La dimisión dentro de la Iglesia Católica
Dimitir en la Iglesia no es verbo demasiado usado. Ahora, deja su cargo al Papa quien le ha aceptado la dimisión, el arzobispo Marchetto, secretario del Consejo de los migrantes.
Durante el pasado agosto, monseñor Marchetto afirmó verdades como puños con respecto a la politica de expulsión de gitanos llevada a cabo por el presidente de la República Francesa, tierra de la igualdad y de la libertad y la fraternidad.
Más tarde sus declaraciones fueron matizadas por otras personas del Vaticano.
Todo el proceso de esta dimisión está contada ampliamente pulsando aquí.
Este dimisionario arzobispo se dedicará a la investigación histórica. No es mala decisión. Así desea seguir con sus publicaciones sobre el Concilio Vaticano II. En el silencio de la investigación aprenderá a amar el silencio, una de las claves para estar en un cargo vaticano.
Tomás de la Torre Lendínez
3 comentarios
Muchas veces el contraataque, no es la mejor defensa; El momento no pedía ser necios sino humildes.
¿Se han separado de sus funciones los pederastas y consentidores? Lean y mediten el Evangelio.
Mira torpe, el escasísimo número de pedófilos y los que han preservado su presunción de inocencia, si es ellos a los que te refieres con insultos tienen de media entre 80 y 90 años los que viven así que poco se les puede separar de sus funciones.
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