Necesito un cura - Y postdata muy importante
Suena el teléfono y aparece en la pantalla un número desconocido.
- Dígame.
- ¿Es usted D. Jorge?
- Sí, dígame.
- No sé si se acordará de nosotros, soy Pepita Garcifernández, de la parroquia de X. La verdad es que nosotros nos acordamos mucho de usted, no se crea.
- Huy, sí, cuantísimo sin saber de vosotros. ¿Qué es de vuestra vida?
- Pues nada, todo bien. Le llamo porque la niña se casa el mes que viene y siempre hemos dicho que nos gustaría que esa boda la oficiase usted, porque, a pesar de tanto tiempo, seguimos teniendo un recuerdo estupendo de cuando fue nuestro párroco.

Es una palabra que utilizo mucho en el confesinario y en la dirección espiritual. Creo que se trata de vivir con normalidad la vida que nos ha tocado y punto.
Las primeras reacciones ante León XIV han sido buenas. Las cosas como son. Curiosamente, contra lo que hubiera sido previsible, parece que hay una gran satisfacciòn entre los católicos que, en términos humanios y políticos, llamaríamos de tendencias conservadora, y un pretendido entusiasmo, posiblemente disfraz de la decepción, de los que podemos designar como más primaveralmente sinodales.