Bien por Juan Manuel De Prada
Reconozco que Don Juan Manuel De Prada no suele despertar gran ilusión en mi. Le leo poco y escucho menos, pero los ecos de sus intervenciones me llegan por activa y por pasiva, aunque lo que hoy publicamos nosotros y Religión Confidencial es para ‘quitarse el cráneo’, máxime si consideramos que parte del público no eran precisamente don-nadies en la audiencia. Juan Manuel De Prada ha puesto los puntos sobre las íes a unos medios católicos que tenemos mucho de culpa en el cauce mediático que han tomado los ataques contra la Iglesia en general y contra el Papa en particular. Así pues, tras la primavera, el periodista y escritor abandonará cualquier otra actividad que no sea la de su columna. Creo que no descubro nada a nadie si digo que renunciar a las tertulias equivale a negarse un cierto sueldo que varía mucho, pero que no suele ser calderilla. Y todo en aras de despertar a los medios católicos: “La obsesión del generalismo es contraproducente".