Las buenas noticias y La Buena Noticia
Sí, ya lo sé: como periodistas, se nos inculca desde pronto que lo morboso vende, que “solo estamos para dar malas noticias”, porque al final, nadie se interesa por algo bueno que pasa. Y esa mentalidad, a veces nos arrastra a pensar que tan solo lo malo es lo noticioso. ¡Menudo contraste con el ser Cristiano!
Sobre todo porque últimamente hay bastantes cosas que merecen la pena contarse, como la Misa Pontifical del Arzobispo de Zaragoza, o como cuenta la gran web de Una Voce Málaga, las varias misas en catedrales inglesas que se celebrarán próximamente. Y es que como decía cierto cronista deportivo fallecido hace pocos años “la vida puede ser maravillosa”.
No vamos a ser ilusos, aunque tengamos toda la ilusión y razones para tenerla. Sigue habiendo Hans Küngs y varios “progresaurios” de pacotilla, pero de esos no quiero hablar hoy. Cualquiera que se hubiese quedado en coma (Dios no lo quiera) antes de Summorum Pontificum y despertase hoy puede que no notase grandes cambios a primera vista, pero vería, sin buscar demasiado, más misas en forma extraordinaria, un Papa que apoya su difusión sancionándola como una misma forma del único Rito Romano, y que encuentra en las comunidades tradicionales (tanto Ecclesia Dei como las pertenecientes a la FSSPX) un apoyo sin parangón entre el pueblo de Dios. Y que no me saquen ahora “turbobeatificaciones”, porque hasta el más cerril (que no suele pertenecer al clero, dicho sea de paso) se dará cuenta que pocos Papas han apoyado o apoyarán la unidad de los cristianos como ha hecho Benedicto XVI. Y eso sin ceder un milímetro en temas doctrinales. Ecumenismo del bueno, aunque rechine a algunos el palabro. De eso habla Su Santidad.
Pues bien, en resumidas cuentas uno puede decirse que la vida de la Iglesia vibra, y que ese impulso lo tenemos que llevar a una sociedad descristianizada. Tener Radio Marías es muy necesario, pero para que cale ese mensaje, la tenemos que sintonizar en casa o en Internet, y eso no siempre es fácil, o no siempre se quiere hacer. Creo que, por mucha Comunicación que hayamos desarrollado, la interpersonal, el boca a boca, y el ejemplo de coherencia en nuestra vida es lo que más nos hace ganar almas. No para nuestro disfrute, sino para Gloria de Dios.
Hay Buenas Noticias, que los periodistas debemos transmitir de una manera más o menos profesional -no como al que dedicaba el último post- y una Buena Noticia que todo bautizado está llamado a dar a conocer al mundo. Porque hoy vivimos en un siglo sin esperanza alguna. En el que el paro, la corrupción, el terrorismo nos preocupan… Pero en el que solo una cosa importa desde hace 2.000 años. Y llevan otros tantos intentando taparlo. Primero fue con leones, y ahora -más sabe el diablo por viejo que por diablo, ya se sabe-, con una saturación de datos que no nos importan, que nos hacen infelices, y que nos distraen de lo importante. Pero la verdad sigue siendo una: Dios ha nacido, se ha hecho Hombre, y ha muerto por tus pecados y los míos. ¿Cómo te quedas? Porque yo sigo quedándome pasmado…
Hay buenas noticias, sí. En la Iglesia más que en otros lados. Ojalá los periodistas sepamos olfatearlas antes que las desgracias que tanto nos machacan los telediarios…
+Pax et Bonum+
8 comentarios
;)
Un abrazo, Miki madrugador.
http://www.firmaporlamisa.22web.net/
¡Pásalo!
Nota del B. Esta vez y solo esta, por pertinencia... ;)
Ah, y a toda la muchachada de Juventutem Madrid, que firmen, que firmen.
Nota del B. La respuesta está en la línea que citas... Claro que sabemos PER-FEC-TA-MEN-TE, más aún que el Papa, lo que la Iglesia debe hacer ¿no? Quien será ese alemán para calzarse las sandalias de Pedro. no tiene ni idea...
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