La telaraña en la Iglesia
La telaraña andaluza, como titula Pedro de Tena, sus magnificos artículos sobre el régimen socialista andaluz en Libertad Digital, se extiende como un manto negro a todos los rincones posibles. Ahora es el diario ABC, descubridor del caso de las “facturas falsas", quien nos presenta que una mujer de 55 años es recusada a formar parte de un jurado “por ser lectora de ABC". Ya no existe ni la libertad de leer el diario que se desee. Y nos preguntamos: ¿Dónde esta la ministra andaluza de igualdad para prohibir semejante atropello contra la igualdad entre hombres y mujeres?. Para quitar el anuncio de las “croquetas de la Puri” estuvo muy ráuda, ¿dónde habrá ido la ministra Aído?.
También por la Iglesia en Andalucía se extiende la telaraña del régimen socialista. En los pequeños pueblos los curas conocen cacicadas de alcaldes del régimen que callan por el bien de la unidad del rebaño eclesial a ellos encomendado por el obispo diocesano. Algunos de estos asuntos están relacionados con el sistema del voto cautivo a través del dinero del antiguo PER, ahora llamado de otra forma.
Algunos obispos están tragando saliva y callando como muertos. Uno, un tanto mediocre y asustadizo, recibió antes de las pasadas elecciones municipales a la junta directiva de una asociación de vecinos de un barrio nuevo, llena de personas vinculadas al régimen. En la conversación le amenazaron con moverse para quitarle a la Iglesia el solar para la nueva parroquia, y convertirlo en una sede de servicios sociales. El obispo asustado, en cuestión de cuatro meses nombró al nuevo párroco de un solar. Así se silenció a la vociferante asociación de vecinos.
En varios pueblos, las obras que los curas necesitan hacer en sus templos o complejos parroquiales, suelen darle la obra a empresarios miembros del socialismo imperante para evitarse problemas con los permisos de obras de los ayuntamientos y conseguir que el IVA desaparezca de la factura, y se pague de otras maneras.
En estos casos los laicos miembros de los consejos de pastoral de la parroquia son meros convidados de piedra o testigos complacientes de unos desafueros que solamente existen en Andalucía. Y la telaraña sigue tejiendo sus redes. La libertad no existe ni en la sociedad ni en la Iglesia.
Tomás de la Torre Lendínez