Entre prudentes y necios anda el juego

El evangelio de este domingo nos habla de las doncellas necias y de las prudentes. Las primeras acudieron a esperar al esposo sin aceite suficiente en las alcuzas. Las prudentes sí llevaron el necesario. Cuando llega el novio las prudentes entraron al banquete de bodas. Las necias se quedaron dando porrazos en la puerta y desde dentro nadie las conocía.

Hemos vivido casi ocho años con necios. Hemos sido gobernados por necios. La mediocridad se ha convertido en la reina de todas las instituciones humanas y hasta cristianas. Los prudentes han optado por vivir escondidos o, si han salido al palenque del debate social han sido tachados de retrógrados y han pillado algún tajo en la cara cuando los aceros han salido de sus fundas.

Nuestros obispos, en sentido solitario y diocesano, han optado por encerrarse en una penosa prudencia, buscando congraciarse con los necios mandamases, quienes les han puesto una cara por delante y otra diversa por detrás.

La prudencia penosa de los obispos españoles se ha visto un poco arrinconada, cuando se han juntado con sus hermanos en el episcopado, bajo el paraguas de la Conferencia Episcopal Española. Cuando se escriba la historia de estos años zapaterinos, se verá que los documentos firmados por el episcopado completo español son débiles y circunstanciales, ya que había que llegar a celebrar la JMJ de agosto pasado y la prudencia aconsejaba la mudez prudencial al precio que fuera.

Los sacerdotes, en general, salvando algunas pocas excepciones, han tenido el silencio prudente de pensar que ya pasarán estos años donde los necios han gozado de los mejores escaparates y luces de neón para mostrar sus chifladuras que han rayado en la estupidez más absurda y mediocre.

Algún clérigo imprudente ha bailado el agua a los necios de turno, quienes le han pagado con honores epigráficos y de coleccionismo medallero, sospechando que nadie se daba cuenta de que estaba jugando con una baraja marcada con descaro, que, antes o después, será un freno para un posible turbovuelo a cotas más altas.

Los laicos cristianos, desbordados por los acontecimientos, son los que han soportado el peso del día y del bochorno en el laboreo de compromiso eclesial. Se han encontrado con la soledad del corredor de fondo llegando hasta las mismas puertas de los tribunales de la Unión Europea defendiendo a sus propios hijos.

Los pocos esforzados que tenemos desenfundada la espada, tampoco, hemos sido tan valientes como parece. Hemos podido hacer más. Hemos debido jugarnos más el tipo. Hemos nadado entre dos aguas. Hemos huido y rechazado la polémica de la palabra y el gesto prudente. Los necios han sacado la espada con más agilidad y nos han dado un buen tajo, que ahora llevamos cosido en la piel, como un trofeo por la defensa de los valores del Reino de Dios y por la libertad de los hijos de la Iglesia Católica.

He podido hacer más. He sido un imprudente y atolondrado. El Señor me juzgará y me pedirá cuentas. Ya lo está haciendo estos días.

Tomás de la Torre Lendínez

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Adivinanza

Hace tres días ha sido atacada la página Web de la diócesis de Coria- Cáceres. La han dejado inutilizada. Ya están trabajando para su salida a la Red mañana lunes. En el obispado nadie busca los motivos del ataque.

¿Podrían, ustedes, suponer algunos motivos para semejante ataque a la Web del obispado de Coria-Cáceres?

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Lean, si les apetece:

El programa ‘religioso’ de los partidos: miedo, prohibiciones y cambio de vacaciones

Blog del padre Tomás

http://tomas-de.blogspot.com/2011/11/el-programa-religioso-de-los-partidos.html

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