiosos
Corazón admirable libro 9, cap. 4
«Su madre lo guardaba todo en su corazón»
Entre las fiestas de la Virgen María, la de su corazón es como el
corazón y la reina de otras, porque el corazón es la sede del amor y de la
caridad. ¿Cuál es el sujeto de esta solemnidad? Es el corazón de la Hija
única y bien amada del Padre eterno; es el corazón de la Madre de Dios; es
el corazón de la Esposa del Santo Espíritu; es el corazón de la buenísima
Madre de todos los fieles. Es un corazón totalmente abrasado por amor hacia
Dios, totalmente inflamado de caridad hacia nosotros. Es todo amor a
Dios, porque jamás amó nada más que a Dios, y lo que Dios quiso que amara
en él y por él. Es todo amor, porque la bienaventurada Virgen siempre amó a
Dios con todo su corazón, con toda el alma y con todas sus fuerzas (Mc
12,30). Es todo amor porque no sólo siempre quiso todo lo que Dios quería y
jamás quiso nada de lo que no quería, sino que siempre puso toda su alegría
en la voluntad de Dios. Es todo amor para con nosotros. Ella nos ama
con el mismo amor con que ama a Dios, porque es a Dios a quien mira y ama
en nosotros. Y nos ama con el mismo amor con el que ama al Hombre Dios, que
es su hijo Jesús. Porque sabe que es nuestro maestro, nuestra cabeza, y que
nosotros somos sus miembros (Col 2,19) y por consiguiente que somos sólo
uno con él.
"Quita de mí todo lo que está mal y todo lo que provoque que no haga tu santa voluntad,permite a tu amor puro a que se imprima en lo más profundo de mi corazón, para que no me olvide ni separe de tí"
Sta Margarita Maria de Alacoque.
"...de todo perdón,
De amor, de fe y de esperanza,
Que dejó abierta la lanza."
¿Sobran las musas o no? cuando penetra el Santo Espíritu de Dios.
https://soycurayhablodejesucristo.wordpress.com/about/las-glorias-de-maria/
Por lo demás, felicito a Bruno por una iniciativa como esta. ¿Quién dijo que había que desempolvar los Sagrados Corazones? ¿Acaso están -realmente- empolvados-?
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