Tengo que ser capaz. Ese es el primer y fundamental error

No al pelagianismo

Todo es gracia

Las librerías católicas están infestadas, tal como usted lo indica.
He querido informarme mejor hasta qué punto la archifamosa "autoestima" puede tener un "rostro cristiano".
He encontrado informaciones totalmente contrapuestas en internet, y ningún libro que aborde el tema desde un punto de vista católico.
¿Dónde puedo recurrir para profundizar en este tema?
¿Algún documento que ayude? ¿Alguna sección del Catecismo?
Demasiada autoayuda nos ha desviado del camino del cristiano, y como mínimo estamos lleno de pelagianos en la Iglesia.

Ramvel hay una cierta aproximación rigurosa y cristiana no tanto a la autoestima como al rechazo de una antiautoestima que en la mayoría de los casos más que verdadera humildad es orgullo herido que frecuentemente nos impide abnegarnos en el camino de la santidad. En lo moderno Jacques Philippe es un autor muy conocido y sano que aborda estos temas. También Amadeo Cencini; del Aquinate y San Agustín sin embargo, para los que saben, se pueden sacar nociones muy buenas para una psicología de trasfondo cristiano, de suyo útil en un marco más amplio de acompañamiento espiritual.

Pelagianismo, infectado de doctrinas de la nueva Era.

Una falsa religión, llena de herejías, mandamientos y doctrinas de hombres. La vieja tentación de la serpiente: "por vosotros mismos llegaréis a ser dioses".

Pues no, somos cristianos por la Gracia de Dios.

Romanos, 8,28-30
Sabemos, además, que Dios dispone, todas las cosas para el bien de los que lo aman, de aquellos que él llamó según su designio.
En efecto, a los que Dios conoció de antemano, los predestinó a reproducir la imagen de su Hijo, para que él fuera el Primogénito entre muchos hermanos;
y a los que predestinó, también los llamó; y a los que llamó, también los justificó; y a los que justificó, también los glorificó.

En el buen puñado de años que llevo en la barca de Pedro, me ha sido muy dificil entender como se pueden tratar problemas de caracter personal y concreto.

Hablamos de la gracias santificante, de la vida del cristiano,... pero en la práctica ¿ como llevar eso a cabo ? ¿ Cual debe ser mi forma de hablar a los demás ? ¿ Como mi forma de escuchar al cura en la homilía ? ¿ Como la forma de tratar al compañero de trabajo ?

Necesitamos supuestos prácticos.... o al menos yo.

Lo ha clavado. Porque entonces ¿para qué ha venido Jesucristo?

Padre, usted está pidiendo a gritos un máster en Puesta en Valor de la Gestión e Implementación de Sinergias Transversales.

Luchemos a brazo partido contra el pelagianismo, pero sin olvidar la regla 17ª para sentir con la Iglesia (San Ignacio de Loyola): «No debemos hablar tan largo instando tanto en la gracia, que se engendre veneno, para quitar la libertad. De manera que de la fe y gracia se puede hablar cuanto sea posible mediante el auxilio divino, para mayor alabanza de su Divina majestad, mas no por tal suerte ni por tales modos, mayormente en nuestros tiempos tan periculosos, que las obras y el líbero arbitrio reciban detrimento alguno o por nihilo se tengan».

la fuerza de la gracia de Dios.

Otro paso en la buena dirección es que algunas parroquias, tal vez demasiadas, se dejen de organizar charlas de charlatanes psicólogos, pseudo psicólogos o apoyadores emocionales y, no digamos nada de los ¡¡talleres!! de meditación yogui (no la del oso sino la del "kung-fu" con starring David Carradine).
Por cierto, puedo entender que muchos curas y muchos obispos no conocen a los autores clásicos de la teología o filosofía cristiana por cómo estarán montados los seminarios y sus programas, pero creo que sería bueno que se empezara a divulgar desde el púlpito, sí, desde ese mismo lugar desde donde muchos curas y no pocos obispos nos cuelan la doctrina ecologísta, nazionalista, relativista o buenista, repito, que se empezaran a divulgar los autores que verdaderamente riegan con su savia, y sabia reflexión, la Palabra del Evangelio. Alguien debería empezar a exigir esa difusión.
No es de recibo que todo un Chesterton, al que ya están pidiendo una beatificación, sea un desconocido para esta supuesta mejor formada generación. No digamos ya de todo un Josef Piepper, de una Santa Benedicta de la Cruz o un Dietrich Von Hildebrand. Pero bueno, no hace falta de buen principio irse tan lejos: basta empezar a recomendar a Santa Teresa, a San Juan de la Cruz etc., etc.

¡Ah, qué hermosa fogata se podría hacer con tanto material que apesta las librerías "católicas"! ¡Benedetti, mi compatriota! Mare de Deus. Perdonen pero estas cosas hacen aflorar al espíritu de Turrecremata.

Saludos cordiales.

Es la forma de disolver a Dios en la vida de los hombres. Si yo puedo, si yo tengo que ser capaz, ¿para qué la oración de petición y de acción de gracias?
Pero no nos olvidemos que este tipo de formación viene de muy lejos, Pelagio sembró la semilla y la formación católica en muchas ocasiones la ha regado. No se ha sabido predicar La Gracia, D. Jorge es una excepción que se agradece. Recomiendo vivamente el libro de Gracia y Libertad del Padre Iraburu. En este mismo portal de InfoCatolica se puede descargar gratis.

Mauri,
Tenemos un muy buen libro de instrucciones para todo lo que tiene que ver con ser cristiano. Lo que pasa es que no lo consultamos. No entiendo por que leemos revistas, novelas, libros técnicos, de economía, de tantos temas y no leemos apenas el Libro que habla de nosotros, que nos dice quiénes somos, de dónde venimos y a dónde vamos...
Como puedes ver en cualquier blog de Infocatolica tienes mucha información adecuada y veraz, puedes preguntar, comentar etc.
Pero lo que no puede hacer nadie por ti es que vayas a la fuente y bebas, primero tienes que conocer bien no sólo el catecismo sino todo el Nuevo Testamento. Cada día pide ayuda y consejo a Dios, lee los evangelios y las epístolas con atención, entonces pregunta concretamente lo que no entiendas a sacerdotes y personas conocedoras de las Escrituras y fieles a la buena doctrina. Sobre todo ten en tu mente y en tu corazón a Dios y dialoga interiormente con El, te asombrarás de cuántas maneras te responde y te ayuda. La vida Cristiana es una aventura llena de alegrias, de sorpresas, sentido del humor y milagros, el Señor está resucitado y sigue haciendo maravillas.
Haz caso de lo que te digo porque nos ha funcionado muy bien a muchos que estábamos como tú llenos de preguntas sin respuesta porque la pregunta estaba mal planteada.
Hoy mi oracion va por ti.

Si por ahi tuvimos una libreria "catolica" que llego a izar un trapo lgtb el año pasado pues ya podemos imaginar que clase de libros venden en ciertas "catolicas" librerias como esa.

Padre Jorge:

Wayne Dyer, Coelho, Gibrán, Benedetti...

¿Me puede dar el nombre de cuatro autores de fiar?

A poder ser, contemporáneos, como ellos.

Mi vida religiosa consiste fundamentalmente en que a las noches tras la Misa y el Rosario, pongo cara de bobo ( facultad para la que estoy particularmente dotado) y decir:

"Señor: Tú lo sabes todo. Ten misericordia de este calzonazos."

Que bien sabe desvelar los temas candentes actuales; y lo mejor es el enfoque tan acertado por ajustarse a la moral catolica a la Tradición y al magisterio. Gracias porque son focos de luz en medio de este panorama tan confuso que nos envuelve

Los que leen libros de verdadera espiritualidad cristiana desentonan entre tanta espiritualidad nueva era y autoayuda. Cuando ven que andas algo de Santa Teresa de Jesús o de San Juan de Ávila por ejemplo, se te quedan mirando como a un bicho raro.

En España nos han bombardeado los últimos meses del año pasado con un anuncio del nuevo modelo de Audi A4. un familiar denominado Avant Black Line Edition, Este era su texto:

Te dirán que te atrevas a vivir: "es ahora o nunca", te dirán. "Sigue tu instinto". No, no, no: "sigue tu estrella". Te hablarán de caminos inexplorados, de deliciosas rutinas. Te dirán que salgas ahí fuera, que tú eres el protagonista de tu vida: "sé tú mismo", te dirán. Te hablarán de inconformismo, de vanguardia, de descubrirlo todo,... >>
Y el anuncio termina diciendo, tras una breve pausa dramática: "Blah, blah, blah" (con hache, que es más despectivo).

Ahora, interprétese en "Catholic mode": ¿a que suena a cristiano preferentista de los pobres, adepto a la INP y seguidor asiduo de Religión Digital?

Pues también logran resumir en 20 segundos a toda la New Age, los ecofriendly, los compiyoguis, los reikis, y demás patulea.

mauri

Iba a hacer un comentario en la linea que indicas, y mas o menos, lo veo como tú.
Como creyentes, no se puede negar el hecho de la gracia de Dios (que es la acción del Espíritu santo); pero si nos metemos en lo concreto, a la hora de tomar decisiones, hacer opciones importantes, tener que lidiar con problemas complejos, hacer o dejar de hacer, relacionarte con la gente (y según que gente) y como hacerlo........yo muchas veces creo que estoy solo y todo lo que hago o dejo de hacer o decir (aún teniendo principios morales claros) lo tengo que asumir y pagar yo solo.
¿Quizá falta de fe? Puede ser, sin duda. Pero esa presencia de ese Dios que nos ama con locura, yo no siempre la percibo con fuerza y nitidez, que quereis que os diga.

Lo mio es fe pura y dura, muchas veces sin ver, ni entender, en una noche oscura, esperanzada, pero oscura. Y tambien considerando que se me tienen que caer todavía muchos "palos del sombrajo", mucho "mirarse al ombligo" que hay que dejar de lado.........quizá por ahí pueda ir entendiendo muchas cosas que no entiendo.

Ave María Purísima. La "Tasa Mariana" abonada D. Jorge. Me da a mi que ha dado Ud. en el clavo, y ha elaborado en sus últimas frases toda una tesis; el volver a lo inicial, que es lo principal la Gracia, oiga. Aquello del "Nada sin Dios" se ha sustituido por el "Yo" en lugar de Dios. El recibir uno el Don de la Gracia de Dios, parece que no tiene sentido cuando la autosuficiencia, aparente claro, lo llena todo. Sólo un pequeño detalle, basta con fijarse en los "porque yo" pronunciamos al día. No cultivamos la humildad suficiente como para suplicar, pedir a Dios lo que realmente es bueno y necesario, exigimos que Él nos de esto o lo otro, y ¡ay si no nos lo da!, pataletas como niños caprichosos. Ya no me "ajunto" porque no me escucha...
Pero realmente, ¿sabemos lo que le pedimos? No nos damos cuenta que todo don es una liberalidad del que dona, y no podemos exigirle nada. Humildad y me repito, reconocimiento de nuestra posición de simples hombres, aproximarnos a la comprensión de la infinitud de Dios. Es difícil comprender la situación de Dios respecto del hombre y del hombre en su inferioridad respecto de cuando pensamos que Dios es nuestro igual, y las palabras de "hermano" "amigo" no ayudan precisamente si no se aclara que Él es Dios y tú simple mortal, no lo eres, por eso nos refugiamos en nuestra autosuficiencia, en ese decirnos a nosotros mismos que estamos por encima de Dios, o pretendemos dejarle al margen. Como se ve la soberbia sale a relucir y como siempre, es mala consejera.

Suele ser un poco injusto para la persona que sufre o está en un trance de su vida que debe afrontar, contraponer su experiencia de dolor a la concepción teológica indubitable de la gracia de Dios. Como dijo Borges en un famoso poema a Jesús crucificado: ¿de qué me sirve su sufrimiento, si yo sufro ahora? (ciudadseva.com/texto/cristo-en-la-cruz/).

Desde este desencuentro de partida se abren todo tipo de confusiones. En primer lugar, no podemos exigirle la fe a quien no la posee, pues es un don de Dios. Es cierto que podemos cultivar las disposiciones del alma que propician esa recepción, pero no podemos esperar que todos sean capaces de ello. Hay, pues, que saber ayudar a quienes no creen.

En segundo lugar, se da una confusión enorme entre madurez psicológica, madurez moral y madurez espiritual. Son ámbitos distintos, aunque todos estén directamente relacionados en cuanto a la experiencia de sufrimiento, superación y aceptación de ayuda. Lo perfecto sería que en estas tres dimensiones se fuera maduro, pero lo cierto es que ello ocurre pocas veces o no siempre.

En tercer lugar, Dios lo puede todo, sin duda; pero actúa en cada uno de un modo para nosotros misterioso. La gracia de Dios es ininteligible para la mente humana. Y lo ininteligible, cuando a su vez es sumamente poderoso, nos llena de zozobra y angustia. Es cierto que la fe ayuda a superar estas lógicas incertidumbres, pero ante el sufrimiento no todos poseemos los mismos recursos para afrontarlos, comenzando como dije antes por la propia fe.

Así, pues, sugeriría más humildad en los juicios para opinar sobre las situaciones personales del alma atribulada. Hace casi treinta años acudí a la ayuda de un psicoterapeuta psicoanalítico. Yo entonces era un joven ateo sumido en la peor de las desesperaciones; mi sufrimiento poco tenía que ver con lo que yo pensara sobre la existencia de Dios. Y aunque mi primer analista murió a los pocos años de iniciada la terapia, sentó los fundamentos que hicieron posible mi vida posterior. Me convertí gracias a su influencia (el terapeuta era católico), me casé por la Iglesia, me hice a su vez psicólogo psicoterapeuta; y aunque no he podido abrirme camino apenas en mi profesión (no sólo por razones ideológicas o morales -la profesión está pésimamente administrada y dirigida-), he comprendido que se puede ayudar mucho a muchas personas sin exigir requisitos que hoy apenas nadie cumple, comenzando por la fe.

Dios quiso que llegara a conocerle por medio de un psicoanalista católico ("¡Oh escándalo!" "¡Sea anatema!"...). Y esto, creo, también es gracia. No le pongamos puertas al campo de la acción de Dios.

Dicho todo lo cual, en efecto, en vuestras críticas hay mucha verdad, que yo comparto. Simplemente no seamos maximalistas, pues Dios se vale incluso de esta tremenda confusión para sacar bien.

Pues hoy en dia, dentro de la Iglesia, por supuesto, hay quien se burla de la frase última que vd. cita, ''soy cristiano por la gracia de Dios''. Siempre opiné que todos esos libros no tienen nada q ver para ser cristiano. Como siempre me pareció una chorrada que en un grupo de oración, hubiese que practicar ejercicios de.yoga e inspiraciones lentas para entrar en oración. Por supuesto que no volví al grupo. Hoy ya no se sabe q inventar para hablar.con el Señor . Me alegra que denuncie esas chorradas.
Hacen falta muchas Aves Marias
Dios te salve Maria, llena eres de gracia....

A veces una no dice "tengo que ser capaz" pero, si ante una adversidad sale airosa, los demás creen que eres capaz y que tienes un aura fetén. Eso me da mucha rabia porque el encanto se rompe si dices que tú no puedes nada, que no sabes por qué te tomas las cosas así y que tu buen humor viene, no del dichoso aura, sino del mero Cielo, que diría un mexicano. Entonces tuercen el gesto y creen que tienes visiones o algo así. Vamos que sin ir al psicólogo y sin libros o clases de autoayuda, sin ejercicios budistas, espiritistas, reiki y cosas así no puedes tener equilibrio emocional. Vamos que la Providencia y el estar en manos de Dios no ayudan, que hay que probar otras cosas. ¡Que les den! (Perdón, Padre). Haddock, tienes toda la razón.

D. Jorge,

“Lo de soy cristiano por la gracia de Dios, hay gente que lo mira y no lo entiende muy bien por culpa de la época de las pesetas rubias y del nacionalcatolicismo, lo asocian sin querer y como que no lo ven claro”

Lo de esforzarse en ser cristianos, mucha confusión viene de los curas y monjas que se empeñaban en un ascetismo rarillo para meternos en cintura y nos castigaban si no éramos capaces de seguir las normas. Eran tiempos aquellos en que exigían cosas impensables ahora que todo vale, pero reminiscencias quedan.

Querido D. Jorge:
Cuando lleguen los ordenadores cuánticos y sigan sin explicarse la inteligencia sin tener en cuenta que somos hijos de Dios, llegará la Parusía.
Sin su gracia somos nada.
In Domino.
NB: ¿Qué tal el nevazo de hoy? Estará preciosa la Sierra.

Creo que todo se ha hecho mal. Como san Ignacio, hay que ir a la contra, agere contra: gracia de Dios, sacramentos, meditación, rosario, indulgencias... y la salvación del alma como "summa lex". Incluso habrá que volver al latín y al misal de Trento. Y mejor parroquia que hablar de comunidad.

"Buscad el Reino de Dios y su juaticia; TODO lo demás se dará por añadidura" San Mateo 6;24-34

Y se le puede añadir uno de los últimos slogans (con perdón por el palabro) de la CONFER: "ser artífices de la realidad". Inmejorable. ¡Qué derroche de ingenio tras profunda reflexión evangélica!

Don Jorge, aun que me pese, la Iglesia ha hecho cosas mal. Si no, a que se deben esas publicaciones? a que se debe que las Iglesias estén vacías? a que se debe que la plaza de San Pedro en Roma esté con tan poca asistencia? etc. A mi parecer es culpa de la dejadez de muchos curas, de la poca espiritualidad de Obispos y de no hablar claramente de Dios, de no cumplir escrupulosamente los Mandamientos. Solo nos faltaba la indeterminación de la Amoris Laetitia.
Ave Maria.

P. Jorge:
Dice que usted que, a la hora de hacer el examen de conciencia, " no sirve de nada el contrastarnos unos con otros" y que mejor la dirección espiritual. De acuerdo, pero hoy en día es muy difícil encontrar directores espirituales en la línea del blog de hoy, y con los que se pueda llevar una dirección en persona, y no a través de los medios (preguntas en radio, . ¿Tiene usted abierto el cupo para nuevos feligreses ávidos de entregarse a la dirección espiritual?
Un saludo.

Para Gonzalo:

Un buen autor contemporáneo: Jacques Philippe

https://www.todostuslibros.com/autor/philippe-jacques

Iba a escribir algo pero ya lo dice Elvira. Jacques Philippe. A mi es la lectura que más me ha ayudado para aprender a vivir confiada en la Gracia. Pero es un tema complicado para quien "siente" que todo depende del esfuerzo de uno mismo, y ¡claro!, se pasa el día pegándose cabezazos contra la pared. Hay que leer y volver a leer lo que dice Jacques Philippe y ponerlo en práctica.
Hay textos del Evangelio que me ayudan especialmente: " Sin Mi no podéis nada", "Todo lo puedo en Aquel que me conforta", " ... te basta mi gracia porque la fuerza se perfecciona el la flaqueza, ..., Por eso, con sumo gusto me gloriaré más todavía en mis flaquezas, para que habite en mí la fuerza de Cristo, ..., pues cuando soy débil, entonces soy fuerte."

Doiraje coincido con tu comentario , trabajo en salud también . quisiera comunicarme contigo.

doiraje coincido en tu comentario , trabajo en salud , quisiera comunicarme contigo.

Ramvel, te recomiendo "La autoestima del cristiano", de Míchel Sparza

Hola, Miguel Tomás.

Me alegro que coincidamos. No sé cuál es tu profesión en el campo de la salud, pero fíjate cómo está el patio... Afuera de la Iglesia nos ven como bichos raros; y dentro... ya ves. Es difícil trazar un camino coherente en este entorno.

Desde aquí ruego a D. Jorge que te proporcione mi correo electrónico.

Muchas gracias, D. Jorge.

- - - -
Jorge:
Hecho.

Martinna,

Agradezco tus expicaciones y oracion.
Pero te pongo un ejemplo: cuando uno confiesa y después comulga, ya podemos decir que está en gracia de Dios. ¿ Significa eso que tiene respuesta para todo ? Pues no. Significa que oyendo todos los programas de Radio María y leyendo todos los geniales post de infocatolica lo sabe todo de todo, pues no.

La ICAR, a lo largo de la historia, siempre ha vuelto a los padres, a la patrística, como forma de renovación, sí, renovándose volviendo a cargar "agua" en las fuentes. En cambio, ¿ puede Dios sacarnos de la mediocridad y darnos sentido profundo de las cosas ? Sí, pero faltan ejemplos prácticos.

Roberto,

Gracias por tu post. Coincido mucho con él. El abandono en Dios para vivir de la gracia santificante puede ser la solución a muchas cosas. Pero ¿ como hacerlo si algunos no tenemos la fe de un grano de mostaza ? Sólo nos queda perseverar.

Cordiales saludos a ambos.

¡Pues a mí que no me quiten la "mindfulness" ésa que nos llega "ex oriente"!, pues menudas siestas que me echo acomodado en esos butacones reclinables: sólo se necesitan tres requisitos (3) para caer en los brazos de Morfeo, a saber: 1.- cansancio físico; 2.- música reiki (o cualquiera otra no estridente), pero el gorjeo pajaril mezclado con el cadencioso discurrir de las aguas cristalinas, ayuda sobremanera; y "the last but not the least" 3.- haber pasado una noche de perros.
¡Y además, no requiere "ser muy capaz", sólo dejarse llevar......................!
No sé si me salido del tema, creo que sí. Usted, P. Jorge, me sabrá perdonar: ¿tres avemarías?.

Una sociedad muy profunda la que estamos formando....

Buff...a mi me ponen de los nervios algunos anuncios...El que propone el "yoísmo! (el egoísmo de toda la vida...) me hace cambiar de canal de lo que me repatea....

Mauri,
He buscado esto por si te vale mejor
El susurro de una brisa suave"
Como el susurro de una brisa suave es la oración, el momento de diálogo con Dios. A veces con criterios que no son de Dios, más bien, del mundo, esperamos que la respuesta del Señor ante nuestras peticiones o largos ratos de oración sobre algunos asuntos, sean muy visibles con signos claros, y algo fuerte como para darnos cuenta en medio de nuestro tan atareado ritmo cotidiano, en donde muchas veces nuestra relación con el Señor queda en segundo plano.

La primera lectura del día de ayer Domingo, día del Señor, nos da una buena lección sobre este asunto, que creo será una buena pauta para vivir en esta semana. En el libro I de Reyes, hacia el capítulo 19 (19, 9a. 11-13a, para ser exactos), el profeta Elías había llegado ya al monte Horeb, y es en donde le fue dirigida la palabra de Yahveh: "Sal y ponte en el monte ante Yahveh". La idea era que debía esperar el paso de Yahveh.

Comienza con el paso de un huracán fuerte, pero en él no está Yahveh, luego viene un temblor, y tampoco encuentra a Yahveh, después del temblor sigue fuego, pero no estaba Yahveh en el fuego, finalmente pasa el susurro de una brisa suave, entonces Elías oye esto, cubre su rostro con el manto, salió y se cubre el rostro con el manto, salió y se puso en la entrada de la cueva, allí habló con Yahveh.

No es dificil darnos cuenta de dos cosas en esta lectura: En primer lugar la manifestación del Señor, como un susurro de una brisa suave, y en segundo lugar la actitud de Elías que escucha, que está a la espera del paso del Señor. Es necesario tener la actitud de Elías para darnos cuenta que el Señor está pasando por nuestra vida, para escuchar su llamado, para escuchar lo que nos dice, sus instrucciones para nuestra vida.

"Al oirlo Elías, cubrió su rostro con el manto, salió y se puso a la entrada de la cueva".

Elías está a la expectativa del paso de Dios, está expectante, no hay otra cosa más importante que eso en la circunstancia en la que se encuentra. Es por eso que oye el suave susurro de la brisa, y rápidamente se pone el manto y sale al encuentro de su Señor.

Podríamos preguntarnos si esta es nuestra actitud en el día a día. ¿Estoy a la espera del paso del Señor? o más bien para mí son más importantes otros asuntos, por eso que si espero, lo hago pensando que su paso será algo que irrumpirá con fuerza lo que ya estoy haciendo, irrumpirá mi momento de estudio en el colegio o en la universidad, o quizá mi momento de trabajo, algo así como un huracán o temblor, quizá fuego, que llame mi atención y haga que gire totalmente hacia él.

Una vez más el Señor nos muestra que se manifiesta en el silencio, en lo suave del susurro de una brisa. Si no tenemos la actitud de Elías, de estar a la espera del Señor, no podremos darnos cuenta de ese susurro y simplemente pasará sin que nos demos cuenta. Nos habremos perdido del diálogo con el Señor.

jaja, muy buen remate! :)