El judaísmo ante Yeshúa, y la figura del Mesías
La reciente metedura de pata del Padre Cantalamessa (dicho sea con cariño), da pie a un debate, o por lo menos tratar un tema poco común: la figura del Mesías, y como se afronta en las distintas corrientes del judaísmo actual. Es un tema bastante apasionante, porque para nosotros, por obra de la fe, la cosa está clara. Sin embargo, el pasado jueves el blog de un amigo, Crux et Gladius, incidía en unas revelaciones privadas recibidas por un centenario rabino ultra-ortodoxo Ytzak Kaduri -Sefardita, por cierto- en las que se le habría revelado el nombre del mesías: Yeshúa.
De lo que cuenta el blog, me quedo con que las notas del rabino que, debido a su edad (106 años) no podía apenas escribir, se puede uno sorprender al leer que estaban plagadas del símbolo “+", que no se usa ni siquiera en las matemáticas para los judíos, para no confundirlo con una cruz cristiana. Poco antes de morir, el rabino Kaduri respondió a sus discípulos que no sabía por qué lo había hecho, que era “la marca del ángel".
El caso es que tenemos que entender que, lo menos desde Isaías, la figura del Mesías era para el pueblo judío una figura sencillamente política. Teniendo la ley de Moisés, poco más se puede añadir (según ellos), y el Mesías restauraría el reino davídico. Nuestra concepción es, precisamente, lo contrario: una figura que dice “a Dios lo que es de Dios, y al César lo que es del César", se separa de lo político para centrarse en lo espiritual. De todas maneras, aunque las bases de las visiones no sean extraordinariamente sólidas, resulta interesante que una corriente ortodoxa de las “oficiales” haya tenido estas convulsiones, ya que el rabino centenario era muy respetado en Israel.
Ciertamente las ramas “mesiánicas” del judaísmo son muy tardías, aunque coinciden en el tiempo con el nacimiento de las actuales ramas de esa religión. A mediados del Siglo XIX, cuajan en Europa las corrientes más liberales, que son las mayoritarias, tanto en Israel, como en EEUU, y que son las que renuncian a una personalidad física de Mesías. Un poco más tarde surge en Alemania el judaísmo “Masortí” (conservador) que es un término medio -a grandes rasgos- de la corriente liberal y la ortodoxa. No siguen toda la Torá, pero no ven impedimento en considerar al pueblo judío como nación (la idea de Sionismo, es decir, que el pueblo de Israel debía retornar a las tierras de sus antepasados). Por último, y creo que el Rabino Kaduri pertenecía a estos últimos, están los Haredí, o ultra-ortodoxos, que a pesar de ser la minoría, tiene bastantes divisiones en las que no voy a entrar.
Una radiografía de la sociedad en Jerusalén puede leerse en esta entrevista del Semanario Alba.
Nos baste considerar que ninguno de estos movimientos acepta a Jesús como Mesías, cosa que sí hace la “mini-minoría” de los judíos mesiánicos, o Hebréo-Cristianos, que casi son más en EEUU que en Israel.
Por eso que un rabino ultra ortodoxo hable de manera más o menos velada del nombre de Jesús asociado a tan magno título para los creyentes judíos es, sencillamente, revolucionario. Hasta tal punto que los herederos de la corriente han tenido que desmentir lo publicado por Israel Today, pese a la evidencia facilitada por la publicación, y que ningún diario de los más leídos de ese país ha mencionado.
Quizás esto no suponga un cambio hoy o mañana. Quizás la profecía del rabino, que sostenía que tras la muerte del ex-presidente Ariel Sharón (que aún se encuentra en coma), llegaría el mesías, no se llegue a cumplir. O quizás sea inexacta. Pero de lo que estoy seguro es que quien se tome en serio lo expuesto por el rabino, lo hará con los ojos bien abiertos a los signos de los tiempos, pues está predicho que el Pueblo Elegido reconocerá a su Mesías antes del fin de los tiempos. Que Dios pueda fortalecerlos, pues, en su Alianza, y darles siempre la fe que esta empresa requiere.
14 comentarios
Da igual que los grandes profetas siguiesen una línea de universalismo y espiritualización de la ley, línea que culminará Jesús de manera sublime. Los judíos de hoy no leen Is. 66,18: "Yo vendré a congregar a los pueblos de todas las lenguas que llegarán y verán mi gloria" ¿No se ha cumplido eso en Jesús? Gracias a Jesús -como indicaron los profetas- la religión judía es conocida hoy en todo el mundo, es decir se ha universalizado.
Desgraciadamente el único horizonte del judaismo actual -su sentido mesiánico vigente- está encerrado en los muros (incluso físicos) de la tierra prometida. Afortunadamente todavía hay judíos menos "duros de cerviz".
Ven pronto, Señor Jesús.
Creo que estas dos últimas señales ya se han empezado a cumplir desde hace algún tiempo. Y desde que conozco la existencia de los denominados "judíos mesiánicos" estoy empezando a creer en el comienzo del cumplimiento de la otra señal.
Con esta noticia que desconocía y que he leído en este blog, el asunto empieza a resultarme mucho más inquietante....
Nota del B. Es que me gusta dejar tranquila a la gente, jejeje...
De todas formas,siempre hay que estar despiertos......."vendrá como ladrón en la noche"....
El primer gran signo de los últimos tiempos es la vuelta a su tierra, cumpliendo la profecía de Jesús. Luego hay unas misteriosas palabras que el Papa Juan Pablo II dirigió a los judios, que decían que su esperanza en la venida del Mesías no es vana.
Pero ocurre que sabemos que Dios ya vino como Señor de la Paz y la Misericordia en su primera venida. Como nos lo recuerdan muy bien las revelaciones de la Divina Misericordia que acabamos de celebrar, la próxima venida del Mesías será como Señor de Justicia, un día "terrible" de Juicio para toda la humanidad. (Terrible porque no vamos a salir inocentes de él).
Entonces, yo no entiendo otra cosa que el Papa Juan Pablo se estuviese refiriendo a otra cosa que esa Segunda Venida de Cristo (sea como sea ésta).
Pero para eso, los Padres son casi unánimes en que antes debe haber un verdadero y real Anticristo en la tierra, según la cronología de los últimos tiempos porfetizados en el Evangelio.
Total, que la cosa es compleja pero desde luego interesantísima. No se puede dejar de decir que si los judíos esperan al Mesías, y antes de la Segunda Venida de Cristo, debe venir el Anticristo (que engañará a muchos), el cuadro que aparece es cristalino.
Añadir que los musulmanes tambien esperan esa venida del Mahdji o como se escriba, y que todos los cristianos tibios les encantaría un "nuevo" Jesús que relajase todos los para ellos dihosos mandamientos tan difíciles de seguir.
Antes de esperar la venida de Cristo, no olvidemos que debe venir el Anticristo, que será aceptado por la inmensa mayoría de los creyentes. Esto sí que da miedo porque volveremos a las catacumbas y esta vez en absoluta minoría.
Antes tiene que ocurrir, parece, que los judíos se equivoquen de Mesías, y acepten al Anticristo.
Nota del B. ¿Mande?
Nota del b. Para serviros, señora.
Los comentarios están cerrados para esta publicación.