Crónica del estreno del misal. ¡Gracias, D. Javier!
Desde que llegó a la parroquia la nueva edición del misal romano, allá por diciembre, he de decir que lo he venido leyendo y hojeando con mucha frecuencia para conocer esta edición, familiarizarme con los textos y repasar las rúbricas.
Vaya por delante lo grato de la encuadernación y presentación. Es de esos libros amables para el tacto, buena letra, cuidada edición y apertura cómoda, que no siempre. Las pestañas cuidadísimas, aunque uno tiene que echar un rato para aprenderse bien cada cosa.