Sínodo: retransmisión en directo y publicación íntegra de las intervenciones
Ya desde la primera parte del Sínodo sobre la familia el papa Francisco ha venido invitando repetidamente a los padres sinodales a que hablen con claridad, digan todo lo que tengan que decir y vivan este acontecimiento con total libertad. Nada que callar, nada que ocultar.
Desde este deseo del santo padre, un servidor humildemente suplica que sean públicas las intervenciones de los padres sinodales. Por supuesto que no me refiero a las discusiones en el seno de los círculos menores, pero sí a las intervenciones de los padres en el plenario.
Cada día nos llegan rumores y filtraciones. Que si un arzobispo canadiense, monseñor Duracher, pide ordenación de diaconisas, otro, el cardenal Napier, que tranquilos que no parece que haya manipulaciones. Que si Moisés, la dureza de corazón y la misericordia, que dijo el cardenal Lacunza, al que parece replicó el patriarca melquita.
Son meros ejemplos de cosas que vienen aconteciendo en la asamblea sinodal y que llegan a los fieles gracias a que un obispo comenta, otro dice que han dicho, y el de más allá que miren esta mañana por dónde ha ido la cosa.
Familia. Sínodo que está levantando tremenda expectación y no poca preocupación. ¿Acaso los fieles de la Iglesia que no estamos allá dentro, obispos, sacerdotes, religiosos, laicos no tendremos más información que una exhortación postsinodal y cuando llegue? Con cerca de 250 participantes, no van a pretender el silencio absoluto, porque ya se sabe que quien más y quien menos va soltando cosas a sus amigos obispos, periodistas o lo que fueren y las cosas se van filtrando y además siempre de forma torticera, porque no es igual lo que se dice que se ha dicho, que la intervención exacta. Tampoco basta el resumen del P. Lombardi.
En aras de la transparencia, de dejar de considerar infantil al pueblo de Dios y de paso que cada fiel conozca lo mejor posible qué piensan sus obispos ¿sería tan complicado que al acabar cada jornada se hiciese llegar a los medios el texto completo de las intervenciones de los padres en la asamblea sinodal?
El santo padre se ha mostrado en múltiples ocasiones completamente contrario a los dimes y diretes en la vida de la iglesia, como no podía ser de otra manera. Pues que no nos pase en el Sínodo: luz y taquígrafos. Y no solo eso, yo pediría incluso retransmisión en directo de la asamblea sinodal. Insisto, no comisiones, no grupos menores, pero ¿por qué no asamblea? Por ejemplo, tras la petición de Durcher parece ser –qué mala cosa eso de parece ser- que hubo padres sinodales que aplaudieron. Perfecto. ¿Muchos o pocos, hubo también abucheos, quiénes eran unos y otros? ¿Pasa algo por que se sepa? Es que lo contrario, en estos tiempos de comunicaciones, suena mal y encima garantiza poco. Anda que no es fácil con el móvil sacar fotos, grabar… Y eso es peor.
Luz y taquígrafos. Retransmisión en directo de la asamblea. Texto íntegro de las intervenciones de cada padre en la asamblea. ¿Dónde está el problema? ¿Miedo a algo, a alguien? Y mejor aún, saber quiénes se opondrían a la retransmisión en directo y a la entrega de la propia intervención, porque sería de lo más esclarecedor.
36 comentarios
Con la venia, yo matizarÍa el texto en el sentido siguiente: "y para empezar, saber...". Me parece más...¿'clarificador'? Un saludo, D. Jorge, después de tanto tiempo sin asomarme por estos lares, pero no por olvido.
Y aunque apoyan la reforma sinsentido y la ruptura, podrían luego pintarle la cara en su diócesis de origen
Y, como dice la voz popular, menos cojon...s que una pava. Y disculpe la expresión.
No. Hay demasiada información. Nadie puede hablar libremente cuando siete mil millones de personas están escuchando y esperando para malinterpretar sus palabras. Lo correcto sería que sólo se publiquen las conclusiones y que éstas sean respaldadas unánimemente por TODOS los padres sinodales, por muy en desacuerdo que hayan estado durante la discusión.
Si dejamos que cada frase se escape, terminaremos con diez mil "iglesias" y no con una.
A los tradicionalistas, no nos hace falta sínodo alguno, está muy clara la doctrina de Cristo sobre la familia, y lo que siempre ha dicho el Magisterio de la Iglesia en estos poco más de dos mil años.
A los modernistas sí les hace falta el sínodo, pues como muy bien denunciaba el Papa San Pio X, en su encíclica Pascendi:
....Y como una táctica de los modernistas (así se les llama vulgarmente, y con mucha razón), táctica, a la verdad, la más insidiosa, consiste en no exponer jamás sus doctrinas de un modo metódico y en su conjunto, sino dándolas en cierto modo por fragmentos y esparcidas acá y allá, lo cual contribuye a que se les juzgue fluctuantes e indecisos en sus ideas, cuando en realidad éstas son perfectamente fijas y consistentes; ante todo, importa presentar en este lugar esas mismas doctrinas en un conjunto, y hacer ver el enlace lógico que las une entre sí, reservándonos indicar después las causas de los errores y prescribir los remedios más adecuados para cortar el mal.
La táctica es la misma que la que emplearon en el nefasto Concilio Vaticano II, un lenguaje ambiguo, indefinido, impreciso, muy vago, muy oscuro, rupturista en algunos puntos con el Magisterio anterior y que se puede interpretar de múltiples maneras. (por eso el Concilio Vaticano II, necesita una hermeneutica o interpretación, y todo aquello que necesita de hermeneutica es porque no está claro, y todo lo que no está claro, lo que es confuso, no viene del Espíritu Santo)
Como se puede interpretar la doctrina de múltiples maneras, también la pastoral, la práctica sacramental y la moral sexual.
Así pues queda corrompida la pastoral y la práctica sacramental, la disciplina eclesiástica no se puede aplicar con rigor porque no hay un criterio firme, no hay firmeza doctrinal
Lo primero que debería hacer la Iglesia y el Papa, es no convocar sínodo alguno, cuando tenemos tan claro la Doctrina y el Magisterio bimilenario, y aunque el Papa, consiga mantener la doctrina de siempre, seguro que la presión de los masones y modernistas hará que anexe algunos "retoques", a gusto del mundo, del demonio y de la carne.
Retoques que le sabrán a poco a los modernistas, y maniobrarán para que el próximo Papa, sea un Papa (falso, electo mediante la traición o engaño), que colme sus aspiraciones, y haga oficial en la Iglesia sus errores y herejías.
Al mundo, la Iglesia, le debe decir lo mismo que siempre ha dicho, sobre la familia, y con eso basta.
No se les debe de dar ninguna oportunidad a los modernistas, de exponer colegiadamente sus herejías y en este sínodo la tienen, pues ya han ascendido a las más altas cimas de la Iglesia.
Nuestra catolicidad pasa por ver la excelencia pastoral de Juan XXIII y la enorme categoría intelectual de Pablo VI. Apreciar la santidad, la valentía en anunciar el Evangelio sin concesiones y con brillante y creadora teología de Juan Pablo II, junto a su mano derecha, luego sucesor Ratzinger.
Estas son las maximas figuras que llevaron a la Santa Madre Iglesia a un altísimo nivel pocas veces visto en su historia. Son promotores e hijos de ese admirable Concilio, el Vaticano II, tan escrupuloso en sus documentos, casi nunca leídos por quienes lo denostan automáticamente o por quienes lo invocan en el vacío para amparar sus tropelías. Concilio que invita a hablar al mundo cara a cara, sin miedo como nos pide el Señor.
Por eso, en este tiempo de tribulación a un católico en serio, nada ni nadie lo mueve del Evangelio, del Sacrosanto Concilio Ecuménico Vaticano II y del catecismo de San Juan Pablo II.
El secretismo en el sínodo, el caso del sodomita Charamsa, la falta de reprobación de las herejías de ciertos cardenales...
Saludos cordiales.
Bueno... ni este Sínodo contra la familia, ni el Vaticano II, ni el Vaticano I ni el Concilio de Trento (que sólo hacía falta a los herejes).
Tampoco nos hace falta la Nueva Teología, ni la nueva pastoral.
Nos basta con las palabras de Cristo vividas y plasmadas, y creídas y celebradas en la Tradición de la Iglesia.
Este Sínodo mejor que nunca se hubiera celebrado.
Roguemos a san Miguel que contenga en el orco a Satanás y a todos los demonios que clarïsimamentr a día de hoy andan sueltos para lo de siempre: la perdición de las almas.
La mision urgente de todos los hijos de Dios no puede ser confundir a los no sabios (como yo) pero valientes y sensatos, bombardenado soterradamente nuestra fe en el Espíritu Santo y regando gasolica sobre los que intentamos impedir que sea incinerada..
MAL hace cualquier tipo de pseudo telogo Católico, en alimentar angustias de almas sencillas, todas lectoras de estos escritos por ser publidaos por quien los publica, en momentos en que el Papa Francisco, guiado por ese Espiritu santo (tantas veces soterradamente pordebajeado por nosotros) hace ingentes esfuerzos de evitar el sisma o hasta eventual resultado de antipapa.
Aunque también es cierto que el secretismo conduce a rumorología y que ésta tampoco es buena.
Un saludo
Por favor, no nos deje como ovejas sin pastor. Váyanos informando por favor de lo que va pasando.
También tenemos derecho a saber quiénes son los verdaderos pastores fieles a Nuestro Señor Jesucristo.
Sé perfectamente de lo que hablo, por haber estado en un grupo, católico por más señas, que emplea ese tipo de táctica, incluyendo el secreto de arcano, y amenazando con tremendas desgracias a quién lo rompa. Y se puede romper simplemente por decir a los propios hijos, el motivo por el que se deja tal grupo.
Y me vienen al pensamiento los versículos de las sagradas escrituras en dónde se habla de los hijos de la Luz y de los hijos de las tinieblas.
Queden con Dios.
sistema informativo para crear confusion. Leo asiduamente sus bolgs en infocatolica siempre interesantes como amenos
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sistema informativo. Leo asiduamente sus bolgs en infocatolica siempre interesantes como amenos
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no existe más que la oración para que interceda el Espiritu Santo.
A mí me parece que está muy bien que no conozcamos todas las intervenciones de los Obispos. Precisamente nuestros pastores, "sobradamente preparados", se han reunido para aclarar ideas y conceptos para luego poder explicárnoslo a todos los fieles, que no estamos tan sobradamente preparados; creo que nuestra importantísima contribución al Sínodo es rezar para que sea el Espíritu Santo quien ilumine a los participantes.
Querer saber qué Obispo dice qué es inoperante, y creo que solo contribuiría a la división dentro del aIglesia (yo soy de tal obispo, yo soy de este otro). ¿De qué sirve saberlo? ¿es que vamos a juzgar cada fiel de la Iglesia quién tiene o no razón?¿no nos estará faltando un poquito de humildad?.
Entiendo que se trata de buscar la Verdad de la familia, y desde esa Verdad, contestar a las preguntas que se nos presentan a día de hoy sobre la familia.
Por favor, RECEN todos por el Sínodo.
Un abrazo D. Jorge
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