La X de la renta con Federico y César de fondo
Hoy ha comenzado la campaña de la X en los impresos de la declaración sobre la renta de las personas físicas. Los diferentes medios de comunicación nos lo recordarán en vallas publicitarias, cuñas de radio, anuncios de televisión, página propia en internet…Con esta campaña la Iglesia de España desea, por lo menos, llegar a la cantidad de dinero recogida el año pasado o más, ya que esto supone que el 0,7% al colocar la X en la casilla correspondiente pase al sostenimiento económico de la Iglesia. Es la conocida como asignación tributaria que cada ciudadano que desee lo hace libremente en su propia declaración.
Desde ayer he paseado y leido los varios comentarios a la noticia definitiva de la salida de Federico y César de la Cope, algo que ya habíamos dado por hecho en El Olivo. Algunos comentaristas apuntan directo: No pondré nunca más la X en la declaración de la renta. Otros amenazan con pensarselo.
Cuando el 14 de abril, el mismo Federico hablaba de su situación en Cope después de su conversación con el director general, apuntó claro y alto que no se mezclaran los asuntos y rogó a la audiencia que nadie se “vengara” no señalando la X en el casillero correspondiente del impuesto de la renta. Lo repitió varias veces aquella mañana por el micrófono.
Por esto, la nota emitida ayer por la Cope fue inoportuna en el tiempo y en el momento, ya que en plena campaña de la renta y en la víspera de que monseñor Algora, obispo de Ciudad Real, encargado de organizar el asunto de la asignación tributaria pusiera en marcha la campaña publicitaria, le esta produciendo un flaco favor.
Todavía los directivos de Cope no se han enterado que, por lo menos en internet, una nota como esa, que se podría haber sacado a finales de junio, no ayuda a la Iglesia, sino todo lo contrario. Lo que sí hizo la empresa radiofónica fue cortar, desde el inicio, los comentarios a la nota sobre Federico y César, pero el resto de portales digitales colocaron y siguen teniendo abiertos los comentarios, donde se puede leer de todo.
Nosotros terminamos invitando al lector a que ponga la X en el impreso de la renta. Es un acto libre tanto para el católico como para el que no lo sea. Y nunca debemos mezclar las churras con las merinas, porque luego pasa lo que pasa.
Para saber más: http://www.portantos.es/
Tomás de la Torre Lendínez
8 comentarios
La Iglesia es nuestra madre y nuestra casa, nuestra comunidad, el lugar donde celebramos los sacramentos, oramos y nos mostramos nuestro amor fraterno. El dinero que va a la Iglesia lo damos porque es NUESTRA OBLIGACIÓ sostenerla, no del estado, del ministerio o del pito del sereno, ES NUESTRA, DE LOS CATÓLICOS ESPAÑOLES. Y no sólo la m****a que damos a través del IRPF. Todo católico tiene la obligación de dar el diezmo de sus beneficios (cuando menos) a la Iglesia o a organizaciones sociales católicas.
Lo que ocurre es que en este país somos unos ratas, unos hipócritas y unos malajes. Mucho largar y vocear y protestar por todo, pero cuando se trata de rascarse el bolsillo o arrimar el hombro, si te he visto no me acuerdo.
Lo siento, todo este tipo de dicusiones ("no marco la X porque sigue Losantos", "no marco la X porque se va Losantos") lo único que trasluce es la ínfima catadura moral y el desconocimiento sobre lo que es la Iglesia del que lo dice. Bien sabía Cristo con quién se jugaba los cuartos cuando llamaba a sus discípulos necios.
A un católico -vamos a decir- normal, ¿se le ocurriría dejar de marcar la X a favor de la Iglesia por la salida de FJL de la COPE, por mucho que le guste tal locutor? Dáos cuenta... Losantos es perro viejo en esto de los medios. Obviamente, la nzar la soflama, varias veces y en días distintos, de que a nadie se le ocurra dejar de marcar la casilla por lo que está ocurriendo, es transmitir el mensaje a sus seguidores de que hagan exactamente eso. ¿O acaso pensáis que le importa algo a este señor la X de la Iglesia? El liberaloide se moriría por desamortizarnos y ponernos la mordaza...
Desde luego que muchas veces me dan ganas de no marcar la casilla, cuando veo lo que hace las Iglesias nacionalistas vasca y catalana, cuando oigo a monseñor Martínez Camino decir sus habituales tonterías, cuando asisto a "Misas" esperpénticas por la homilía o por la patada a la liturgia..., pero son sólo cabreos pasajeros. Ahora bien, ¿dejar de hacerlo porque Su Eminencia Rouco -todo un sesentayochista- gusta de contratar al deslenguado Losantos? Ni hablar.
Hasta hoy nos chupábamos el dedo. Y ahora que disponemos de este líder semántico de las esencias lingúísticas. ¿qué hacemos?. Si Torquemada dice algo, ¿la verdad será lo contrario?. Si las iglesias vasca y catalana son nacionalistas, ¿no serán centralistas?, si Martínez Camino dice tonterías, ¿no será un genio?, si las misas son esperpentos, ¿no serán canónicas?, si Rouco es un sesentayochista, ¿no será tradicionalista?. ¿Qué haría Torquemada si estuviese en nuestro lugar?. No podemos saberlo y Torquemada no puede ayudarnos por mucho que diga si dice lo contrario al decirlo.
No podemos atravesar la cuestión y hallar la verdad de las palabras por vía lógica pero en el lenguaje también cuenta la vía afectiva. La metodología de Torquemada es el cabreo, que se cabrea Torquemada o que no se cabrea Torquemada. Si está cabreado es verdad pasajera y si se toma un calmante es falsedad por ahora. Y así este grotesco Humpty Dumpty puede seguir dando la tabarra con lo que se le vaya ocurriendo. Si Torquemada habla, ¿no se estará chupando siempre el mismo dedo?. Si nos fijamos bien en su disparate es imposible saber si Torquemada pondrá o no pondrá la cruz de ayuda a la Iglesia. Parece que sí, pero será que no. O insinúa que no y resultará que sí. Cuánta indecisión. Lo más probable es que espere a ver lo que FJL marca en su declaración de la renta y haga lo contrario de lo que se le ocurra en ese momento. Yo voy a marcar la casilla y paso de Torquemadas.
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