Las víctimas del franquismo no son iguales a las victimas del terrorismo etarra
De aquellos polvos, llegan estos lodos, reza el refrán castellano. Hubo un hombre al frente de los destinos políticos de España. Tenía cuatro abuelos. Solamente recordaba a uno fusilado durante una guerra incivil como son todas las guerras. Perseguido por el fantasma del abuelo, aquel hombre suministró su manía persecutoria, su afán de desenterrar muertos, su guerracivilismo, a todos los ciudadanos legislando una desmemoriada ley de la memoria histórica.
Con dinero abundante, 25 millones de euros en cinco años, surgieron herederos similares al del abuelo fusilado, se crearon comités, gabinetes, colectivos, asociaciones de la recuperación de la memoria histórica, quienes mamaron de esos dineros para conseguir sus fines, en algunos casos inconfesables o inexistentes.
Al cambio de gobierno por medio de las urnas, los amamantados de aquellas ubres ubérrimas piden más dinero, igualándose a las victimas del terrorismo etarra, conocedores de los tiempos de recortes de gabelas que estamos y estaremos durante el tiempo que ha de menester.
La equiparación, que hacen los engordados con la economía generosa de la memoria histórica, con las victimas del terrorismo es absolutamente inmoral porque aquellos proceden de una guerra civil, en tercera o cuarta generación después de 75 años, y éstos vienen de haber perdido hace pocos años a sus familiares más queridos a manos de unos asesinos en la actual generación.
Seguramente, el gobierno actual, recibirá pronto una petición de ayuda económica a los descendientes de todos los muertos en las guerras donde han participado españoles en los últimos doscientos años. Las guerras carlistas, las campañas en Marruecos, la guerra de Cuba y Filipinas dejaron muchas viudas y huérfanos, y, ahora sus descendientes legítimos deben bucear en los archivos y podrán exigir las indemnizaciones correspondientes.
Por lo tanto, es inmoral esa equiparación. Las victimas del terrorismo no fueron soldados en un frente de guerra. Eran simples ciudadanos que iban a su trabajo, estaban en la puerta de un cuartel, compraban en unos grandes almacenes o dormían placidamente en sus casas, y unos hijos de mala madre les pegaron un tiro en la nuca o les mandaron a la otra vida con un bombazo pegado a los bajos de un coche.
Desde aquí invoco al sentido común y a dejar de usar esta terrible arma de igualdad de victimas, porque no llegaremos a ninguna parte.
El valor que no tendrá este gobierno nuevo será derogar la ley de la memoria histórica, lo mismo que todas las que han colgado en un techo de ingeniería social y marxista en los últimos siete años de locura nacional.
Una vez más la derecha española y sus complejos dejará pasar el asunto para que duerma el sueño de los olvidos, que volverán a salir cuando llegue la izquierda de nuevo al poder. Y entonces, que Dios nos pille confesados.
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Tomás de la Torre Lendínez
9 comentarios
El primero es un criminal asesino. El segundo una victima completamente inculpable e inocente.
Y no se puede equiparar jamás, a la víctimas con feroces verdugos.
Los primeros merecen memoria, dignidad, y respeto. Los segundos desprecio, cárcel ( a ser posible de por vida ) y restitución de daños. Más de 850 personas han sido asesinadas por el terrorismo de ETA, y quienes han sido responsables de esta tremenda feroz y criminal historia española no puede en ningún momento escribir el final de esta inmunda e inhumana banda etarra.
Estamos felizmente a lo que parece el final de ETA y este inevitable final ha sido gracias a toda la sociedad española y sobre todo a las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, a la democracia, a los jueces y a las leyes, a todos ellos es a los que se debe la implacable derrota de ETA, Y son las victimas las que en especial merecen una amplia reparación y resarcimiento y "tributo" ciudadano de eterna y momorable recordación. El final lo deben escribir siempre las víctimas.
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Estas muertes y bestiales y criminales asesinatos, producidos por ETA, no tienen nada que ver con la promulgada ( hace ya cuatro años )e inícua e
infame de la mal llamada " Ley de Memoria histórica ".
Ley 52/2007, de 26 de diciembre, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la Dictadura. Y que fue promulgada pro el socialismo rencoroso y atroz de ZPARO.
El PP y diversos medios de comunicación de carácter conservador criticaron duramente estas iniciativas alegando que abren viejas heridas. Otros medios llegan a afirmar que con estas acciones, Zapatero pretende " ganar la guerra civil que se enterró y superó gloriosamente con la TRANSICIÓN y pretende establecer la legitimidad democrática en en el año 1931, no en el año 1978" (Luis María Ansón, 4/10/2005).
Dicha inícua ley ha conseguido ahondar las diferencias entre los españoles, resucitar odios ya caducados y reabrir unas heridas que estaban cicatrizadas desde hace mucho tiempo. Todo ello porque su espíritu está presidido por un afán de revancha que falsifica completamente y de manera radical el proceso histórico en sintonía con necesidades políticas abusivas y hasta erradas que nada tienen que ver con la verdadera Historia.
La modélica Transición Española hacia la Democracia curó, perdonó y cerró con un abrazo entre hermanos todas las diferencias políticas pasadas y de todo órden y circunstancia.
El rencoroso anterior Gobierno socialista y sus infames socios parlamentarios asociados, crearon la FICIÓN MUY EQIVOCADA, de que el sistema político vigente enlaza con la presunta legalidad de la II República, soslayando el VERDADERO origen de la presente situación. Y en algún aspecto se lograron reproducir determinados caracteres sectarios y totalitarios de dicho régimen republicano que han amenazado con renovar y aún revivir otra vez alguno de los más desgraciados episodios de nuestra historia contemporánea.
Zanjada ya dicha pretensión en las urnas el pasado 20 de noviembre, pensamos que no habrá REGENERACIÓN y RENOVACIÓN posible de España, sino logramos salir pronto de la profunda crisis en que se encuentra nuestra nación (y que va mucho más allá de lo económico, pues es fundamentalmente ética y moral ) si —entre otras medidas— no se procede a la puesta en marcha de los cauces parlamentarios que permitan la INMEDIATA DEROGACIÓN de la MUY mal llamada Ley de " Memoria Histórica ".
Y volver con rapidez y de nuevo al espíritu de la Transición, de la hermandad, de la perdonación y del abrazo social; y para siempre olvido de antiguas rencillas entre hermanos ya de nuevo juntos y unidos en un esfuerzo común no como antes enfrentados y separados.
El gobierno del señor Rajoy debe proceder inmediatamente a derogar esta inícua ley.
Además, para evitar una continua inercia y recaidas en los criterios aplicados en este terreno, se deben dar todos los pasos necesarios para que los usos públicos de la Historia común sean objeto de una Legislación de acuerdo con lo que ocurre en los países de nuestro entorno más civilizados y avanzados, de manera que las iniciativas gubernamentales al respecto queden completamente al margen de las consignas de los partidos y de la política y no se permita ya NUNCA MÁS, una restricción a las libertades públicas que vaya más allá de la protección de los derechos de la verdad, de la dignidad y del honor.
Es necesario cerrar y para siempre las heridas producidas por la incivil guerra del 36 y con una eficaz y permanente cicatrización.
Dando como antes y de nuevo ejemplo al mundo de responsabilidad, hermandad, respeto, tolerancia y amor entre hermanos de cualquier respetable ideología que respete naturalmente y en TODO la Constitución y las Leyes.
Eso será el mejor y más relevante proceso final y feliz.
Lo malo de los tópicos, es que lo que no parais de repetirlos, al final os los creeis.
No sabe lo que dice y lo que dice lo dice mal.
Estudie Historia verdadera en libros competentes y no en los errados falsificados y sectarios.
Para criminal y genocida la herejía marxista que asoló España y a su santa Iglesia y fué vencida por el General Franco con la Cruz de Cristo, en el campo de batalla ( la primera vez que un General venció al comunismo en el mundo ) una CRUZADA alabada y bendecida por los Papas de la santa Iglesia Católica de Jesucristo.
En las guerras, siempre hay vencedores y vencidos.
Y felizmente los españoles decentes supimos derrotar a la infecta herejía marxista leninista con las armas en la mano. " Pues media España no se resignaba a morir ".
Y usted y los suyos, no son para nada unas victimas, sino unos simples VENCIDOS.
Perdieron esa guerra y ya NUNCA jmás la podrán ganar.
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Y en cuanto a la ETA, lea a Jon Juaristi que domina el tema.
" El nacionalismo tiende a la endogamia estricta porque es racista», denuncia Juaristi. Como ETA, que «surge del franquismo vasco; es una evolución de fuerzas nacida dentro del régimen del franquismo en el País Vasco para conseguir la INDEPENDENCIA de España. Los padres y fundadores de ETA formaban parte de los vencedores de la guerra ", " y ETA además nació en las sacristias con el mismo fin totalitario y segrecionista ".
Culturicese.
Respetuosos saludos.
Por cierto, la contestación social que tenía el franquismo era ínfima, limitada fundamentalmente a grupúsculos de carácter marxista o anarquista, y por lo tanto no democráticos.
Creo que todos haríamos bien en clarificar el concepto de víctimas del franquismo. Evidentemente hubo gentes que fueron injustamente asesinadas por ser de izquierda. Nadie creo que a estas alturas lo vaya a negar. Me parece correcto que estas personas que sufrieron este tipo de injusticias obtengan una reparación al menos moral.
Sin embargo no es menos cierto que algunas de las personas que se nos trata de mostrar como víctimas del franquismo, fueron autores de delitos terribles, incluyendo entre estos delitos violaciones y asesinatos con terribles torturas. Muchos de ellos presumieron de sus delitos ante multitud de testigos, poco después de haberlos cometido, cuando las cosas no les iban del todo mal en la guerra y pudieron ser acusados ante tribunales con bastantes pruebas en su contra. Cierto es que hoy en día aborrecemos la pena de muerte, pero cabe recordar que este tipo de administración de justicia que hoy nos parece tan triste, estuvo vigente en muchos países europeos hasta los años 70 del siglo XX. Así que en los años 40, en la mentalidad que tenía la gente, se veía correcto que una persona que hubiera realizado crímenes espantosos, fuera ajusticiada.
De hecho no deja de ser curioso que muchos izquierdistas republicanos vieran con buenos ojos el ajusticiamiento de Agapito García Atadell, que fue capturado por los nacionales en las Islas Canarias, cuando se disponía a llegar por barco a América, para disfrutar del botín que había obtenido con sus delitos realizados durante la Guerra Civil, en la Zona Republicana... delitos que fueron por otra parte ampliamente ensalzados, justo hasta el momento en el que Agapito huyó con el botín al extranjero.
Es de destacar que García Atadell "sufrió" una brutal crisis espiritual tras su detención, que le llevó a recibir todos los sacramentos en vísperas de su ejecución. Pero eso es otra historia.
Para no alargar más el post, me gustaría añadir que nadie parece haberse acordado de un tipo de víctimas de la República: Los republicanos víctimas de los republicanos. Es una desgracia que cuando se pudieron haber hallado los restos de Andreu Nin, se pusiera tierra sobre ellos. Y también es una lástima que nadie haya condenado desde la izquierda la desaparición del profesor Robles, traductor al español de Dos Passos. Evidentemente no quiero poner como víctimas de la República a personajes republicanos que pudieran haber cometido delitos contra la república (si es que hubo alguno de ellos condenado), pero aunque tampoco en este caso serían equiparables a las víctimas del terrorismo, no deja de ser significativo este silencio tan brutal sobre ellas.
Pongo estos argumentos para que se comprenda mejor el por qué de las gafas de ZP y de las de otro montón de españoles, estén en el bando que estén.
Mi argumento no es un juicio, es una REFLEXIÓN. Quiero que nos demos cuenta de que no podemos anteponer nuestros problemas o nuestros intereses a los de la colectividad porque estaremos incurriendo en una falta grave y Dios no nos podrá dar su bendición.
Este señor nos ha llevado, con el fanatismo que le inspiró la promulgación de la “Ley de Memoria Histórica”, a:
1.- Despilfarrar un presupuesto muy necesario para ayudar a los menesterosos de las capas sociales marginales, nuestros prójimos. Suyos también.
2.- Desempolvar la vieja postura de los dos bandos enfrentados, derechas e izquierdas.
3.- Crear una situación, ya dormida, de odio al franquismo porque nacieron muchos jóvenes después de 1975.
4.- Volver a los ataques furibundos contra el catolicismo.
5.- Apoyar y respetar a cualquier otra confesión.
Esta injusticia la ha cometido por ambición humana, buscar los votos que le permitieran instalarse eternamente en el poder. Para conseguir su objetivo practicó, de manera permanente, la MENTIRA, el ABUSO de AUTORIDAD, el DESPILFARRO, la INJUSTICIA y el USO PARTIDISTA de los mecanismos del ESTADO.
Los no creyentes se olvidan de leer la Biblia, o se ríen de sus mensajes. Un creyente sabe que Dios no permite los desmanes y que más tarde o más temprano pagamos por ellos. La situación que vive ahora es fruto de ello.
Limpiemos los cristales de nuestras gafas todos los días, al levantarnos, y estoy seguro de que lograremos ver las realidades sin pasiones y sin mentiras.
Buenos días y feliz domingo.
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