Ganan los salesianos, siguen los dominicos y faltan los jesuitas en la C.T.I.

Uno de los frutos del Concilio Vaticano II fue la creación de diversos organismos consultivos.

Uno de ellos fue en actuación de la propuesta hecha por la primera asamblea ordinaria del Sínodo de los Obispos, el Papa Pablo VI, el 11 de abril de 1969 instituyó, en conexión con la Congregación para la Doctrina de la Fe, una Comisión Teológica Internacional, aprobó ad experimentum su Estatuto y designó sucesivamente a sus miembros.

La función de la Comisión es ayudar a la Santa Sede y especialmente a la Congregación para la Doctrina de la Fe a examinar cuestiones doctrinales de mayor importancia.

La Comisión se compone de teólogos de diversas escuelas y naciones, eminentes por ciencia y fidelidad al Magisterio de la Iglesia. Los miembros —en número no superior a 30— son nombrados por el Santo Padre ad quinquennium a propuesta del Cardenal Prefecto de la Congregación y tras consulta con las Conferencias Episcopales.

La Comisión se reúne «en asamblea plenaria» al menos una vez al año, pero puede desarrollar su actividad también por medio de subcomisiones. Los resultados de los estudios son presentados al Santo Padre y entregados para su oportuna utilización a la Congregación para la Doctrina de la Fe.


Con el Motu Proprio «Tredecim anni iam», del 6 de agosto de 1982, el Papa Juan Pablo II promulgó los estatutos definitivos de la Comisión.

Ayer el Papa Benedicto XVI nombró a teólogos de diversos países para renovar la Comisión Teológica Internacional. Uno de ellos fue el español Javier Prades López, de la facultad de San Dámaso de Madrid.

Pero, mirando la lista con interés se encuentran los siguiente datos:

- La presencia de tres padres dominicos, uno de ellos como secretario de la Comisión.
- La presencia de cuatro padres salesianos, de la Sociedad de San Juan Bosco.
- La presencia de dos mujeres.
- El resto son docentes de otras órdenes y congregaciones religiosas.
- Destaca la ausencia de ningún padre jesuita.

Conclusiones

1.- Se afianza la presencia de los padres salesianos. La SDB, que por Roma es traducido por: Soy de Bertone.
2.- Se mantiene la Orden de Predicadores, los dominicos.
3.- A mí personalmente, me duele la ausencia de los padres de la Compañia de Jesús, pues todos los profesores que tuve en la Universidad fueron jesuitas.
4.- La pobre presencia femenina en las ciencias teológicas. ¿No habrá más?,o ¿serán otros motivos?.
5.- La sonora ausencia de laicos. ¿Es que la teología solamente la hacen los curas y los frailes?, ¿por qué no existe ni un sólo laico en la lista?.

Le deseamos a los nuevos miembros de la Comisión Teológica Internacional un buen trabajo a lo largo de los cinco años para los que han sido nombrados por el Papa.

Tomás de la Torre Lendínez