Creo en la enseñanza diferenciada

Leo en InfoCatolica que el fracaso escolar aumenta en la enseñanza mixta y pública, con respecto a la diferenciada.

Europa Press/InfoCatolica) El fracaso escolar es seis veces más bajo en la educación diferenciada que en la pública, según explicó hoy el director del Instituto Tecnológico Educativo de la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE), Mariano del Castillo, en las II Jornadas de Educación Diferenciada que organiza esta asociación.

Así, en declaraciones a Europa Press, afirmó que mientras en la educación diferenciada las cifras de fracaso escolar se sitúan en el seis por ciento de los alumnos, este porcentaje asciende al 36 por ciento en la educación pública y al 16,6 por ciento en el conjunto de la educación privada, por lo que consideró estos resultados favorables al modelo educativo en el que niños y niñas estudian en colegios separados como “abrumadores".

Además, según sus datos, en el caso de los chicos, el fracaso escolar se eleva hasta el 52 por ciento en la educación pública, mientras que en la diferenciada se mantiene en el seis por ciento y en la educación privada en general es del 22 por ciento.

“Se está gestando una gran bolsa de fracaso y esto explotará", auguró del Castillo que, aún así, aclaró que ellos, desde CECE, no quieren “imponer” la educación diferenciada, sino que se pueda educar “en libertad". “No atacamos a la educación mixta, pero decimos que no es racional oponerse a algo que funciona", añadió".

Llevo muchos años dando clase en la enseñanza pública mixta. Cada curso el fracaso escolar aumenta, más en los chicos, que en las chicas. Por mucho que las leyes educativas impongan la educación mixta, esto es un completo fracaso. Crea una dosis de abandono escolar antes de llegar a cuarto curso de la enseñanza secundaria obligatoria muy grande.

Los analfabetos funcionales que dejan los centros públicos son una masa de seres humanos, que son considerados mano de obra barata. El curso que hemos acabado, las autoridades educativas, para paliar en algo esta situación, han ofrecido la opción a examinarse a todos los mayores de 18 años para la obtención del graduado en secundaria. El número de presentados ha sido abrumador. Hasta personas con cuarenta años, llegaron un sábado por la mañana se examinaron y, practicamente la mayoría absoluta, aprobó más por misericordia y bondad que por méritos y justicia.

Cada curso, todos los profesores lo notamos, los que ingresan en la ESO tienen unos niveles bajos, bajos….que cuando entramos los profesores tenemos que bajar los niveles de las asignaturas a las situaciones de los alumnos, y esto produce que un centro de secundaria se convierte en una prologación de una primaria pobrísima y carente de contenidos.

Más tarde, llega la presencia de las clases de refuerzo de las asignaturas troncales, y la intención de los dirigentes educativos de que no se muestre el fracaso escolar de forma palmaria.

Notamos que las chicas avanzan mucho más que los chavales. Ellos mismos, sobre todo en el primer ciclo de la secundaria, demuestran su “envidia” a ellas que les ganan en buenos resultados por goleada. Algunos, más avispados e hijos de profesores, llegan a decirnos que les gustaría estar separados de las niñas. Y a los que escribimos sobre este asuntos nos dan portazos, codazos y otras lindezas irreproducibles.

El asunto está en el debate de la educación en España. A los colegios privados que tienen la enseñanza diferenciada por sexos se les condena al ostracismo, pero los padres saben donde poner a sus hijos y lo hacen a costa de dejarse parte de la nómina de uno de los dos, padre o madre, que trabajan en donde sea.

Algún día se impondrá la verdad. Y volverá la enseñanza diferenciada, sin estar perseguida ni ser mirada como un sector impio. La realidad se legislará de otra forma.

Tomás de la Torre Lendínez