Milagros cotidianos de la capilla de adoración perpetua

¡Pues claro que brotan muchas confesiones de la adoración!.
Nuestra fe es tan débil (acordaos de Pedro andando sobre las aguas, ¡y fue el único de los apóstoles que se atrevió a pedirlo!), que a veces parecemos olvidar que la Eucaristía es la presencia VIVA y REAL de Cristo y el poder del mismo Cristo en cada uno de nosotros.
Gracias por este comentario D. Jorge, a mí me ha ayudado mucho y me lanza a la adoración ante el Sagrario.

Instaurar la capilla de Adoración Perpetua es lo mejor que ha hecho usted en su vida, seguro.

Gracias por su valentía Padre Jorge. Mucho ánimo! Aparte de los infinitos beneficios que tiene para su parroquia y parroquianos, mantener una capilla de Adoración siempre abierta -y a poder ser con las puertas abiertas- me parece una de las mejores formas de Evangelizar -ver Frossard-.

Sospecho que no está listando las curaciones milagrosas porque nadie le creería. Pero yo sé: las hay.

En mi parroquia se lleva un libro de testimonios en la capilla de adoración perpetua (ocho añitos recién cumplidos, ya vamos saliendo de la niñez). Y está repleto de milagros.

Quedo perplejo, en especial, por aquellos que desde tan lejos y a tales horaS vienen a la adoración del Santísimo.

Yo no cuento con esta posibilidad no obstante si así no fuera este ejemplo de fe, me acomplejaría como persona poco consecuente con sus creencias.

Tanto al padre Jorge como a los adoradores os felicito.

Extraordinario. Sólo Dios basta, desde luego. Siempre habrá sed de Dios, como inagotable es Su Amor por sus hijos.

Que Dios le bendiga a usted y a todos los adoradores. Ya lo hace...

Padre, qué hermosísimo ejemplo para todo el mundo ! es un faro en medio de las tinieblas espesas de este siglo!

A los lectores de Madrid: les recomiendo que se dirijan por correo electrónico al p. Jorge y le pidan un turno de una hora semanal en la capilla de Adoración. Es fácil (hay estación de metro cercana) y el resultado/beneficio espiritual es enorme. Es el mejor modo de combatir los males de nuestro tiempo.

Felicidades Padre Jorge.
Se necesita abrir más capillas de Adoracion Perpetua en todo el mundo, donde yo vivo hay muchas, y asisto sin falta todos los días, después de la Sagrada Eucaristía.

Sinceramente, cada vez que se habla de la Capilla de Adoración Perpetua doy gracias a Dios por haber encontrado la perla oculta de que habla el Evangelio: parece una necedad, una pérdida de tiempo, y sin embargo, y lo digo por experiencia, el lo más inteligente y el tiempo mejor empleado. Un bálsamo en el sufrimiento y paz en las alegrías de la vida y tener la conciencia, las 24 horas, que Jesucristo está a tu lado en todo lo que haces y te acontece.

"Cuando abrimos la capilla de adoración perpetua, he de decir que mucha gente, incluidos los coordinadores de turnos, no daban una perra chica por el proyecto. Más aún, me decían que se lanzaban por mi insistencia, que por ellos no quedaría, pero que era un imposible".

Exactamente eso fue lo que pensé yo cuando comencé. Y llevo ya 5 años...

Padre, muchas gracias,por su iniciativa,ahí está el Señor, que se extienda a todas partes,la gran esperanza de la Iglesia,lo he escrito es que se Respete a Dios,silencio, recogimiento,oración, el examén de conciencia,Dios iluminá la razón.

Es Todo Gracias a Usted.

Estoy pasando por una crisis de fe espantosa. Ruego una oración.

Estoy muy perdido y no se que hacer. Hablar algún minuto que otro con un sacerdote no ha logrado demasiado. Supongo que la Iglesia debe de tener algún tipo de recursos para estos casos. Si alguien sabe algo..

Gracias.

Cuánta paz encuentra el alma en esa visita al Santísimo. Padre Jorge, muchas veces parece que para recibir un signo de Dios, y ni siquiera le llamo milagro, un signo, una luz, como puede ser mejorar en el trabajo, o encontrar la paz con un familiar, habría que desplazarse a lugares lejanos, a ver apariciones que con todo respeto, a veces demoran muchísimo en ser avaladas por la Iglesia, si es que al fin lo son. Y sin embargo, en la Presencia Eucarística está el Señor, siempre, sin dudas, sin tener que someterlo al análisis de una comisión investigadora, sin esperar pronunciamientos del Papa, en fin: cómo no va a haber signos y aún milagros en la Adoración Eucarística, sobre todo en estos tiempos de angustiosa oscuridad.

Jose.Granada:

Todos pasamos por esas crisis de fe. Y los santos, más aún. Cuenta la Beata Teresa de Calcuta en su autobiografía que durante gran parte de los últimos años de su ministerio perdió la fe. Y que solo seguía haciendo lo que hacía porque se sentía comprometida, no porque le "naciera".

Un recurso que le puedo recomendar es leer sobre la vida de los santos y fijarse especialmente en aquéllos que han sufrido crisis de fe. Son muchos. A veces creo que todos, pero no siempre quedó registrado así en sus biografías.

Y luego, haga como Teresa: Arrodíllese y rece, aunque no crea en eso. Cincuenta avemarías diarias no le van a devolver la fe, pero le van a ayudar muchísimo. Si tiene oportunidad de ir con el Santísimo, vaya y plántese frente a Él aunque en su mente siga creyendo que eso es sólo un pedazo de pan. Tan pronto tenga oportunidad, hágase un examen de conciencia y vaya a confesarse, aunque su mente racional le diga que no hizo nada malo y que el cura no tiene ningún poder sobre sus pecados.

No se imagina usted la cantidad de veces que yo he hecho eso -y sigo teniendo crisis de fe, no crea- pero en algún momento "algo" pasa. No se pierda la oportunidad de experimentar ese "algo".

José. Granada.

Siento que estés pasando ésa crisis de fe. Es algo demasiado habitual en estos tiempos que nos han tocado vivir, de agnosticismo o ateísmo generalizados, en dónde lejos de que el ambiente que nos rodea nos ayude a fortalecer ésa fe, ocurre todo lo contrario. Sólo la Gracia de Dios hace que no nos vengamos del todo abajo.

Le Iglesia debería de tener algún tipo de recurso para esos casos, efectivamente, pero yo no sé de ninguno. Precisamente entré en uno de los movimientos de la Iglesia para encontrar un fortalecimiento de mi fe y ocurrio todo lo contrario. Y la actitud de muchos que se dicen cristianos, tira para atrás, de lo fría, lo distante, lo cruel, y absoluta falta de caridad y amor por el hermano que sufre.
Todo ello muy evangélico.

Así que si te enteras de algún tipo de recurso de la Iglesia para casos graves, bien sean de pérdida de la fe, de no encontrar sentido a la vida, de tristeza, de miedos, de angustias... haces el favor de decírmelo. Yo desde luego no lo he encontrado.

Rezo por tí, para que salgas pronto de ése estado de crisis de fe en el que te encuentras.

Que Dios te bendiga.

Gracias David Q y Isabel. Me puedo pasar horas en internet leyendo sobre la credibilidad de los Evangelios, las vidas de los santos, los milagros... pero siempre está de fondo la tentación cientifista que dice "paparruchas"... "es un invento"..

No ayuda un entorno cientifista deseando de "salvar" de la "ignorancia" o la "superstición" al "capillitas" del grupo.

No es que no crea en nada, más bien, es la duda insidiosa, que se clava, la desconfianza sobre la Iglesia.. de hecho a veces leer el Evangelio es casi contraproducente. A cada línea salta la duda. Y si nos vamos al viejo testamento apaga y vamonos.

A veces he tenido días que me quedo tirado en la cama temblando y sin poder dormir.

No se si en mi estado puedo confesarme. Sería de gran ayuda saberlo. Al fin y al cabo la fe, por mucho que uno se predisponga y tal.. es un don de Dios. Acudir a la confesión quizás ayudaría.

Isabel, paisana, si me entero de algo te aviso. He pensado en hablar con alguien del camino catecumenal. Si escribes por estos blogs ya te contare.

Recuerdo a un sacerdote agustino en la parroquia que hay en calle Elvira decir aquello de «Nos hiciste, Señor, para ti, y nuestro corazón está inquieto, hasta que descanse en ti». Que gran verdad, no hay día que piense en esa frase, ojalá se cumpla en nosotros estas palabras.

Siempre he tenido especial devoción por San Agustín,"el más sabio de los santos, el más santo de los sabios".
En fin, gracias.

Buenos días José.

Llevo escribiendo en ésta casa, creo que va para un año. Y fue gracias a un compañero comentarista que escribe en el blog del Padre Fortea, el que habló de Infocatólica, especialmente del blog del Padre Iraburu. Gracias a Dios y a éste señor, todos los días paso por ésta casa, que ya es cómo si fuera también la mía.

Lo que a tí te pasa, es lo más normal del mundo en los tiempos que vivimos, y el motivo de que muchos que antes se confesaban cristianos, se hayan apartado de la fe, hasta vivir contrariamente a cómo nos dice el Evangelio que debemos vivir.
Cómo tú dices, estamos "bombardeados" por "noticias" que buscan, no sé por qué, acabar con la fe, y que son un ataque contínuo a todo lo que sea cristianismo especialmente. Si te fijas, las otras religiones, prácticamente no tienen ataques a su fe. Bueno lo de que no sé por qué, es un decir. Si sé por qué, para defender sus ideales mezquinos y malvados para los cuales el cristianismo es un estorbo.

Sobre "la tentación cientifista" cómo tu la denominas, tengo que decirte que hay incluso grandes sacerdotes que a su vez son grandes científicos. No hace mucho en un blog de ésta casa, se enumeraban a bastantes de ellos. No recuerdo el nombre del blog, pero si buscas lo encontrarás, porque no hace mucho de ésto.

También te diré que tengo incluso entre mi familia a personas con formación científica que son buenos creyentes, y bastantes compañeros de éstas personas que también lo son.

Dices que no te ayuda leer la Biblia; a mí gracias a Dios sí que me ayuda, tanto el Antiguo cómo el Nuevo Testamento. Tengo por costumbre, cuando cierro por la mañana internet y antes de ponerme con mis labores cotidianas, leer un rato la Biblia. Empiezo por el Antiguo Testamento: Génesis, Libro de Samuel, Salmos, Libro de Job, Hechos de los Apóstoles y Evangelio. Cada día leo un capítulo de cada uno de ellos por orden. Te puedo asegurar que salgo muy reconfortada.

En tu estado sí que deberías de confesarte. Sería muy necesario que lo hicieras. Hablas de la iglesia de los agustinos en la calle Elvira "Los Hospitalicos" en dónde tiene especial devoción Santa Rita, que especialmente los días 22 de cada més, recibe abundantes visitas de sus devotos. Pídele a ella que interceda por tí ante Nuestro Señor. Es una santa muy venerada especialmente en Granada. La otra imagen que se venera de ella está en San Pedro, en la Carrera del Darro, frente a la calle Zafra y al convento de tal nombre. De chica, desde un año hasta los siete, viví en la calle Zafra, y mi madre que en Gloria esté, me decía Santa Rita la llorona, porque según ella lloraba mucho.

Te puedo asegurar que alguna vez que me he confesado en los Hospitalicos (agustinos), los confesores son magníficos, y no tienen prisa ninguna, cosa que en éstos tiempos es de agradecer. También me han hablado muy bien de los sacerdotes del Opus Dei, que están en la iglesia (me parece que se llama) de San Idelfonso.
No dejes de hacerlo, aunque ahora mismo sientas tu alma vacía. Precisamente por éso, te hace mucha falta una dirección espiritual, y fortalecer tu fe, porque la vida sin fe, es un páramo desierto sin sentido alguno, y sin fe, ni siquiera hubiera valido la pena estar en ella. Al menos es mi sentir.

Dios quiera ayudarte en tu camino de fe y a mí en el mío. Igualmente a todas las personas que buscamos estar unidas a Él que es Nuestro Padre.

Dios te bendiga.

Para José de Granada:

Yo pasé hace años por una crisis de fe parecida a la tuya. Todo me parecía un cuento chino desde el punto de vista científico/racional. Con el tiempo aprendí que no hay que romperse la cabeza buscando explicación a cosas que simplemente no la tienen ni pueden tenerla, porque con nuestra mente limitada es imposible abarcar la inmensidad de Dios.

En mi caso, fue el encuentro con personas santas el que me hizo convencerme de que Dios estaba en ellas. Aunque no te diga nada, continúa frecuentando los sacramentos, por ejemplo la misa dominical o la confesión cada uno o dos meses (yo así lo hice). Si hace tiempo que no te confiesas y no sabes cómo empezar, simplemente dirígete a un cura y se lo dices; lo normal es que mantenga una charla contigo y así irás hablando de todo de forma natural. En mi caso, nunca llegué a manifestar abiertamente mis dudas de fe (hay quien siente la necesidad de decirlo, yo nunca lo hice), y ésta fue volviendo con la mayor naturalidad del mundo mediante el trato con personas santas que fui encontrando en el camino.

Buscad, y hallaréis, pedid y se os dará, dice la Biblia. Eso hice yo, buscar. No te canses nunca de buscar a Dios aunque pienses que estás dando palos de ciego. No esperes encontrar explicaciones racionales a tus dudas porque no las hay, pero la presencia de Dios la acabarás notando tarde o temprano, no te rindas.

En cuanto a la influencia de tu entorno, es mejor que no trates de rebatirles, simplemente elude el tema y di que no te interesa, porque a fin de cuentas ellos hablan desde sus prejuicios y desconocimiento. No pierdas el tiempo con ellos, cuando encuentres a Dios se te quitarán esos agobios y te dará igual lo que te digan porque entonces tendrás respuestas, si no para ellos, al menos sí para ti mismo. Y con eso te bastará.

Me he empeñado en poner el nombre de la persona a la que va dirigido mi comentario en el lugar dónde tendría que ir el mío. No es la primera vez que me pasa. Perdón.

José, apártate de todas las informaciones que puedan apartarte de la fe, y busca otras que te acerquen a ella. Al igual que hay científicos que van contra la fe, hay otros igual o más valiosos en su profesión, que no solamente no van contra la fe, sino que incluso son personas consagradas.

Muchas veces pienso que solamente por la ayuda que recibo del Señor, llevo mi cruz con alguna soltura, y hasta a veces con alegría. Duermo todas las noches de un tirón, eso sí, mis sueños no son agradables, pero es que no se le pueden pedir peras al olmo. Y te puedo decir que en los momentos más difíciles de mi vida, es cuando he sentido a Dios más cerca de mí.

Saludos cordiales.

En Sevilla hay una capilla de adoración perpetua, que me ayuda mucho. No vivo en Sevilla, pero voy por trabajo muchas veces. Y el Santísimo ya ha actuado sobre mi como un imán... Salía a mis quehaceres, y volvía. He hallado consuelo en su presencia
Al hermano con crisis de fe: vaya al Santísimo Sacramento y oiga en su interior. Rece a nuestra Madre, pida luz
Le escuchará

Jose. Granada

Lo que yo quise decir es que si no lo siente fínjalo.

Sí, al principio parece una mentira, pero al final se vuelve realidad. Ya me ha pasado al menos dos veces con la confesión. He ido, sin ganas, sin arrepentimiento, convencido que todo eso es una mentira y que no sirve de nada. Pero he ido. Y en las dos ocasiones me ha pasado "algo" en los últimos cinco minutos.

No sé decirle qué es ese "algo". Alguien lo llamaría un milagro, otro inspiración divina, alguien más diría que es fe y un escéptico diría que logré engañarme a mí mismo. Pero el caso es que en el último momento me llegó el arrepentimiento y la fe.

Pero eso jamás hubiera ocurrido si no hubiera yo "fingido" antes de llegar al confesionario. Si yo hubiera tirado la toalla antes, si me hubiera negado a ir a hacer la fila para confesarme, no habría pasado nada.

Es como fingir una sonrisa para quitarse la tristeza, o salir a vender convencido que va a romper el record de ventas de la empresa. Es totalmente falso, lo sabemos. Pero en algún momento esa falsedad puede volverse realidad, si le damos la oportunidad.