La catequesis parroquial

Estimado Tomás

Como colega de Blog, he leído con atención y, a la vez, con preocupación, tu post de hoy sobre la catequesis destinada, en el itinerario o camino de conocimiento y formación en la fe (que nunca termina, creo yo), a formar a los niños para recibir la Primera Comunión.

La verdad es que, como catequista (y guía de padres de Primera Comunión) tengo una experiencia bastante distinta a la tuya.

En nuestro Arciprestazgo se sigue la Catequesis Familiar y, concretamente, en mi Parroquia, S. Juan Bosco-Sta.María del Monte Vedat (en Torrent, Valencia) la asistencia de los padres ronda, al menos, el 40-50% que participan, a la misma hora que los niños y niñas reciben su hora de catequesis (son 3 años) en una reunión, digamos, de catequesis para padres. En realidad, lo que se trata es de preparar, por así decirlo, a los padres, para que ellos sean catequistas de sus hijos.

Esta forma, por ahora, está obteniendo buenos resultados pues está previsto un 4º y un 5º curso para hacer cuando pueda ser la cosa.

Yo no sé qué tipo de catequesis lleváis en vuestra diócesis pues estoy seguro que, independientemente del interés que pongan tanto el sacerdote como los catequistas, el interés de los padres, por otra parte, podría ser más elevado.

Lo bien cierto es que, muchas veces, da la impresión de que la única intención que se tiene es que pasen los, en nuestro caso 3 años, y que también pase el día en el que los niños y niñas reciban la Primera Comunión.

Esto, en verdad, es bastante penoso para quien cree que la fe es muy importante y que no se puede dejar como quien deja una cosa aparcada y se olvida de ella hasta que, años después, la vuelve a necesitar para, por ejemplo, contraer matrimonio.

Sin embargo, te animo a seguir adelante con tal labor, tan importante, para la Iglesia católica.

Por otra parte, nosotros también hemos (ha adaptado la autora de los libros, Júlia Muñoz, editados por CCS) al nuevo catecismo "Jesús es el Señor", que ya fue presentado en Valencia el pasado mes de junio. Creo que se abre una nueva etapa en la catequesis y que, en concreto, la Catequesis Familiar (y quiero que lo consideres como una buena propaganda de ella, apostólica y gozosa) es un buen camino para seguir adelante.

Si te sirve para algo, en www.editorialccs.com podéis encontrar, en el apartado correspondiente, referencias a los textos de Catequesis Familiar que, al menos aquí, tan buenos frutos están dando.

Y, sobre todo, ánimo y adelante.

Muchas gracias, Eleuterio, por tus noticias, experiencias, direcciones webs, y animos para trabajar por el Reino de Dios, que es lo que por vocación hacemos los sacerdotes de Cristo.

Conozco la tierra valenciana en gran medida. Es otro mundo diferente al andaluz. Por aquí abajo existe una "religiosidad social" que la expreso en mi articulo, pero es pura superficie, es un barniz malo que se cae con el paso de los años.

En la parroquia trabajamos en la linea de la catequesis familiar, tal como tu apuntas, pero la respuesta sigue siendo poca y pobre. La cultura del andaluz es muy baja y por consiguiente la responsabilidad sobre la educación de hijos, jóveens.....

Esto sigue siendo una gran tierra de misión. En este esfuerzo todos los dias nos empeñamos, curas y laicos, para que nuestras raíces no se aparten de la semilla del evangelio de Cristo.

Mi experiencia como catequista (bueno, ex-catequista ) es similar a la del blogger o peor. La comunión es un acto social en el que abuelos, tíos y demás compiten en regalos, gasto obsceno y modelitos. La catequesis es un penosoy aburrido requisito. Una vez acabada la ceremonia final, no se les vuelve a ver. Siempre hay excepciones: el 15% sigue viniendo, aunque de manera regular sólo un 5% más o menos.

La experiencia mía no ha sido muy grata a los padres no les gusta ir a la reuniones con los catequistas a no ser que se hable de flores, videos o si su niña lee. A post comunión vuelven muy pocos y si al menos los llevaran a Misa los domingos no sería tan grave pero no lo hacen y si que los llevan a hacer deporte, viajes etc con lo cual el chico piensa que lo de la religión no es tan importante. y que esa etapa acabó
También es triste que haya catequistas que piensen que sólo es un símbolo o un recuerdo.

Entonces vamos a ver. Después de la gran masa de llamados católicos y que acuden en gran número para que sus hijos lleguen al puerto de la celebración com bombo y platillo de su primera comunión.
¿Que pasaría si se diera cerrojazo nos quedaramos los cuatro que estamos en autentica comunidad de fe, y se exigiera un autentico compromiso de pertenencia al cuerpo de Cristo?
Tendriamos valor para hacerlo? a los primeros cristianos les valió, y de esa santidad que emanaban vinieron los frutos de todo tipo de gentes que querían pertenecer a la iglesia y recibir al Señor, eso sí despues de que la comunidad ratificara que su deseo venía de Dios y estaba en él.
Una bonita historia verdad?
Pues ala solo queda buscar la santidad en el trato con esa legión de católicos alejados que usan a la iglesia como a una escoba pues para nada es reciproco lo que reciben que lo que dan.
Gracias Señor por darnos elementos de santificación. Alabado sea tu nombre y que Dios reparta paciencia y gracias por doquier.
Un saludo y animo para catequistas desanimados.

Cada dia escribe usted mejor. Le felicito por este realista articulo sobre un asunto tan actual como es la religiosidad de careta que tiene la Iglesia de hoy, que debería exigir más y no permitir que se haga teatro con sus sacramentos.

Disiento con usted un poco. Creo que la Iglesia no debe seguir haciendo siempre lo mismo.

Le sigo sus comentarios. Me parece bien. Los curas deberían mojarse más en las nuevas tecnologías. No cambie sus constantes vitales de compromiso en su blog.

A la gente le falta el don de Piedad por eso no persevera sino que se aburre, pero ese don -junto con todos los demás- no se recibe en clases de catecismo ni en la predicación sino que es menester recibir la efusión del Espíritu Santo.
No sé para qué está sirviendo el movimiento carismático en la Iglesia Católica; deben de pensarse los obispos y/o los párrocos que es una chorrada pasándose por el forro las indicaciones de los papas al respecto pero es el Espíritu Santo el que convierte a la gente y ninguna otra cosa. Como se sigue ofreciendo una fe que es mero discurso la gente se va porque sin un encuentro personal con Dios todo te resbala. Lógico y natural.

es verdad lo de la comunion , lo que dice tomas , sobre todo en los pueblos deandalucia interior , el nivel cultural es muy bajo, la mayoria somos analfabetos funcionales
se hace la comunion en un 95% por costumbre cuesta ya mucho alos padres matricular nuestros hijos en moral catolica

hya que hacer algo, evangelizar alos padres, y temarnos los cristianos mas en serio la moral catolica
LA PALABRA RELIGION TIENE SENTIDO PEYORATIVO AQUI EN LA ZONA , PORQUE , NO DECIMOS MORAL CATOLICA

CLASES DE MORAL CATOLICA ,
HAY QUEAPRENDER A USAR UN LENGUAJE NUEVO EH
NO DEBEMOS DECIR ENSEÑANZA PRIVADA --------DIGAMOS ENSEÑANZA CONCERTADA O ENSEÑANZA SOCIAL
PRIVADO SUENA A ELITISMO EN FIN PERDONEN MI OSADIA - PERO SOY DEL PUEBLO LLANO DE ANDALUCIA

Manu, preguntas:

"""¿Que pasaría si se diera cerrojazo nos quedaramos los cuatro que estamos en autentica comunidad de fe, y se exigiera un autentico compromiso de pertenencia al cuerpo de Cristo?"""

Pues te lo digo. ALgunos curas de mi zona lo intentaron, pero reconvenidos desde el obispado y recogidos en mi parroquia, donde un cura del opus aceptaba a todo el que viniera rebotado de otras parroquias "más exigentes".

Se suponía que el cura del opus era también alguien "exigente"; pero no: tenía un carguillo diocesano, tenía que cumplir unos objetivos en la diócesis, unos porcentajes, unas cifras para enseñar en las estadísticas eclesiales. De hecho le vino bien para su promoción exhibir esas cifras.

Parece que con los medios se queda muy bien si se dice que en tu diócesisi hay muchas comuniones, muchos bautizos y muchos bodorrios. Se celebrarán en la Iglesia, pero son ceremonias mucho más paganas que el rito funerario del que hoy nos habla el blogger en su post de fecha de hoy.

Yo no soy catequista de comunión, mi tarea en la parroquia es de preparación a los padres que vienen a bautizar a sus hijos. Como vosotros, anécdotas pintorescas sobre padres a los que sólo les interesa la fiesta social tengo un saco. Y muchas veces me he planteado eso de "cerrar el grifo", y lo he discutido con los curas de la parroquia.
Al final, tras mucho discutir sobre si los niños se bautizan en la fe de la Iglesia, si su madurez en la fe se verá o no truncada, si la gracia del sacramento es o no eficaz y para qué sirve, mi sensación es que al que le falta fe es a mí.
No tengo fe en que el Espíritu Santo pueda coger la miserable semilla que yo dejo en esa gente y convertirla en una gran planta, a la que la gente pueda acudir a refugiarse en los malos tiempos que nos aguardan.
Quizá convendría que siguiéramos la máxima de San Francisco: "Comienza haciendo lo que es necesario, después lo que es posible, y de repente estarás haciendo lo imposible".

Mi experiencia con las catequesis son muy negativas:

-Obligación para los jóvenes de estar DOS AÑOS para confirmarse. Me pregunto si los franciscanos eran tan exigentes en el bautismo de indios. Parece que importa más el tiempo que el contenido.
- Catequistas que son jubilados o jóvenes entusiastas, pero que apenas hablan de la tradición y de la doctrina de la Iglesia, de als cofradías... Te puedes encontrar elogios a teólogos como Küng o Schillebeeckx, o propuestas de modelos como Martin Luther King.

Aconsejo que se cambie el método.