InfoCatólica / De profesión, cura / Categoría: Sin categorías

9.02.15

Acabo de regresar de China

Oportunidades que aparecen una vez en la vida. Así que a China. Un barullo de cosas en la cabeza. Por tanto me van a permitir unas notas a vuelapluma como si fueran pequeños flashes pescados al momento.

Quizá el primero la sorpresa al conocer que nos habían denegado el visado de entrada al país en un primer momento.  La razón es que viajábamos nueve sacerdotes juntos y temían que fuéramos a evangelizar. Caramba cómo están las cosas… ¿Apertura religiosa? Ninguna. Basta ver la noticia que aportaba ayer mismo Infocatólica.

China es puro pragmatismo. Gato blanco, gato negro… lo que importa es que cace ratones. ¿Se trata de mejorar la vida de los chinos? ¡Pues que viva el capitalismo más liberal! Y si políticamente sirve un régimen dictatorial comunista, pues también.

Leer más... »

30.01.15

Niños adoradores

Hoy va la cosa de preguntas y experiencias. Cada vez que acudo a una parroquia, me traen un boletín parroquial, conozco un sacerdote, lo que sea, pues uno intenta fijarse en cosas para ver si hay algo que pudiera resultar interesante.

Sé que en varios lugares, tanto en España como en Hispanoamérica, hay grupos de niños adoradores, en algunos casos casi bebés, porque me cuentan que desde los cuatro - cinco añitos algunos participan, que por lo visto están dando un resultado pastoral importante.

La parroquia de un servidor, a pocos días de cumplirse el segundo aniversario de la capilla de adoración perpetua, no cabe duda de que es una parroquia muy sensibilizada hacia la adoración del Santísimo, y por tanto entiendo que en ella deberíamos fomentar de manera especial este don de la adoración eucarística en todas las edades.

Leer más... »

28.01.15

Gran éxito del inicio de la coral parroquial. ¿Alguien se apunta a cantar con nosotros?

Ya he dicho muchas veces, sigo con ello, que la forma que tiene uno de mover la pastoral de la parroquia es simplemente la de uno, y que si lo voy contando es por si a alguien le sirve alguna cosa. Yo al menos, cuando voy a una parroquia para concelebrar, una reunión, de visita o lo que sea, me fijo en todo. Hay cosas que al verlas me digo: “anda, qué buena idea” y miro si en mi parroquia serviría. Otras cosas quizá me sirven para lo contrario, porque a lo mejor uno se estaba pensando algo y al verlo realizado te das cuenta de que no, de que no era eso.

La vida parroquial normalita ya sabemos lo que es: celebraciones sacramentales y de oración, catequesis para todas las edades, atención a los pobres y hacer que la comunidad se mantenga unida y viva.

Para mí el reto es mantener la ilusión de la comunidad y andar cada día, además de intentar que lo básico vaya lo mejor posible, buscando hilitos para tirar de la gente. Es decir, inventar para ver cómo se consigue que venga ¡uno nuevo! o que alguien más pasivo se comprometa al menos algo en la vida de la Iglesia.

Leer más... »

27.01.15

Aquella cunicular expresión

El lenguaje es más equívoco de lo que parece. Cuando un español viaja a Hispanoamérica, y hablamos todos español, sabe que ha de andarse con sumo cuidado con las cosas que dice. La más mínima frase hecha, la aparentemente más inocente comparación, lo que en España es una simple broma, en algunos países es altamente ofensivo y palabras en la península completamente inocentes en algunos países son expresiones de lo más soez. Todos tenemos mil anécdotas.

Con perdón de un lado y otro del charco, y por poner un ejemplo, en Hispanoamérica, en general, no tiene mayor connotación ni especial problema utilizar la expresión “jodido”. En España es algo muy fuerte. Al revés, en España se puede perfectamente ir de culo, cosa que dicha en tierras hermanas supone una grosería de las gordas.

Leer más... »

26.01.15

Rafaela: no me pienso casar con él

¡Qué insondables los caminos de Dios! ¿Quién conoce su mente? ¿Qué criterios utiliza el Padre Dios para llamar a un hombre al sacerdocio?

Evidentemente no se fija en la altura física, porque desde los dos diez de don Crisanto, hasta el uno cincuenta de don Fermín anda que no caben curas, y todavía alguno habrá que aún se salga de esos parámetros. Si de orondez, qué vamos a contar. Algunos gorditos, lustrosos como un chotito recién mamao que decían en el pueblo. Otros más flacos que Tizona del Campeador. Los hay de grandes melenas y otros calvos como remates de comulgatorio. Más guapos que un angelito de Murillo y feos como una desafortunada caricatura de Picio.

Leer más... »